Bahía Blanca | Lunes, 29 de abril

Bahía Blanca | Lunes, 29 de abril

Bahía Blanca | Lunes, 29 de abril

La regionalización y una mayor autonomía para los municipios como hechos tangibles

Un amplio grupo de legisladores nacionales y provinciales del radicalismo pasó por Bahía Blanca y la zona. Se reunieron con el intendente, la UIBB y la UNS, entre otros.

Emiliano Balbín, Nerina Neumann y Diego Garciarena.

La necesidad de una profunda regionalización, además de una mayor autonomía de los municipios, plantearon ante este diario legisladores radicales bonaerenses.

Diego Garciarena, presidente del bloque de diputados provinciales de la Unión Cívica Radical; la senadora bonaerense Nerina Neumann Losada y el diputado Emiliano Balbín, acompañados por el concejal bahiense Pablo Daguerre, brindaron su visión sobre el momento bisagra que puede tener a Bahía Blanca y la región como ejes de acciones conjuntas.

Luego de una nutrida agenda partidaria, de visitar la planta potabilizadora de ABSA, la Escuela Marina Copa y de encuentros con autoridades y dirigentes de la Universidad Nacional del Sur, de la Unión Industrial y de la Cooperativa Obrera, también hubo un encuentro con el intendente Federico Susbielles, al que Garciarena le regaló una camiseta de básquetbol del club de sus amores, Peñarol de Mar de Plata.

--Diego, si bien sos nacido en Balcarce tenés toda una vida en Mar del Plata. Ahora, mirando un poco a Bahía Blanca y si bien se las reconoce como potenciales líderes de regiones diferentes, cuesta encontrar lazos que las vincule.

--La verdad, miro a las dos ciudades y veo que tienen poder territorial, litoral marítimo e intereses comunes en cuanto a algunas industrias que piensan instalarse en el país. Por ejemplo, para desarrollar tareas en exploración y explotación petrolera. ¿Por qué no coordinar políticas en ese sentido? Y de paso, distribuir competencias con el objetivo de elaborar programas de fomento de radicación de industrias vinculadas a esas actividades para que no se nos vayan a otro lado. O no se nos metan en alta mar y, en definitiva, sólo seamos ciudades de paso. Son todas cuestiones a discutir.

--Un tema que es recurrente, pero queda sólo en expresiones de deseo, es el de la regionalización en la provincia. ¿Cuál es tu criterio?

-Las regionalizaciones no sólo deben pasar por cuestiones territoriales, sino también por realidades económicas, de intereses y programas comunes de desarrollo. Por políticas. Y para eso necesitamos que los intendentes, más allá de sus colores o ideologías, ¡hablen! La política tiene que hablar, recuperar el diálogo. La búsqueda del consenso que se ha perdido. La gente está podrida de la política porque no se habla. Pareciera que somos todos enemigos, cuando debemos laburar juntos en función de los requerimientos de la comunidad.

--¿Te parece preocupante la carencia de políticas estructurales, quizás por esa falta de consenso?

--Es que no existen políticas de Estado. Los países a los que les va bien son aquellos que tienen intereses permanentes. Siempre pongo el ejemplo de los Estados Unidos. Gana Bush, padre e hijo y se pelean con Irán. Gana Clinton y lo mismo. Y lo propio sucedió con Obama, con Trump, etc., etc. No cambia el interés del Estado en función del Gobierno. Tienen objetivos y van detrás de ellos sin titubear. Lo mismo tenemos que generar en nuestro país. Y qué mejor que empezar con nuestra propia provincia. No podemos tener siempre la misma mirada sobre la provincia de Buenos Aires.

--Se repite hasta el hartazgo que la provincia es inviable. ¿Es tan así?

--No es inviable. Lo que es inviable es que la sigamos mirando de la misma manera. Desde la perspectiva exclusiva del Conurbano. Con una problemática que no es equivalente a las diferentes coyunturas de los distritos del interior. Es muy heterogénea nuestra provincia. Será viable, entonces, en la medida que dotemos de presupuesto a la producción. Pero de verdad. ¡Si es una provincia que tiene de todo para producir! Y otorgándole un mayor nivel de autonomía a los municipios, que permita a los intendentes acordar políticas comunes e impulsarlas en regiones afines en cuanto al desarrollo.

