Género: “Nadie es violento por naturaleza”

Redacción de La Nueva.

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“Una mujer a la que brindé asistencia me dijo: 'Fernanda, a mí, mi marido me pega lo normal, pero ayudá a esta mujer, que a ella le pegan en serio'”, recordó indignada ayer la diputada del Parlasur, Fernanda Gil Lozano, al comenzar su charla sobre violencia de género en la ciudad.

La mujer, exdiputada nacional, actualmente integra el Frente Renovador y dirige la Comisión Especial de Delitos Vinculados a la Trata de Personas del mencionado parlamento.

“Dentro de todas las violencias, me preocupa mucho la de género porque es la que se da en la familia, el núcleo primario en el que los chicos conocen el mundo y aprenden a relacionarse con los demás”, manifestó.

Agregó que, en una sociedad perjudicada por la idea de competencia entre géneros y no de colaboración o cooperación, a las víctimas del maltrato no solo no se las protege como se debe, sino que se las cuestiona y se las hace sentir culpables.

Según la representante del massismo, las novedosas leyes argentinas de violencia de género, trata de personas o protección a la niñez pasan a ser un “principio declarativo” desde el momento en que no se reglamentan ni se les asigna un presupuesto. “Son muy buenas, pero sin un dispositivo que las respalde, no sirven”, se lamentó.

“Las preguntas que les hacen a las mujeres denunciantes son realmente increíbles, las colocan en posición de cuestionadas. Los jueces no toman las denuncias 'simples', como acoso o amenazas –figura tipificada en el Código Penal-; las comisarías, menos”, explicó.

Como respuesta al pedido de muchas víctimas mujeres, Gil Lozano impulsa un programa Psico-Socio-Educativo, que posa la mirada sobre el hombre golpeador, intentando reinsertarlo en la sociedad.

“El hombre que golpeó a una mujer, haya sido condenado o no por eso, seguramente golpeará de nuevo, a la misma o a otra. En España, 8 de cada 10 hombres que participaron del programa no reincidieron, no volvieron a agredir a una mujer”, ejemplificó la especialista.

“Algo que me asombró es que los hombres les echaban la culpa a sus mujeres, intentando justificar cierto derecho a la violencia, cuando el derecho es siempre a la justicia”, dijo Gil Lozano.

“En principio traté de incluir a los varones en las entrevistas, pero se sienten invadidos. Por eso este programa consiste en charlas grupales una vez por semana, guiadas por un hombre capacitado, en las que se utiliza psicología evolutiva para dar determinados tips de control de ira y frustración, se habla sobre sus proyectos de vida y eso que les impide alcanzarlos. De allí, muchas veces nace de ellos mismos seguir con terapia”, agregó.

“Todo lo que uno aprendió puede revertirse, nadie es violento por naturaleza”, concluyó la diputada.