Bahía Blanca | Jueves, 25 de abril

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La táctica del terror

Sr. embajador, todos los días llegan noticias preocupantes de Ucrania. ¿Podría explicarnos cuáles son las raíces del conflicto actual que para muchos es un enfrentamiento entre los ucranianos “prorrusos” y “proeuropeos”, una especie de guerra civil?

--Quiero destacar que la percepción del conflicto en el este de Ucrania como una guerra interna es totalmente errónea y está implantada por la máquina propagandística rusa, que pretende mostrar el conflicto de esta manera, como si no hubiera miles de tanques, cañones y otro equipo bélico suministrado por Rusia a los llamados “separatistas”, e inclusive miles de efectivos rusos combatiendo en Ucrania.

“Las raíces del conflicto radican en el hecho de que Moscú no puede digerir la pérdida de Ucrania, cuyo pueblo ha escogido, tras los sangrientos acontecimientos del inicio de 2014, el camino de aproximación a los estándares democráticos europeos y la salida de la esfera de influencia rusa. Por eso el presidente Putin estaría intentando de alguna manera resucitar el Imperio Ruso, debilitando y fraccionando a Ucrania, fomentando hostilidades en nuestro suelo con sus armas y sus mercenarios”.

--Pero el presidente Putin niega constantemente la presencia de tropas regulares rusas en Ucrania.

--Hemos presentado numerosas pruebas que confirman la presencia de tropas rusas, desde las imágenes satelitales de los movimientos de unidades militares y el material bélico cruzando la frontera con Ucrania hasta documentos de identidad y pertenencias de soldados rusos abatidos o capturados en el combate. Además, fueron hechas públicas las grabaciones de las llamadas telefónicas entre la cúpula de los separatistas y sus titiriteros de Moscú, interceptadas por los servicios de seguridad ucranianos. Así que para todo el mundo está evidente que Ucrania no es un país devastado por una guerra civil, como lo trata de mostrar la engañosa propaganda rusa, sino una nación que enfrenta una agresión externa.

--Y las Repúblicas populares de Donetsk y Luhansk que se autoproclamaron en el este de Ucrania, ¿a quién representan?

--Las llamadas “Repúblicas Populares” de Donetsk y Luhansk (“RPD” y “RPL”) no son reconocidas por ningún país del mundo, ni siquiera por la propia Rusia, y existen sólo gracias al apoyo material, logístico y financiero que les proporciona continuamente Moscú.

“Los bombardeos con sistemas de misiles rusos a barrios residenciales de varias ciudades ucranianas perpetrados por las milicias con un balance de centenas de víctimas mortales y heridos, fueron testimonio de que los líderes de RPD y RPL no tienen ninguna intención de adherir al camino de la solución pacífica del conflicto y siguen utilizando la táctica del terror contra la población civil.

“Por esta razón, el Parlamento de Ucrania el pasado 27 de enero aprobó la declaración que determina a Rusia como estado agresor y llamó a todo el mundo civilizado a reconocer la RPD y la RPL como organizaciones terroristas”.

--Hablemos de los esfuerzos para conseguir la solución pacífica del conflicto en Ucrania. ¿cómo evaluaría Ud. los resultados de la última reunión en Minsk de los líderes de Francia, Alemania, Ucrania y Rusia?

--Es positivo que se haya podido llegar a un acuerdo. Porque ya hubo dos documentos (el Memorando y el Protocolo de Minsk) firmados en septiembre de 2014, que contenían los pasos para llegar a la paz, pero aquellos acuerdos no llegaron a ser cumplidos. Ahora en Minsk se logró aprobar la Hoja de Ruta para la implementación de los acuerdos de Minsk y estamos muy agradecidos a los socios europeos por apoyar nuestra posición y presionar al presidente Putin para que este documento sea aprobado.

“Esta hoja de ruta tiene 13 puntos muy concretos, desde un alto el fuego total a partir del 15 de febrero, el retiro de armamentos pesados a unas distancias seguras y el restablecimiento del control sobre la frontera ruso-ucraniana, hasta la retirada de todas las unidades militares y mercenarios extranjeros del territorio de Ucrania y la liberación de todos los prisioneros y personas, que están ilegalmente detenidas, en las próximas semanas”.

--Y ¿qué será de los territorios bajo el poder de los separatistas?

--El plan prevé la celebración de elecciones locales bajo la ley ucraniana sobre el estatus especial de algunos distritos de las regiones de Donetsk y Luhansk. Ucrania no otorgó concesiones sobre cualquier tipo de autonomía o federalización para la región de Donbás. Ucrania seguirá siendo un estado unitario, donde se realizará la reforma constitucional cuyo elemento central será la descentralización de poderes.

--Esos acuerdos no se cumplen.

--Lamentablemente es así. Los terroristas apoyados por Rusia han continuado los bombardeos. Pero seguimos empeñados a cumplir con lo acordado.

“Hay enorme presión por parte de la comunidad internacional para que Rusia cumpla con sus compromisos, retire sus tropas y mercenarios y deje de apoyar financiera y militarmente a los rebeldes. Sin este apoyo continuo, sin el flujo constante de armas pesadas rusas a través de la frontera común, podríamos arreglar el conflicto en cuestión de pocas semanas”.

“Las potencias occidentales ya avisaron a Rusia que, si vuelve a violar los compromisos de Minsk, eso podría costarle muy caro”.

--El presidente Poroshenko declaró la intención de invitar a fuerzas de paz a las regiones afectadas por el conflicto.

--Sí, hemos visto que los observadores civiles de la OSCE no siempre pueden cumplir su misión. Por ejemplo, las milicias no les dejaron entrar en Debáltseve para controlar el alto el fuego. Por eso fue tomada la decisión de dirigirse a la ONU y a la Unión Europea, para solicitar el envío de un contingente de paz para controlar la línea de contacto y también la frontera con Rusia. Para Ucrania la mejor opción sería un contingente policial de la UE y, naturalmente, no aceptaremos la presencia de militares rusos que representan el país agresor.