Sus compañeros hicieron más de 3 mil horas extras para que cuide a su hijo con leucemia
Todos se sumaron a la idea de la jefa de recursos humanos de la empresa donde trabaja.
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Un hombre que quedó viudo en Alemania pudo cuidar a su hijo con leucemia gracias a un gran gesto de sus compañeros de trabajo en una fábrica de ensamblaje.
Se trata de Andreas Graf, quien perdió a su mujer por una repentina enfermedad cardíaca y ya no tenía días libres para pedir en el trabajo y así acompañar a Julius, su pequeño de tres años.
Pia Meier, la jefa de recursos humanos de la empresa, le pidió a los empleados que donaran sus horas extras para poder cubrir la licencia de Graf. Y la respuesta fue unánime: los 650 trabajadores de la planta aceptaron.
La gran mayoría, que ni siquiera lo conocía, firmó el acuerdo y en dos semanas acumularon 3.265 horas para que pudiera cuidar a su nene. En total, eran más de 18 meses de trabajo extra.
"Sin esta tremenda ayuda, me hubiera quedado sin trabajo", aseguró emocionado.
El hombre confesó que se quedó "sin palabras" cuando se enteró de la idea. "Lloré frente a mis amigos y me sentí completamente abrumado", recordó.
Hoy, Julius tiene cinco años y sigue en recuperación de su enfermedad. "Voy a estar eternamente agradecido a mis colegas y a la empresa", remarcó en una entrevista con la cadena RTL. (TN y La Nueva.)