Los Zapp: más cerca de volver a casa en un barco a vela

Redacción de La Nueva.

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   Anahí González
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   El último tramo de un viaje de 18 años alrededor del mundo con cuatro hijos en un auto de 1928 no puede pasar desapercibido ¡debe ser espectacular!

   Así lo sintieron Candelaria y Herman Zapp, quienes soñaron hace casi dos décadas con viajar alrededor del planeta y recorrieron gran parte de él, sorteando cada obstáculo que pudiera presentarse.

   Como broche de oro de esta etapa, tuvieron una idea: ¿qué tal un viaje todos juntos para unir dos continentes y volver a casa en un barco a vela? ¡Romántico y de película, como sus vidas!

   Así surgió el sueño de levar anclas y partir desde las Islas Canarias con destino a Suriname, con todos a bordo.

   La familia se completa con Pampa, Tehue, Paloma y Wallaby, sus cuatro hijos, nacidos uno en cada país y grandes entusiastas del modo de vida nómade.

   Hasta el momento, los Zapps solventaron cada aventura con la venta de un libro que escribieron en los primeros años de viaje, “Atrapa tu sueño” y que se tradujo a varios idiomas pero para hacer el cruce solicitaron un “empujoncito” de sus cómplices y seguidores, quienes no dudaron en responder como esperaban.

   A través de un Crowdfunding, que es una herramienta de cooperación colectiva en la que cada uno aporta su granito de arena para ayudar a otros a concretar su proyecto, lograron reunir nada menos que 10 mil euros en menos de un mes.

   “Estamos súper felices de tener la mitad de los fondos para navegar el océano Atlántico ¡Sí! ¡Ya hemos alcanzado el segundo objetivo de la campaña!”, compartieron en su página de Facebook.

   Herman: ¡A subir y bajar las velas!   

   -Herman ¿quiénes irán a bordo del barco y cuánto estiman que va a durar el viaje?
   -Iremos con un capitán, marineros y ¡hasta cocinera! Con los vientos alisios de noviembre y las corrientes marinas que empujan hacia Sudamérica, deberíamos estar cruzando el Atlantico en 30 días como máximo partiendo desde las Islas Canarias hasta Suriname.

   -¿Dónde estuvieron en las últimas semanas?
   -Estuvimos en la ciudad de Maastrich, lo más sur de Holanda. Es una ciudad bellisisiisísima con fortificaciones y edificios antiquísimos. Tiene una arquitectura mezcla francesa, alemana y holandesa en un entorno en el que hay edificaciones medievales, ya que pasó de mano en mano. ¡Muchísima vida! Luego nos fuimos a Luxemburgo.

   -¿Se sienten acompañados en esta nueva aventura?
   -¡Sí! Somos muy optimistas porque logramos el 50% del costo de la aventura del cruce del Atlántico. Por la velocidad que ha tomado la campaña parece que podríamos llegar a recibir más de ese porcentaje en apoyo de la gente. Y, mientras tanto, seguimos vendiendo nuestro libro y participando en ferias internacionales a las que nos invitan.

   -Con tantos años de seguirlos ¿la gente se siente parte de sus proyectos?
   -Eso nos dicen muchas personas que nos dejan su aporte, que se sienten parte ¡y lo son! 

   -¿Cuál es el mayor desafío de este viaje?
   -El desafío más grande ya lo superamos ¡que Candelaria se anime! No le gusta mucho esto de estar flotando en mares profundos pero en esta época del año no hay riesgos de tormentas o ciclones... es la época más segura. Claro que navegar en un barco de madera a vela y sin motor tiene su gran toque de aventura, y vamos a poder y tenemos que ser parte de subir y bajar las velas, de timonear, de hacer guardias, subir a lo mas alto del mástil... y tantas cosas que nos va a encantar disfrutar.

   Su historia

   18 años. Los Zapps iniciaron su primer viaje el 25 de enero de 2000. Tenían pocos recursos económicos -ella era secretaria y él electricista- y muchos miedos, pero se animaron a dejar su zona de confort y a seguir a sus corazones. 

   Tener ganas. Pronto se dieron cuenta de que no importaba cuánto dinero tenían sino las ganas que tenían y desde entonces no dejaron de vivir todo tipo de experiencias: desde construir una canoa para bajar el Amazonas con su Graham            Paige hasta tocar el Everest, conocer le Ártico en Alaska y en Europa, caminar sobre la muralla China, dar la vuelta a Australia, cruzar desiertos y llegar con el coche a islas remotas del Pacífico.

   Sustento. En estos años vivieron de la venta de su libro Atrapa tu Sueño y brindaron charlas motivacionales e inspiradoras. Además, compartieron sus vivencias con otros viajeros y fueron invitados a alojarse en hogares de cientos de familias de todas partes del mundo. 

   Niños. Los pequeños Zapps, o zappitos, se criaron en un ámbito cambiante y de aceptación de la diversidad, seguros de que la riqueza más grande no es lo que tenemos sino lo que somos. Estudiaron en el camino a través de un programa especial del Ministerio de Educación de la Nación, que tuvo a su mamá, Candelaria, como maestra. Aprendieron Geografía e Historia, en vivo, a través de la visita a destinos tradicionales y exóticos y conociendo sitios milenarios. Hoy, que el más grande los hijos, Pampa, tiene 17 años, la familia decidió encarar otra etapa, algo más sedentaria, para poder experimentar otras vivencias.