Indignación del propietario de un comercio al que le robaron

Redacción de La Nueva.

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“Tengo mucha bronca por todo esto, porque te saca la libertad de laburo”, afirmó ayer con evidente y justificada indignación, el dueño de un comercio situado en el macrocentro de la ciudad, quien ayer a la mañana descubrió que durante la noche o madrugada habían ingresado ladrones que le sustrajeron dinero.

Víctima del hecho resultó Lisandro Mónaco, titular del negocio dedicado a la venta de lácteos y fiambres llamado Monte Ralo, ubicado en la calle Alvarado 444.

“No siempre llego muy temprano, pero hoy (por ayer) tenía que entregar unos pedidos y al entrar me encontré con que entraron a robar. Estaban las cajas abiertas y cosas desparramadas”, dijo a este diario.

Señaló que los delincuentes consiguieron trepar hasta la planta alta del edificio e ingresaron en el salón de ventas por un ventiluz de pequeñas dimensiones.

“No me explico cómo hicieron para llegar hasta allí arriba. Con la policía miramos y no sabemos”, sostuvo el comerciante, para agregar: “Sacaron unos fierros de una reja de 5 por 2 metros. Debe ser una persona joven que entró a buscar dinero. La verdad es que estos muchachos tienen una habilidad asombrosa”.

Tras reconocer que no podía determinar el monto del dinero faltante, explicó que se trataba de “cambio y algo de dinero que encontraron; la verdad que revolvieron todo”.

El sistema de cámaras de seguridad instalado en el local fue desactivado por los delincuentes, aunque Mónaco opinó que “no es alguien que conocía, porque el segundo piso no lo conoce nadie. Entró, vio lo de las cámaras, y las desconectó”.

El comerciante ya había tenido experiencia con este tipo de episodio, según contó.

“Te sacan la tranquilidad de trabajo. Es la segunda vez que me pasa, ya que en otro local me habían entrado a robar y tuve un episodio con el ladrón, al que corrí”, dijo el vocero.

También reconoció que “lo estoy esperando hace rato”, pese a que el negocio posee diversas medidas de seguridad.

“El local, abajo es blindado, imposible entrar por ahí... Tengo una persiana, una puerta que no se puede violentar. El único lugar que quedaba era por arriba, pero les digo a los muchachos que no se entusiasmen, porque ya está arreglado, con alarma, y dispuesto para que no se repita”, señaló el damnificado.

Pero Mónaco también tuvo duras palabras en alusión a recientes hechos de índole institucional y a la inseguridad en que vive inmersa Bahía Blanca.

Bronca

“Dan bronca muchas cosas. Esta ciudad está bastante revolucionada hace algunos días y tengo muchísima bronca. Mientras todos se están peleando por un pedazo de queso, a nosotros nos siguen afanando. Mientras todos se pelean para ver quién tiene el número 1, a nosotros nos siguen robando”, cuestionó.

Y, en el mismo sentido, continuó diciendo: “toda esta gente, en vez de preocuparse por quién se queda con el sillón de respaldo alto, tendría que ocuparse por cuidarnos, porque laburamos para vivir y tenemos familias”.

“Ellos cobran unos grandes sueldos con poco trabajo, con una corbata y un saquito, y saliendo un ratito por televisión”, indicó.

Tras destacar que ya es tiempo de “hacer las cosas en serio”, aclaró que “no podemos culpar a la policía, porque ellos, desgraciadamente, si no tienen un código que los respalde, no pueden hacer nada. Hay que dejar de pelearse por estupideces y trabajar de verdad”.