Un comité judicial inspeccionó durante varias horas la cárcel de Villa Floresta

Redacción de La Nueva.

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   Un comité de visita institucional, integrado por unos 20 representantes de distintos sectores relacionados con el Poder Judicial, monitoreó hoy la cárcel de Villa Floresta, durante una visita sorpresa para evaluar las condiciones generales.

   Encabezó la inspección el juez de Ejecución Penal Claudio Brun, quien en 2014 había dictado un fallo para que el Poder Ejecutivo mejorara distintas situaciones habitacionales en la Unidad Penal Nº 4.

   Lo acompañaron sus secretarios y personal de la Defensoría Oficial, de la Fiscalía, de la Procuración y del Colegio de Abogados.

   Divididos en 3 grupos, los funcionarios recorrieron los 7 pabellones del sector A y los 4 del B (el más nuevo), desde las 9 y hasta pasado el mediodía.

   Cada grupo entraba en el pabellón, le preguntaba al encargado por la capacidad y la población y después, al azar, recorrían 4 celdas al azar.

   “Algunos aspectos se mejoraron y otros todavía no. Lo que más nos preocupa es la sobrepoblación”, reconoció Brun a La Nueva.

En qué se mejoró

   *La alimentación (el depósito está abastecido).

   *El parque automotor (se incorporaron nuevos vehículos).

   *Asistencia médica (ahora hay guardias activas y no pasivas).

   *Se habilitaron los pabellones 2 A y 2 B (estaban bajo refacción y estuvieron clausurados como 10 años).

A medias

   *Sistema eléctrico y provisión de agua (en algunos pabellones se mejoró, aunque otros no presentan las conexiones o evidencian algunos riesgos).

Lo que sigue mal

   *Sobrepoblación y hacinamiento (el cupo está superado en más del 20%. En el sector 4 A, por ejemplo, debía haber 54 internos y había 80).

   *Desinfección (sigue habiendo cucarachas. Se incrementaron las tareas de desinfección, pero no alcanzan).

   *Infraestructura (cuestiones de mampostería, techo y revoques. Hay celdas que tienen huecos de un metro y que se comunican unas con otras).