La ruta 3 está saturada y la autopista hasta Dorrego ya no puede esperar
-
- copiado al portapapeles
-
- copiado al portapapeles
Adrián Luciani / aluciani@lanueva.com
Colas interminables de autos circulando en algunos tramos a paso de hombre, separados en muchos casos sin respetar la distancia reglamentaria y con conductores imprudentes que ponen en riesgo no pocas vidas humanas, volvieron a dominar anoche el tramo de la ruta 3 que va desde el acceso a Monte Hermoso y Bahía Blanca.
Como cada domingo, el aluvión de vehículos que regresó del balneario a la ciudad puso en evidencia la precaria infraestructura vial existente en dicho tramo, incapaz para absorber semejante demanda junto con la importante presencia de camiones que, cargados con la cosecha fina, exige el puerto de Ingeniero White.
Sobrepasos en zonas prohibidas, incluso hasta por la banquina, resultaron una vez más moneda corriente en la ruta 3, un tramo que el año pasado volvió a llevarse varias vidas y que, además de prudencia y mayores controles, exige la concreción de una autopista.
Se trata de una antigua aspiración nacida en la década del '80 cuando el balneario empezó a despegar y su vínculo con Bahía Blanca terminó por consolidarse para siempre, siendo hoy en día la playa por excelencia de los bahienses, seguida muy de cerca por Pehuen Co.
La necesidad de una autopista, una autovía o una ruta segura ya alcanzó una presencia importante en las redes sociales. En Facebook, por ejemplo, ya existe el grupo “Autopista YA Bahía Pehuen Monte”, que tiene casi 11 mil seguidores.
¿Se hace?
Pero proyectos abundaron, incluso con algunas iniciativas que propiciaban la instalación de peajes para financiar las obras. La última data de mediados de la década pasada. Después no se volvió a hablar más de ese tipo de herramientas.
En 2013, el kirchnerismo volvió a mencionar el tema e incluso anunció que equipos técnicos trabajaban en el diseño de un proyecto, pero nada más sucedió hasta abril del año pasado, cuando fue el propio presidente de la Nación, Mauricio Macri, quien anticipó que la autopista entre Bahía Blanca y Dorrego iba a concretarse.
El proyecto, según volvió a anunciarse ahora, se está elaborando a través de consultorías para dos segmentos iniciales previstos en la línea de la RN 3.
La primera sección es desde San Miguel del Monte (kilómetro 112) hasta la ciudad de Azul (299). Y la segunda es la antes citada entre Dorrego y el acceso a Punta Alta por el puente Naranja.
Este es el primer segmento del proyecto que, una vez licitado e iniciado -- algo que aún nadie se atreve a confirmar para lo que resta de 2017--, debería ser inaugurado en cuatro años.
Para los 77 kilómetros entre Dorrego y el cruce con la ruta nacional 229 continúa la idea de realizar una subdivisión, con un tramo desde el kilómetro 593, en el acceso a Dorrego (El Cristo), hasta la estación de servicios ubicada en cercanías del puente Las Oscuras, en el kilómetro 632,49 (39,59 kms.).
El otro tramo se prevé desde el kilómetro 632,49 al puente Naranja (38 kms.), atravesando el nudo del kilómetro 605, con el ingreso a la ruta provincial 78 que desemboca en Monte Hermoso.
Según el plan original propuesto por Guillermo Dietrich, ministro de Transporte de la Nación, en un segundo período se prevén unir las autopistas norte y sur con la construcción del tramo entre Azul y Coronel Dorrego (299 kilómetros), pasando por Benito Juárez, Adolfo Gonzales Chaves y Tres Arroyos. Inicialmente se pensó en concluir las obras en 2023, algo que ya no podrá cumplirse.
Proyecto sencillo
Pudo saberse que si bien la autopista Bahía Blanca–Dorrego exige un proyecto no demasiado complicado, con escasas obras de arte (puentes, por ejemplo), su elaboración se encuentra atrasada y, con mucha suerte podría iniciarse a fines de este año si se cumplen los plazos previstos, teniendo un plazo de ejecución de dos años.
Para este tramo de 115 kilómetros y los 207 de San Miguel del Monte–Azul se ejecutará una autopista de dos carriles por mano, mientras que en los 285 que separan Azul de Dorrego, se efectuará una ruta segura, con sectores de una tercera mano para el traspaso de camiones en subidas y otros tramos peligrosos.
De autovía a autopista
En varias oportunidades Javier Iguacel, administrador de Vialidad Nacional, admitió que “tenemos un sistema colapsado como la Ruta Nacional 3, que no está preparada para la cantidad de vehículos que está circulando”.
“Tenemos un plan para los próximos doce años, pero en los próximos cuatro años está proyectado construir 2.800 kilómetros de autopista. Eso es duplicar lo que se ha construido en la Argentina en toda su historia a nivel federal, así que es una tarea muy ambiciosa”.
El funcionario vino diciendo que “para el Gobierno anterior, la Ruta 3 no era prioridad porque ni siquiera estaba terminado el proyecto de autovía, nosotros lo terminamos y lo transformamos en autopista”.
Así como una ruta convencional se diferencia de una autovía porque la primera tiene solamente dos carriles -uno por cada lado-, y porque no posee separación entre ellos, una autopista se diferencia de una autovía y una ruta al no atravesar tramos urbanos (ciudades, pueblos) y al contar con “control total de accesos”, que implica que no hay conexión directa con otra carretera o propiedades y tener que ingresar a la autopista por puente o distribuidores.
“Queremos construir una autopista interurbana que no tenga más cruces a nivel, ni rotondas ni retornos como hay en la Ruta 2. Buscamos que tenga puentes y distribuidores, utilizando una tecnología de asfalto moderna, que permita que haya menos aquaplaning, que es cuando el auto resbala o salpique menos al auto que marcha atrás cuando dejó de llover. Además de las banquinas pavimentadas, que le dan otro nivel de seguridad”, dijo Iguacel.
El funcionario estará en la ciudad el próximo miércoles 8 de febrero con la cúpula de Vialidad Nacional para analizar esta y otras obras, según dijo a “La Nueva.” el intendente Héctor Gay.
El intendente dijo que sobre el proyecto acordaron trabajar en forma conjunta con el intendente de Monte Hermoso, Marcos Fernández, al tiempo que el miércoles pasado, durante un encuentro de jefes comunales bonaerenses de Cambiemos con el presidente Macri, acordó lo mismo con su par de Olavarría, Ezequiel Galli. Si bien la decisión está en Buenos Aires, desde acá habrá que sumar esfuerzos.
Cada vez más camiones
Como era previsible y se anticipó desde estas páginas, el aumento del área sembrada en los campos de la región generó un importante tránsito de camiones, el cual sufrirá un incremento significativo si se concretan algunas inversiones en el área industrial.
Algunos especialistas señalan que, en caso de una ampliación del Polo, de 1.500 camiones que circulan por la localidad diariamente se pasará a 4.500.
Ante este panorama el municipio se encuentra frente al desafío de adecuar la infraestructura vial que rodea a la ciudad a la llegada de un mayor número de camiones, sobre todo porque hoy existen varios tramos desbordados y que evidencian una preocupante merma en las condiciones de seguridad, por ejemplo la zona de El Triángulo (ruta 3 Norte) y El Cholo (ruta 3 Sur).
No menos importante resulta en tal sentido la autopista de la ruta 3 y la unión de las rutas 3 Norte y 3 Sur en el tramo que ambas atraviesan la ciudad.