Hugo fue albañil, hace fletes y regala ropa en la puerta de su casa
Por Pablo Goicochea / pgoicochea@lanueva.com
y Sol Azcárate / sazcarate@lanueva.com
Hugo Palacio fue albañil, ahora hace fletes y nunca le sobró la plata, pero siempre sintió la necesidad de ayudar a los demás, a los que la pasan peor. Por eso regala ropa.
Antes la llevaba a hogares, pero un día llegó a uno y vio que estaban tirando prendas en un contenedor.
—Se ve que había tanta cantidad, que se la tenían que sacar de encima.
Entonces, desde hace 3 años la ropa que va juntando la deja en la puerta de su casa de Brickman 74. Y el que quiere, se la lleva.
—No me puedo poner a controlar si lo hacen porque necesitan o por maldad. Cada uno tendrá cargo en su consciencia si lo hacen bien o mal.
Hugo dice que la "satisfacción" de ayudar a la gente se la inculcaron y que sabe que su ayuda es "un granito de arena", pero no puede quedarse sin colaborar ante "tanta miseria y tanta pobreza".
Cada día se llevan entre 10 y 14 prendas de la puerta de su casa y también hay gente que colabora con la causa y le deja bolsas de ropa.
—Cuando nos traen ropa medio sucia y rota, la lavamos y mi señora la cose para que esté acorde.
Hugo pone lo que tiene y lo que consigue.
Ahora que es pleno invierno, le piden zapatillas y ropa más abrigada. Por eso invita a colaborar acercándose a su casa o escribiéndole al correo pachanga.palacio@hotmail.com.