--¿Y cómo ves a Bahía Blanca como eje de un ámbito superador?

--Mirá, todas las regiones de la provincia están más deprimidas que hace unos 20 años. Pero el potencial sigue ahí. Vigente. Acabamos  de tener un encuentro con el intendente Federico Susbielles y llegamos a un montón de acuerdos en la charla. O sea, no es difícil sentar buenas estrategias. Lo que se necesita es sentarse a hablar.

“Deberíamos representar una simbiosis”

--Nerina, sos de machacar sobre el tema de la regionalización y de una mayor autonomía de los municipios. ¿Se trata de causas posibles?

--Hay varios tipos de regionalización en función de lo productivo y las cuestiones que nos asemejan. Pero también hay una cuestión real y política, por ejemplo con diferentes regiones sanitarias que no coinciden con la región educativa. También de regiones judiciales que no coinciden con las regiones de trabajo. Podríamos empezar a articular para que cada región. Por ejemplo, nosotros como Región Sexta disponer de una misma centralidad en lo administrativo para que no sea todo tan burocrático.

“Días pasados, escuchando al gobernador Axel Kicillof, se hablaba de una provincia que nosotros no vivimos, no habitamos. Se mira a la provincia desde el Conurbano con una realidad que nada tiene que ver con nuestra región. Acá en Bahía visitamos ABSA. Caímos en la cuenta que no tenemos ningún representante en ese organismo que sea de Bahía Blanca o de la región. El diálogo es bueno, pero sentimos que estamos muy lejos de la toma de decisiones sobre nuestras vidas.

--Desde un lado hasta crítico si querés, ¿cómo ves a Bahía siendo nacida en Darregueira y hoy una habitante más de Coronel Suárez?

--Con Bahía me pasan dos cosas particulares. Una es que le siento mucho afecto. Desde la región siempre la miramos como un lugar de oportunidades. Diría que Bahía es una ciudad, en cierta manera, conformada por la región. Nosotros venimos acá a estudiar… Pero también tengo esa sensación que a veces nos expulsa. Es hora de que empecemos a mirarnos como toda una región, con el sentimiento de que Bahía no es más importante que su región, sino que tenemos muchísimas cosas importantes para generar en conjunto.

“Cuando yo era chica, recuerdo que Bahía era lo mejor que nos podía pasar. Veníamos con nuestros padres y abuelos a visitar a nuestros parientes, de vacaciones, al médico, a Casa Tía para comprar los útiles de la escuela. ¡A la cancha!, en nuestro caso de Villa Mitre. Hay que volver a esa sinergia con Bahía Blanca. El interior de la región necesita de Bahía como Bahía  necesita de la región. Deberíamos representar una simbiosis”.

“Recuperar ese sentimiento de región”

--Emiliano, como hombre de Salliqueló, ¿cómo identificás esta idea de regionalización?

--Yo ya tengo algunos años en la cámara legislativa y siempre luchamos por estas leyes diferenciales, que tienen que ver con las distancias, con los climas, con las realidades que se viven en el interior profundo. Y que a veces son difíciles de traducir o que se entiendan, como el porqué de la ley de Patagonia en la provincia de Buenos Aires.

--Hablemos de la zona fría…

--Que hoy la seguimos discutiendo con este asunto del DNU. Se trata de un tema sensible. En mi caso, y más allá de eso, presenté una ley del Oeste Medio frente a la realidad de distritos como Salliqueló, Tres Lomas y Pellegrini, que están fuera de la ley del Sudoeste. Competimos con La Pampa, ya que los precios son los de Patagonia en cuanto al comercio, la industria, el agro. Entonces van a cargar gas oil, a hacer las compras. Otra cuestión: En Salliqueló, a diferencia de Bahía y su zona cercana, somos Región Sanitaria II.

--¿Cómo aunar esas potencialidades afines, entonces?

--Hay que volver a recuperar ese sentimiento de región. La idea de potenciar, de competir. Hay que terminar con la conflictividad, con tanta antinomia. Nos hacen mucho mal esas miradas de ciertos dirigentes que se la pasan digitando con el dedo, que sólo agreden y que poco hacen por un entendimiento. Es hora de fijar estrategias conjuntas. Hay mucho por hacer para potenciar a toda esta gran región que nos tocó en suerte.