Bahía Blanca | Lunes, 29 de abril

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Radiovisión Deportiva, una tradición bahiense y legendaria

El programa que pasó a ser un clásico del deporte local desde sus mismísimos inicios cumplió 50 años. Medio siglo de aire formando parte del quehacer de la ciudad, con identidad propia.
Reencuentro. De izq. a derecha, Eduardo López, Víctor Ungaro, Juan Meschini, Rafael Santiago, Carlos Nistal y Víctor Zelaya.

Por Nicolás Batista | nbatista@lanueva.com

   Es un lunes cualquiera. El reloj marca las 13 en punto. El ruidoso silencio de alrededor se complementa con el sonido radial. El oído se agudiza. La cortina suena y aparece una voz. Sí, “esa” voz. Llegó el momento…

   ¿Qué fanático del deporte en Bahía Blanca se abstiene de haber vivido esa situación en los últimos 50 años? ¿Existe alguno que haya escapado de ese hábito, casi imperativo, de escuchar la audición de Radiovisión Deportiva?

   “Era la avidez por esperar el programa. Porque tampoco existían las redes sociales, no existía la computadora, los diarios deportivos. En mi caso, esperar Radiovisión Deportiva de 13.15, que era la audición extra, era como se decía vulgarmente ‘esperar la misa’. De 13.15 a 13.30 tenías condensado lo que vos querías escuchar. Una bolsa de noticias muy fuerte y profunda, con todo lo que había ocurrido previamente”, resumió Juan Carlos Meschini, una de las voces deportivas más reconocidas del ambiente y quien actualmente se desempeña como Jefe de Deportes de LU2 Radio Bahía Blanca.

   “Uno podía leer La Nueva Provincia, pero Radiovisión era un poco esperar el momento clave para enterarse de todo lo que había sucedido, y refrescar todo lo que iba a pasar. La radio era una fiel compañera de todos nosotros”, añadió Meschini.

   Con estas frases, ¿cuántos fanáticos del deporte, de ayer y de hoy, pueden negar de compartir estas reflexiones?

   “Es un hábito. El oyente se va acostumbrando a ciertas voces y a ciertos modos que le cuentan las cosas”, enfatizó Rafael Emilio Santiago, encargado de la materia deportiva de la emisora local durante 29 años (1978-2007).

   “La presentación de Radiovisión, la hoja “1” esa, es para mí una síntesis muy bien definida de lo que es el día. Ya escuchando eso tengo una idea de lo que pasó --afirmó un ya jubilado Santiago--. Lo hago por hábito, porque no precisaría”.

—Pasa a ser una costumbre, digamos.

—Tal cual. Es como el mate, el cepillo de dientes. Está incorporado a mi modo de ser.

   En sí, al modo de ser de toda una ciudad.

Pasado, presente y futuro

   “¿Usted ‘Cacho’ en qué año se fue de la radio?”, preguntó uno. La respuesta de Víctor “Cacho” Ungaro fue tenaz, aunque con un tono de duda.

   Los recuerdos y las anécdotas empezaron a florecer mientras los (actuales y viejos) integrantes de Radiovisión Deportiva empezaban a reunirse en la oficina de deportes para asistir a la cita aniversario que el pasado jueves se emitió por LU2, que conmemoró los 50 años de aire de la clásica entrega de la ciudad.

   Medio siglo de vigencia. Deseo de varios, mérito de muy pocos.

   “Hay una vieja discusión que siempre estuvo enquistada en los medios locales que era: ‘si lo importante era el medio o quienes estaban en el medio’. Esta audición fue perdiendo, por una cuestión natural, gente muy valiosa; personas a las cuales estabas esperando escucharlas. Con el tiempo empezó a aparecer un grupo muy joven, y con pasión. Esto no solamente es un medio de vida; si esto no se ejerce con pasión es muy difícil de poder desarrollarlo”, explicó Meschini.

   “Nosotros seguimos con los mismos lineamientos. Y además me da la sensación que, por sobre todas las cosas, hay una parte de la sociedad deportiva bahiense que apoya la credibilidad. Es decir, sabe quién le está llevando el mensaje”, agregó.

   Sin embargo, el paso del tiempo y la invasión de nuevas tecnologías modificaron el contexto.

   “Radiovisión llegó a los 50 años y me alegro mucho. Pero tiene un desafío que es seducir a las nuevas generaciones. Tengo esa sensación. Además, no sobra tiempo”, indicó Santiago.

   No obstante, existe algo inalterable, un “no sé qué”, que lo hace una costumbre ¡bien bahiense! O como se encargó de definir un emocionado Meschini: “Radiovisión es…es un sentimiento”