Bahía Blanca | Viernes, 26 de abril

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La comarca serrana de Tornquist tiene ideas al alcance de la mano

La naturaleza bendice las sierras de Ventania. Así, existen emprendimientos turísticos que se muestran en un marco escénico inmejorable. Rol clave del INTA en estas actividades para la diversificación agropecuaria.
A escasos kilómetros de la ciudad cabecera de Tornquist, se puede disfrutar de un inigualable paisaje delante de las sierras de la comarca serrana.

Por Guillermo D. Rueda / grueda@lanueva.com

“El INTA incorpora la actividad turística como diversificación agropecuaria en la provincia de Buenos Aires y acompañamos toda iniciativa de los emprendedores turísticos; en este caso, oferentes rurales”.

Tal declaración corresponde a Julieta Colonnella, agente del proyecto de Turismo Rural para el Cerbas, con sede en Coronel Suárez.

Sucedió durante una recorrida por la comarca Sierras de la Ventana, en el partido de Tornquist, en pleno sudoeste bonaerense, donde el desarrollo del turismo rural cobra cada vez más protagonismo a favor a una escenografía natural y al trabajo de los lugareños por presentar una alternativa viable para el turismo de todo el año.

Federico Labarthe, jefe de Agencia del INTA en Tornquist, fue el anfitrión y es quien más conoce estos sitios estratégicos.

“Este lugar está bañado de paisaje”, le dijo a Federico Guerra, redactor de Intranet, órgano de difusión del INTA, sobre el circuito promovido por el propio organismo y difundido por la comuna de Tornquist a través de sus múltiples opciones turísticas.

Gonzalo Iparraguirre, del INTA Tornquist y asesor de este grupo de la comarca, afirma que aquí se pueden apreciar raíces históricas, sociales y culturales.

“Cada recorrido es un conocimiento ancestral a transmitir a los visitantes. En definitiva, buscamos revalorizar la identidad local y el respeto por el pasado y los valores del presente”, aseguró.

Uno de los prestadores de servicios, Horacio Delgado y su familia, llevan adelante un emprendimiento con equinos con, por ejemplo, travesías de hasta siete días recorriendo estancias de la región.

“Esto lo hacemos desde 1996. Y con el apoyo de la Asociación de Turismo de la municipalidad de Tornquist y del INTA vamos creciendo sobre firme”, aseguró.

De todos modos, Delgado aclaró que el turismo rural es una actividad complementaria que acompaña, en su caso particular, a la actividad ganadera.

Se destacó, asimismo, que la presencia del INTA es muy importante, ya que en los encuentros de turismo rural que se realizan surgen inquietudes y se buscan soluciones a problemas que surgen a diario al recibir a visitantes tanto de Capital Federal, Bahía Blanca o de ciudades vecinas. Se consideró clave escuchar las experiencias y el conocimiento de quienes ya están en el turismo rural.

Delgado posee 30 caballos para los visitantes y 50 propios.

La principal dificultad para quienes forman parte del grupo de la comarca serrana es lograr que a un contingente único le guste todo lo que se ofrece, desde cabalgatas, travesías en camionetas 4x4, recorridas por arquitecturas, naturaleza y gastronomía. En fin, alternativas que no se terminan en una visita de 24 horas.

En la estancia Mahuida-Co el paisaje es el que domina la escena.

Arroyos, animales desde burros y antílopes hasta ovejas y un muestrario inagotable de árboles hacen envidiable cualquier comparación con la vida urbana.

Teresa Wendorff es quien controla un lugar, desde donde se aprecia el techo de la provincia de Buenos Aires: el cerro Tres Picos, de 1.239 metros de altura.

Por las dudas, Wendorff también aclara: “El turismo rural es una actividad maravillosa, pero debe complementar con otras actividades agropecuarias para ser redituable”.