Soy Napoleón y un show con invitados
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Franco Pignol
fpignol@lanueva.com
Casi diez años de proyectos y realidades rockeras le dan a Soy Napoleón la autoridad que llega con el tiempo y el trabajo constante.
Surgida en el año 2007 se convirtió en una máquina de hacer canciones. Siempre apostaron por las producciones propias con lograron un sonido claro y contundente.
El próximo sábado, desde las 19, se presentarán en Rondeau 29 con un show electroacústico que incluirá algunas versiones apropiadas y también temas de sus dos producciones: Bienvenidos al mundo feliz y La Máquina de la Euforia.
Habrá músicos invitados y la entrada será a la gorra y a conciencia.
El grupo está integrado por Sebastián Prieto (bajo y voz), Dandy (guitarra), Nery Joel (guitarra) y Lucas Villanueva (batería).
“La esencia de Soy Napoleón es la energía de sus guitarras, bases sólidas y melodías simples”, expresó Sebastián Prieto, bajista y compositor de la banda.
Anteriormente se presentaron en el boliche de Soler 687 junto a Rito (Santa Rosa) y Bocasaurios. En mayo fueron teloneros de Utopians, en la sala de Corrientes 123.
Luceros por la zona
Luceros El Ojo Daltónico ya tiene todo listo para su próximo show, el viernes, desde las 23.30, en Soler 620. Más de diez días antes del show se agotaron las entradas.
Después de ese show viajarán a Tres Arroyos para presentarse el 3 de septiembre, a las 22, junto a Falta Envido en "La Casona" (Rivadavia 641).
La banda liderada por Sergio Laucha Iencenella (bajo y voz), se presentará en el marco del Bahía Teatro.
Eso será en el bar de Hernandarias y Remedios de Escalada, el próximo sábado, desde la medianoche.
La banda se completa con Claudeta Vul (saxo), Jeremías Barcos (teclado), Lucas Cheche (guitarra) y Pablo García del Cerro (batería).
El repertorio consta en su mayoría de composiciones hechas por el líder de la banda, Sergio Iencenella. Algunas de ellas fueron parte de otras de sus bandas, como Mate y Kriptonita Chimichurri.
Hace poco presentaron su primer disco en el Teatro Municipal, con una buena convocatoria.
"Pudimos lograr un equilibrio natural entre disfrutar el toque, la amistad y a su vez trabajar mucho, organizar las cosas, asumir roles cada uno... Cosas que a veces son difíciles de congeniar, acá se dieron de forma muy fluída. Creemos que ese el principal logro de la banda", dicen.