Tras los anuncios, economistas locales analizaron el "Plan Caputo"

Francisco Rinaldi

frinaldi@lanueva.com

Licenciado en Economía por la UNS y periodista económico con 16 años de trayectoria en La Nueva. A la largo de su recorrido profesional, se ha especializado en el seguimiento de los grandes problemas de la economía argentina y sus posibles implicancias para la bahiense, con una mirada local.
También se desempeña como profesor de los niveles secundario, formación profesional y terciario en Economía Política, Administración y Contabilidad.

Si hay algo que nadie podrá achacarle al presidente Javier Milei es su falta de sinceridad. Aún en campaña, no dudaba en afirmar que los problemas que acumulaba la economía nacional exigían “sangre, sudor y lágrimas”. Y aunque los economistas coinciden en que menos empleo y más inflación son lo que se viene, sólo el tiempo podrá despejar la única pregunta que nadie puede responder: ¿podrá una sociedad exhausta tolerar dichos efectos adversos?

"Vamos hacia una conjunción de inflación con estancamiento, porque las medidas de orden fiscal son recesivas en un primer momento”, explica Mauro Trellini, economista y columnista en La Brújula Radio.

Su colega y asesora financiera, Bettina Fernández, coincide y opina que la recesión es parte del plan. “Se busca controlar a la inflación a través de un freno en la actividad y eso va a generar un efecto dominó, donde algunos sectores se van a resentir más que otros. Típicamente, los que más problemas tienen son los que no están ligados al consumo de primera necesidad”.

Para José Tonelli, consultor independiente, el cuadro se agrava porque las medidas incluyen la suspensión de la obra pública. “El Estado no va a participar en la economía a través de las obras, por lo que se espera un parate también por ese lado”.

El talón de Aquiles

El mayor riesgo de las medidas anunciadas ayer por el ministro Luis “Toto” Caputo pasa por la recaudación de impuestos. Es que más del 60% de los ingresos del fisco nacional provienen de tributos como el IVA, Ganancias y los recursos de la Seguridad Social (aportes y contribuciones de los empleados) los que están fuertemente atados a la actividad económica. Así, recesión sería igual a menos recaudación, lo que puede alejar la posibilidad de lograr la meta del equilibrio fiscal.

“La recaudación va a sufir una baja el IVA porque está muy ligada al consumo interno. Y el gran problema con esto es que se puede necesitar un mayor ajuste del gasto público, porque la caída de los ingresos compensó al que se anunció el martes, lo que profundizaría todavía más la recesión”, alerta Tonelli.

Aunque es consciente de este riesgo, Trellini destaca que el gobierno hace “un diagnóstico correcto” al calificar al déficit fiscal como el principal problema de la economía de nuestro país. “Las medidas son las correctas, no sé si perfectas, pero van por el buen camino. Ahora, otro tema es ver si realmente pueden implementarse, porque eso tiene más que ver con lo político”, alerta.

“La designación de Caputo como ministro permitía inferir que se iba a ir por este lado. Yo creo que el próximo paso será renegociar la deuda con el FMI, negociar créditos puente con el extranjero y relajar los controles a los capitales financieros, por ejemplo. Lo que sí es claro que algunas cosas que anunció el ministro no están muy en línea con las ideas libertarias del presidente, porque la otra parte del ajuste se va a hacer subiendo impuestos”, dice Tonelli.

Mercados financieros

Una máxima de los inversores financieros reza que los mercados no votan, pero militan. Tras la conferencia (accidentada) de Caputo, los dólares financieros MEP y CCL achicaron su brecha con respecto al oficial y los títulos públicos ajustados por inflación y tipo de cambio subieron hasta las nubes. 

"Es una buena señal que no se hayan disparado los dólares. Ahora, hay que esperar qué pasa en los próximos días, porque el mercado cambiario sigue teniendo muchas restricciones sobre las que las autoridades aún no se han expedido, por lo cual, no podemos saber si la calma es por el libre juego de la oferta y la demanda o por las propias restricciones”, aclara Fernández.

La especialista dice que los bonos CER (N de R: ajustan por inflación) exhibieron subas del 15% y del 10% los Dólar Linked (N de R: atados a la evolución del dólar oficial). “Pero ya están muy caros y comprarlos ahora, es un riesgo”, advierte.

Señala que la jornada bursátil fue buena en general, con buenas noticias en el plano internacional. Así, el anuncio de la Fed de EE.UU., el banco central más poderoso e influyente del mundo, de que analiza bajar sus tasas de interés a futuro, insufló más ánimo a las acciones y a los bonos.