Bahía Blanca | Viernes, 26 de abril

Bahía Blanca | Viernes, 26 de abril

Bahía Blanca | Viernes, 26 de abril

Una bienvenida sin luces, pero con la calidez de siempre

Ante un gran marco de público pero sin el habitual show de fuegos artificiales, empezó el Estival.
La colorida y emotiva presentación de las máquinas, con el acompañamiento de pilotos y colaboradores. La noche tuvo sus momentos de felicidad.

Por Gonzalo Martínez/ gmartinez@lanueva.com

Como sucede año tras año, nadie se quiso perder el show de la primera fecha del Campeonato Estival de Midget, que contó con 94 autos (se ausentó Juan José Belogini y Gabriel Schiebelbein cumplió la fecha de suspensión por conducta antideportiva que le aplicaron en el Invernal).

Los más fieles, como Federico, Ángel y Estela, se aseguraron un lugar en la parte alta de la tribuna desde temprano.

"Llegamos a las 17.30. Como todos los campeonatos, nos preparamos con mucha ilusión", aseguró Fede, simpatizante de Claudio Roth y encargado de manifestar que el lugar no se negocia.

De fondo, la Banda del Batallón de Comunicaciones número 181 (3ra División del Ejército) deleitaba con su repertorio y algunos bailes folklóricos antes de dar paso al automodelismo.

Los autos a radio control se robaron las primeras exclamaciones realizando saltos sobre las rampas emplazadas en la recta, por la cual desfilaron, desde las 20.30, los principales protagonistas.

La Banda tocó las estrofas del Himno Nacional, interpretado por Julio Buznego (además cantó algunos temas melódicos), el párroco Jorge Wagner (de la Parroquia San Luis Gonzaga) se encargó de la tradicional bendición del torneo y el centro de atención se mudó al cielo; donde de a poco comenzaron a caer los cuatro paracaidistas que fueron la atracción de la noche ante la ausencia de los fuegos artificiales (ver aparte).

Una lesión de un espectador en la recta opuesta y un problema con el sistema de cronometraje retrasaron el arranque de la primera serie (21.43), que quedó en poder de Matías Lastra Meler.

Aguantando el descenso de la temperatura, la gente pobló las tribunas (a excepción de la platea que lució en un 70 %) con la ilusión de siempre: que sea un certamen plagado de espectáculo.

Por duplicado

Fue el vuelco que protagonizaron, en la quinta serie de la noche, Matías Enrique Merino y Diego González, quienes se calzaron con los cordones internos y externos, para dar tumbos prácticamente a la par.