Bahía Blanca | Viernes, 26 de abril

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Sustraen dinero en la sede de una obra social

Susana Ferradás fue encañonada por un sujeto que ingresó en la institución, ubicada en el barrio Hospital.

Un sujeto que simuló ser un afiliado ingresó en la sede de una obra social del barrio Hospital, encañonó a una empleada y tras revisar las dependencias del inmueble se apoderó de una pequeña caja metálica que contenía una suma de dinero ignorada por la víctima, para luego darse a la fuga con rumbo desconocido.

El robo se perpetró aproximadamente a las 9.20 de ayer, en las oficinas de la Obra Social del Personal de Farmacia, situadas en la calle Juan Molina 53, donde resultó damnificada la administrativa Susana Ferradás (60).

“La persona tocó el portero y le abrí porque pensé que era un afiliado. Venía con dos boletas de luz en la mano, ni bien entró sacó la pistola, se puso unos guantes de lana rojos y pasó hacia atrás del mostrador”, comentó la mujer.

“Me dijo que venía a robar porque sabía que acá había mucho dinero, entonces le contesté que no manejaba plata, sino que trabajaba con los bonos. Le informé que soy empleada de la obra social y que desconozco el efectivo que manejan en el gremio”, acotó.

“En ese momento estaba sola, pero cinco minutos antes había atendido a una afiliada. Creo que ella salió 9.15 y el delincuente entró a las 9.20; tal vez estaba parado por ahí afuera esperando que saliera la mujer”, continuó diciendo la vocera.

Y consideró que el atracador al parecer realizó una tarea de inteligencia previa porque tenía conocimiento de que en ese horario podía presentarse otra empleada de la institución, donde también funciona el sindicato del Personal de Farmacia.

“Me preguntó cuándo venía la otra señora, o sea que él sabía que venía a trabajar otra persona. Le dije que la señora estaba afuera y me pidió que le diera la plata, entonces entré en mi oficina, saqué mi cartera y cuando le iba a dar dinero, me dijo 'no, vos venís a trabajar todos los días y necesitás el dinero como lo necesito yo. La plata tuya no la quiero'”, relató la empleada.

“Así que me dejó toda la plata arriba del escritorio. No había mucho, pero el que viene con intención de robar agarra todo el dinero que puede. Ahí sí me puso la pistola en la espalda y me llevó para atrás. Fuimos a la oficina del gremio y me dijo que le diera la llave de la caja (fuerte)”, agregó.

“Le expliqué que acá no hay caja, entonces abrí un mueble donde hay una cajita metálica porque se maneja una caja chica. Me exigió que le diera la llave de esa cajita, pero le dije que no la tenía. Me preguntó qué había ahí adentro y le respondí que lo desconocía porque es de la parte gremial”, completó la informante.

El asaltante buscó dinero en otras oficinas de la entidad y guardó la caja metálica con algo de dinero adentro de una bolsa de consorcio que le dio Ferradás.