Se consumieron miles de hectáreas cerca de San Blas
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BAHIA SAN BLAS (De nuestra agencia en Carmen de Patagones) -- Un importante número de hectáreas --estimado en el orden de las cinco mil-- compuestas de pastos secos y monte fueron devoradas por el fuego instalado en la jornada de ayer en tres campos ubicados en cercanías del denominado Paso Seco, a unos 20 kilómetros de la localidad de Bahía San Blas.
El fuego se había iniciado en la tarde del jueves, alrededor de las 18, cuando a partir de una tormenta eléctrica cayó un rayo en el sector, pero que luego el agua de la misma tormenta pareció apagar las llamas.
Pero ayer por la mañana, a raíz del viento, los pastos secos y el sol reinantes, el siniestro se reavivó de tal manera que cerca de mediodía se tornó incontrolable.
Al lugar asistió una decena de hombres del cuerpo de Bomberos Voluntarios sanblaceños, junto a un grupo de uniformados de la Policía Comunal, de la Prefectura y una dotación del cuerpo activo maragato, quienes acudieron a partir de la solicitud de sus pares del denominado "Paraíso de los pescadores".
El lugar se encuentra dominado por desniveles que forman dunas con pastos naturales y sectores de chacras y monte, por lo que, sumado a la sequía que reina en la zona, las llamas avanzaban potenciadas de manera importante por un fuerte viento que provenía del sector norte.
La extensa cortina de humo se podía observar desde el poblado, mientras que pasado el mediodía el humo se hizo notar fuertemente desde la ruta nacional 3 y en la comarca Carmen de Patagones y Viedma.
El incendio comenzó en el campo de la familia Guidoni, extendiéndose (rumbo al sur) hacia los establecimientos de Alejo Zamora y Aldao, consumiendo miles de hectáreas en su devorador paso, con la consiguiente destrucción de alambradas, varillas y postes.
De todos modos, en su arrollador paso, el fuego no habría afectado a sectores en los cuales era advertible la presencia de ganado.
Colaboración. Cerca de las 20, el comandante Horacio Ferreira, jefe del cuerpo activo de San Blas, indicó que recién pudieron comenzar a controlar las llamas alrededor de las 18, para lo cual necesitaron la ayuda de tractores con arados y rastras, palas y el tractor de la delegación sanblaceña con un tanque de agua.
De todas maneras anoche continuaban las tareas ya que el fuego no se había sofocado por completo y la posibilidad que pudiera reavivarse estaba latente.
Incluso, algunos moradores --que experimentaron una situación similar hace un año-- mostraron cierta preocupación ante la posibilidad que haya alguna alteración en la dirección del viento.
Expertos en ese tipo de siniestros confiaban en que la situación podría ser controlada anoche misma por los bomberos si el viento no aumentaba intensidad ni rotaba su dirección.
El encargado de un establecimiento ganadero distante a unos pocos kilómetros del lugar, comentó a "La Nueva Provincia" que el jueves se había visto humo por ese sector, pero que una lluvia siguiente lo habría apagado.
"Seguramente el viento de hoy (por ayer) y como están de secos los campos, ayudó a que se prendiera de nuevo", sostuvo.