Saint Exupéry
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Hace 85 años, en enero de 1930, llegó a la ciudad el piloto de la compañía aérea Aeroposta Argentina SA Antoine de Saint Exupéry, para participar de la implementación de la extensión de la Línea Patagónica.
Inaugurado en noviembre de 1929, el servicio aéreo entre nuestra ciudad y Comodoro Rivadavia fue el primero de cabotaje en el país.
Ideado para el transporte de cargas y correo, también los aviones –Laté 25 y Laté 28- servían para el transporte de pasajeros.
Saint Exupéry había sido designado jefe de la empresa luego de haberse desempañado en Cap Juby, en pleno desierto del Sahara.
En ese cargo llegó a Bahía, acompañado por técnicos de la compañía, con el objetivo de realizar un viaje de inspección de los campos donde se establecerían las estaciones intermedias entre Comodoro Rivadavia y Río Gallegos, todos con estaciones radiotelegráficas transmisoras y receptoras.
Los visitantes llegaron en un Laté 25 piloteado por Saint Exupéry, el cual descendió en Villa Harding Green a las 10:15. Luego de haber revisar el local donde se ubicaría la estación radiotelegráfica, se dirigieron al centro, donde ultimaron detalles con el ingeniero Francisco Marseillán del montaje de torres de acero de 30 metros destinadas a trasmitir con onda corta y larga.
Saint Exupéry partió a media tarde hacia el sur, acompañado por Rufino Luro Cambaceres, a las futuras escalas de Puerto Deseado, San Julián y Santa Cruz, hasta llegar a Río Gallegos.
La presencia de la Aeroposta –de capitales franceses- en el país se extendió hasta 1931. Saint Exupéry regresó entonces a Francia.
En 1943, un año antes de su muerte, dio a la imprenta El Principito, uno de los libros más editados en la historia de la literatura mundial.