Bahía Blanca | Viernes, 26 de abril

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Todo lo que se sabe de los Turpin, la "familia feliz" que mantenía cautivos y encadenados a sus 13 hijos

En las redes sociales salían todos muy sonrientes. Sus vecinos apenas los conocían.

   El domingo en Estados Unidos la policía detuvo a una familia que parecía feliz. Al menos así se los veían en las redes sociales: todos sonrientes y con la misma ropa, como si fuera un uniforme familiar. Sin embargo, los Turpin mantenían cautivos y encadenados a sus 13 hijos en su vivienda de California.

   David Allen y Louise Anna Turpin, de 57 y 49 años, vivían con sus chicos en el número 160 de Muir Woods, en la localidad de Perris.

   Una de las hijas, de 17 años, logró escapar el domingo y llamó a la policía. Cuando los agentes llegaron encontraron a los hermanos, de entre 2 y 29 años, como "zombies". Estaban atados con cadenas y candados, según las autoridades, en un "entorno oscuro y hediondo".

   "Las víctimas parecían estar desnutridas y muy sucias", agregaron.

   El matrimonio está detenido bajo fianza de 9 millones de dólares cada uno y se los acusa de tortura y de poner en peligro a menores. 

   "Como pueden imaginar, tener 17 años y aparentar 10, estar encadenado a una cama, estar malnutrido y tener lesiones asociadas con esto es lo que yo llamaría tortura", advierte el agente de la oficina del alguacil del condado Riverside, Greg Fellows. 

   Según explica el alguacil, no se encontraron pruebas de abuso sexual o enfermedad mental, aunque "la investigación acaba de empezar".

   "No puedo entrar en los detalles de la conversación, pero pareció que la madre estaba perpleja ante las razones por las que estábamos en la residencia", agrega.

Qué se sabe de la familia

   La familia vivió en Texas muchos años antes de mudarse a California en 2010. 

   Anna Turpin trabajaba como ama de casa, sin ingresos, mientras David Turpin aparece, según los documentos que manejan los investigadores, con un trabajo relativamente bien pagado como ingeniero en la empresa de tecnología aeronáutica y de defensa Northrop Grumman.

   Sin embargo, con tantos hijos y su esposa sin trabajo, los registros sugieren que sus gastos excedieron sus ingresos y tuvo que declararse en bancarrota dos veces.

   Los documentos bancarios muestran que ganó más de 140.000 dólares en 2011, pero que los gastos de la familia excedieron su salario neto en más de 1.000 dólares al mes.

   La página de Facebook de la familia muestra numerosas fotos y videos de ellos, aparentemente felices y sonrientes, y muchas de las publicaciones contienen comentarios de familiares o amigos.

   Hay imágenes que indican que los esposos renovaron sus votos matrimoniales varias veces en los últimos años, a menudo con sus hijos presentes.

   En una serie de videos, se ve a la pareja en la capilla de Elvis en Las Vegas en la que David Turpin le dice a su esposa: "Te ofrezco este anillo como símbolo de mi amor, bebé, bebé".

El vecindario, la casa y una "escuela"

   En Perris las casas están muy juntas. Es difícil imaginar cómo una familia puede esconder un secreto tan oscuro y que nadie se entere.

   Ahora los vecinos están preocupados e intentan dilucidar si deberían o no haber detectado que algo estaba mal.

   James y Betty Turpin, los abuelos de los niños, explicaron a medios estadounidenses que sus nietos fueron "educados en el hogar".

   En el sitio web del Departamento de Educación de California, David Turpin figura como el director de Sandcastle Day School, una escuela privada operada desde su casa.

   La escuela se abrió en marzo de 2011, según el sitio web, y aparecen seis alumnos matriculados allí, todos en diferentes grados.

   En California, las escuelas privadas operan fuera de la jurisdicción del Departamento de Educación y de sus regulaciones.

   Los estudiantes y sus padres o tutores son directamente responsables de ellas y el estado no tiene autoridad para monitorearlos o evaluarlos.

   Los docentes de las escuelas privadas de California tampoco necesitan tener una titulación de docencia estatal válida.

Fanáticos de la Biblia

   Los abuelos aseguraron que a los niños se les daba una "educación escolar en casa muy estricta" y que tenían que memorizar largos pasajes de la Biblia.

   A pesar de esto, Sandcastle Day School figura en los registros públicos como una escuela "no religiosa".

   Cuando los abuelos visitaron por última vez a la familia notaron que los niños "se veían delgados", pero que parecían una "familia feliz".

   Sin embargo, los abuelos aseguraron que no habían visto a la familia desde hace cuatro o cinco años y que solo hablaban por teléfono.

   Aformaron también que a los Turpin los consideraban en su comunidad una "buena familia cristiana" y que "Dios los llamó" para tener tantos hijos.

Como si fueran invisibles

   Una de las vecinas dijo que la familia "era del tipo de los que realmente no se sabía nada sobre ellos".

   "En retrospectiva, nunca hubiéramos pensado esto, pero había señales de alerta. Nunca se escuchaba ni se veía a los niños", expresó Kimberly Milligan.

   Esta vecina recordó que, en una ocasión, saludó a algunos de ellos mientras ponían un pesebre navideño en las afueras de la casa.

   Pero al verla, se quedaron inmóviles, "como si quisieran hacerse invisibles".

   Otro vecino, Nicole Gooding, contó que la primera vez que vio a la familia fue hace dos meses cuando la madre y los niños estaban limpiando el jardín.

   "Nunca los había visto hasta ese día", dijo el hombre que vive hace 3 años en la zona. (BBC, La Nueva. y Reuters)