Cuestiones de bolsillo

Ricardo Salas

rsalas@lanueva.com

Sin fisuras, la gobernadora María Eugenia Vidal -un poco justificando la herencia financiera que le tocó recibir en la Provincia- ató su administración estatal al Gobierno nacional, incluida la política salarial que permita el normal inicio del ciclo lectivo.

“Estamos trabajando en equipo, como lo veníamos haciendo”, señalan equipos técnicos del Pro que desembarcaron hace 60 días en La Plata y que siguen en una suerte de período de “aislamiento”, no por malicia sino por desconocimiento de la botonera del tablero gubernamental de calle 6.

En la antesala de la segunda reunión paritaria por intentar destrabar una negociación muy complicada con el Frente Gremial Docente, trascendió la instrucción que recibieron de la Casa Rosada los ministros bonaerenses para que cualquier cifra de aumento salarial sea inferior al 30%.

Con el compromiso político de una revisión de las paritarias a mitad de año, en caso de una disparada de la inflación, y en medio del antipático tarifazo que recién comienza, la gobernadora podría convidar una pauta salarial “por encima del 23%, pero por debajo del 30%” para satisfacer el apetito de la dirigencia sindical. Básicamente, la estrategia pasa por evitar un paro en el inicio de clases previsto para el lunes 29.

Frente a la actual coyuntura económica, tal vez lo que la Provincia buscó fue ganar tiempo esperando “algún avance” en la negociación paritaria nacional

Un dato llamativo que arrojó la reunión técnica paritaria salarial pasada fue la presencia “casi perfecta” de funcionarios de las “primeras y segundas líneas” de Economía y Trabajo y del exgobernador Daniel Scioli, en momentos que gremialistas estatales reclaman que se terminen los despidos en distintos ministerios platenses.

Desde el peronismo opositor rebelde advierten que a la gobernadora le estaría faltando un “conocedor territorial” con ganas de “muñequear” en ámbito bonaerense, al margen del acuerdo que cerró con Sergio Massa , como “aliado confuso”, más los socios de la UCR.

Aunque prácticamente armó un virtual “cogobierno” en la Provincia, el líder del Frente Renovador tendría decidido empezarse a despegar políticamente del oficialismo. A priori, habilitó a sus espadas legislativas a “marcarle la cancha” a Vidal, cuestionando algunas medidas puntuales.

La temporada veraniega permite aún caminar en punta de pies. Al menos, hasta que Vidal llegue a principios de marzo a la Legislatura para dejar inaugurado un nuevo período de sesiones ordinarias.

En ese contexto, la diputada bahiense María Marta Corrado decidió participar de reuniones seccionales con legisladores y dirigentes del FR que apuntan a la consolidación del espacio, además de proyectar objetivos y propuestas concretas para la región. Corrado suena firme como una de las posibles integrantes de la Comisión Bicameral de Jurado de Enjuiciamiento dentro de la Cámara de Diputados bonaerense.

En tanto, el radicalismo legislativo, en sintonía con la postura del vice Daniel Salvador por confraternizar cada día más con la Gobernadora macrista, articuló una “prueba de amor”.

“En 2 meses se han realizado avances significativos en materia de gestión, que demuestran la voluntad de María Eugenia Vidal de subsanar los 28 años de derroche y desidia de gobiernos peronistas”, declaró el jefe del bloque de diputados de Cambiemos, Jorge Silvestre. También se ocupó de remarcar diferencias en el gasto público: “Se terminó el despilfarro de cargos y publicidad de la gestión K en Provincia”.

Una vez más, la política bonaerense tras el recambio gubernamental -junto a la presencia de la emblemática banda británica Rolling Stones en las diagonales- viene a ponerle “show” a la incertidumbre que generan siempre las negociaciones paritarias y contribuyen a crear un clima de cierta preocupación.