Botulismo: según la comuna hubo errores, no imprudencia

Redacción de La Nueva.

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La secretaria del área Legal y Técnica de Villarino, Damiana Presa, reconoció ayer que “pudo haber existido un error” en los controles sanitarios municipales durante la Fiesta Nacional del Ajo, aunque -desde su óptica- eso no implica que el municipio haya actuado con irresponsabilidad.

Como se recordará, hace algunas semanas un vecino bahiense se contagió de botulismo luego de consumir pulpos en escabeche que había comprado en un stand de la fiesta. Ese producto no sólo no contaba con rótulo sanitario alguno, sino que fue comercializado por un establecimiento elaborador clandestino de Bahía Blanca (que fue clausurado días atrás).

Presa cuestionó que en este diario se haya difundido la idea de que el municipio actuó con irresponsabilidad, pero no explicó por qué la comuna dejó participar de la fiesta a una persona que no tenía permiso sanitario alguno para elaborar alimentos.

“Quien comercializó el producto es una persona conocida entre medanenses, que ya ha venido muchas veces a esta fiesta (unos 12 años)”, se limitó a mencionar a través de un comunicado.

En cuanto a los controles de los productos de ese elaborador durante el desarrollo de la fiesta, Presa sostuvo que “cuando los inspectores municipales responsables del control se acercaron al stand en cuestión, este señor se encontraba armándolo y entre los alimentos expuestos sobre la mesa no observaron ningún tipo de pulpo con una etiqueta no correspondiente”.

Sin embargo, de acuerdo con la información brindada por el área de Inspección del municipio de Bahía Blanca, no sólo los pulpos en escabeche no contaban con rótulo sanitario, sino ninguno de los alimentos elaborados por ese expositor.

Contradicciones

En otro tramo del comunicado emitido ayer, la doctora Presa reconoció que "pudo haber existido un error", el cual fue -según sus propias palabras- "que nos confiamos en un conocimiento preexistente (del elaborador clandestino) y que no pasamos a fiscalizar a posteriori (sic)", pero al mismo tiempo opinó que "no hubo irresponsabilidad del municipio”.

Contradictoriamente, en el párrafo siguiente aseguró que “los controles se hicieron convenientemente y, por una cuestión de confianza, sí se pudieron cometer errores debido a esos motivos” (sic).

“Son cuestiones a ajustar -agregó- y con el Concejo Deliberante acordamos comenzar a trabajar en un protocolo más estricto, que tenga que ver con un control más intenso para que no vuelva a suceder”.

La funcionaria también señaló que desde el día en que se conoció el caso de botulismo el municipio asumió “la responsabilidad en la situación”.

“Rápidamente comunicamos a la población, a través de las autoridades pertinentes, las medidas de prevenciones a tomar”, explicó.

En otro tramo del comunicado difundido ayer, la doctora Presa hizo hincapié en que hasta el momento no hay ningún análisis que permita afirmar que el caso de botulismo registrado días atrás fue provocado por la ingestión de un producto vendido en la Fiesta Nacional del Ajo.

“Tengo claro que, a través de la información (con la) que contamos, no hay frascos contaminados -afirmó-. Es importante aclarar esto, ya que decir 'frascos con botulismo' es irresponsable”.