Los vecinos del barrio Luiggi II se sienten marginados

Redacción de La Nueva.

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Desde hace siete meses, o más, los vecinos del barrio Luiggi II no cuentan con el servicio de agua. La mayor dificultad es para los moradores que viven en el segundo y tercer piso de los monoblock. "Apenas sale 'un hilo' de agua y en horas de la noche. Tenemos que andar cargando baldes para poder bañarnos y hasta para cocinar y utilizar los sanitarios", dijo una de las frentistas que junto a un grupo de residentes del lugar piensan conformar una comisión para reclamar con mayor firmeza ante las autoridades todos los problemas que se registran en el complejo habitacional.

Indicaron que no cuentan con un consorcio y que tampoco nunca les fueron colocados medidores de agua y, por lo tanto, no pagan el servicio.

"Nosotros queremos que nos coloquen los medidores y no tenemos problemas en pagar la prestación. De esa manera, pensamos que ABSA se va a preocupar por brindarnos de la mejor manera el servicio".

"Hoy no tenemos nada. Nadie nos responde. Nos sentimos marginados, abandonados. El intendente nos trató de 'mugrientos' y no somos nosotros los que juntamos basura, es gente que viene de otro lado a tirar aquí", dijo Marcial Constanzo, con la aprobación del resto de los vecinos presentes.

También comentó que están desprovisto de iluminación en los sectores comunes, con lo cual en la noche la zona se convierte en "una boca de lobo".

"Ya hubo muchos robos en los autos. Y representa una inseguridad para todos. Hicimos los reclamos, pero nadie viene a darnos una respuesta. Van a venir recién cuando llegue la época de las elecciones. Y nosotros necesitamos respuestas ahora".

"Además, junto al jardín los mismos vecinos tuvimos que cortar los pastizales. Y vinieron a sacar un árbol, pero luego dejaron las ramas tiradas en una vereda", dijo José Carabajal.