Para un director del INDEC, el organismo estaba en "terapia intensiva"

Redacción de La Nueva.

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    Para el responsable de la dirección de Cuentas Internacionales del INDEC, Pedro Lines, el organismo se encontraba en “terapia intensiva” cuando decidió incorporarse al equipo que hoy encabeza el economista Jorge Todesca, aunque aseguró que “poco a poco” se continuará mejorando la calidad de la estadística pública.

    Lines estuvo en nuestra ciudad para brindar asesoramiento al equipo técnico del Centro Regional de Estudios Económicos de Bahía Blanca-Argentina (CREEBBA), dependiente de la Fundación Bolsa de Comercio de Bahía Blanca.

    “El INDEC estaba en terapia intensiva. Había que restaurar todo el sistema de estadísticas oficiales. Para eso, hubo que incorporar a técnicos que se habían ido del organismo, lo que se pudo hacer gracias a un trabajo muy intenso y la ley de Emergencia Estadística, que fue una herramienta de excepción (N de R: se embargaron los índices que publica regularmente el Instituto, entre estos, el de precios al consumidor)”, recordó Lines.

    Acotó que estas acciones permitieron la reincorporación de técnicos de carrera, apartados durante los “años oscuros” del Instituto que vio la luz hace casi 50 años atrás y que supo gozar de un enorme prestigio en América Latina.

    “Recibimos además gran apoyo de la comunidad internacional. Ese respaldo hizo que se dé marcha atrás con la moción de censura del FMI y que podamos postularnos como socios adherentes a la comisión estadística de la OCDE. Nosotros buscamos la excelencia, pero la mejora de la estadística pública es un proceso”, alertó.

     Director del área de Cuentas Internacionales, Lines, un economista santiagueño de extensa trayectoria en la temática, que incluye un trabajo como experto en Cuentas Nacionales en el Ministerio de Planeamiento y Estadísticas del gobierno de Qatar, cargo que ocupó en plena de la intervención morenista en el INDEC, señaló que se encontró con problemas en los datos de exportaciones e importaciones.

     “Se estaban sobrestimando las exportaciones y se subestimaban las importaciones, con la consecuente sobreestimación del superávit comercial. Así, daba la sensación de que estábamos mucho mejor con relación a la realidad. Eso hoy se corrigió y podemos dar una visión más acertada y precisa, porque si bien existía superávit, era menor”, finalizó.