Si no les gusta, es mejor que no se lo digas

Redacción de La Nueva.

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Por Maximiliano Palou / nombre@lanueva.com

¿Te preguntaste alguna vez qué le pasa a una mujer cuando escucha un “mamita” o “con esa boquita...”?

Le molesta. Por lo menos es lo que dicen 6 de cada 10 en una encuesta de la Universidad Abierta Interamericana (UAI), realizada a unas 400 mujeres.

Por eso distintas agrupaciones en defensa de los derechos de la mujer llevaron adelante la Semana del Acoso Callejero del 7 al 13 de este mes. La idea es hacer visible el problema.

--El acoso callejero está compuesto por prácticas que fueron otorgadas a los hombres por una cuestión cultural. Tiene connotaciones sexuales y groseras. Y luego se llega hasta el avance físico, como el frotamiento en los transportes públicos -explica Verónica Bajo, titular de la agrupación bahiense Acciones Feministas.

En el sondeo, opinaron aquellas a las que les habían silbado, gritado o deslizado palabras vulgares mientras transitaban por la calle. Y dijeron sentirse incómodas, intimidadas e incluso violentadas.

Verónica dice que esta práctica es una forma de violencia a las mujeres.

--En nuestra ciudad se ve mucho en las obras en construcción. Por lo general las más expuestas son mujeres jóvenes, menores de 40, pero no hay un patrón en esto.

Agrega que las consecuencias son mujeres que tienen miedo de salir a la calle.

--Cuando una de estas mujeres ve a un grupo de varones cruza la calle. Cuando van solas tienen sensación de temor. Eso es producto de esta cultura patriarcal machista en donde los varones están en un rol dominante. Y las mujeres hasta llegan a sentirse culpables por la manera de vestirse. Todas las personas debemos transitar libremente sin sentirnos agredidas. Subir a un transporte publico sin que nos toquen.

--¿Está mal intentar hablar en la calle con una chica que me gusta?

--¿Por qué llegar a esta situación? Hay muchas maneras de seducir. ¿Por qué exponer a una mujer que quizás no tenga ganas? Es muy incómodo para nosotras. Los varones tendrán que ver otra manera de seducir.

--¿Qué debe hacer una mujer ante esta situación?

--Hay que entender que los cambios culturales se modifican de a poco. No hay que tener una actitud temeraria. Si va con un grupo de amigas o está en un lugar en que se sienta contenida quizás pueda expresar que eso le molesta. Siempre con un contexto de precaución porque puede haber una reacción.

--¿Los hombres no se dan cuenta?

--Es importante que como sociedad entendamos que hay que dejar de ver como gracioso al acoso callejero. Las violencias inocentes luego se ven en las violencias graves. Los femicidios son producto de una cosificación de la mujer. Hay que analizar qué nos hace reír, qué música escuchamos, si están bien las elecciones de reinas de belleza apoyadas por municipalidades o instituciones. Muchas veces pasa que se celebra el Día de la Mujer con un desfile de modas en donde se hace una exaltación de la mujer cosificada y se la ve sólo como estándar de belleza.