Bahía Blanca | Viernes, 26 de abril

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En imágenes: un asalto en solo 17 segundos

 En ese lapso un ladrón redujo al playero de una estación de servicio y se apoderó de la recaudación.

   Diecisiete segundos parece un tiempo demasiado corto, sin embargo ese breve lapso fue suficiente para un delincuente que anteanoche asaltó al playero de una estación de servicio de Villa Mitre y escapó con unos 3 mil pesos de la recaudación.

   El hecho, que quedó registrado por las cámaras de seguridad, se produjo minutos después de las 23.30, en Falucho y Maipú.

   Hasta allí arribaron dos ladrones que se movilizaban en una moto, uno de los cuales descendió del rodado y se dirigió hacia la oficina en la que se encontraba el empleado Carlos Rodríguez y el chofer de una grúa que circunstancialmente estaba en el lugar.

   “Por lo que se observa vinieron en contramano (por Maipú) y uno se queda haciendo de campana; cuando ven la playa desocupada se acerca el otro”, describió Darío Quiroga, encargado de la estación.

   Explicó que “cuando llega a la puerta saca el revólver y le apunta al playero. Él (por Rodríguez) siempre trabaja con la reja cerrada, pero justo había mucho movimiento”.

   Comentó que generalmente los empleados no tienen esa cantidad de dinero en su poder, además de considerar que el ladrón “es cliente o ha venido varias veces”.

   Quiroga mencionó que el desconocido tenía colocado un casco y que al exigir más plata amenazó con golpear al trabajador.

   “Este hombre hace más de 25 años que es playero en esta estación de servicio y siempre de noche. Nosotros hace 11 años que estamos y lo heredamos. Es muy familiero y por eso estaba Luis, que trabaja en un grúa que está 24 horas a disposición y viene a hacerle compañía”.

   También consideró que el delincuente sorprendió a Carlos.

   “Es un tipo de temperamento fuerte. Hace tres años, más o menos, vino un flaco a molestarlo pidiéndole cigarrillos que no le podía fiar, justo cuando estaba despachando combustible en un colectivo. Y cuando esa persona lo encaró con un cuchillo, sacó el pico del surtidor y lo roció con gas... La noche es heavy”, agregó. 

   El de anteanoche fue el quinto robo en el lugar en los últimos once años.

   “Por suerte nunca hubo lastimados, pero un domingo a la mañana dos hombres asaltaron al dueño, que había venido a reponer mercadería, y lo ataron. Esa vez se llevaron la recaudación de la noche y cigarrillos. Todo eso pasó en cuestión de dos minutos y por esa razón pusimos las cámaras”, finalizó.