Necesita ayuda un centro de rehabilitación de caballos

Redacción de La Nueva.

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Por Cecilia Corradetti / ccorradetti@lanueva.com

Donaciones de dinero para llegar a los 40 mil pesos, con el objetivo de intervenir a uno de los caballos que se encuentran en el centro equino Nelquihué, solicitó esta semana Alejandra González Laserna, una bahiense que comenzó a proteger a estos animales, muchos de ellos secuestrados por maltrato o donados por los propios cartoneros poco después de prohibirse la tracción a sangre, en julio pasado.

El último animal que llegó a sus manos –-tiene ocho, la mayoría mediante órdenes judiciales-- presenta una fractura en una pata y el riesgo de que suceda lo mismo con algunas de las restantes.

“Si trastabilla podría ser fatal, pero lo cuidamos muchísimo y estamos dispuestos a operarlo más allá del elevado costo. La rehabilitación es compleja y prolongada”, expresó González Laserna, de profesión abogada.

En junio, en medio de la polémica por la tracción a sangre, comenzó a ocuparse de los caballos maltratados que la Policía iba secuestrando. En diciembre tenía siete en distintas guarderías y poco después decidió alquilar un espacio donde atenderlos.

“Todos los animales que fui recibiendo estaban en situación caótica, desnutridos, maltratados o con los dientes arrancados por los frenos. Los fuimos recuperando y de acuerdo con lo que el juez va decidiendo se devuelven a sus dueños, con un seguimiento, o buscamos un hogar donde puedan tener una vida más larga y venturosa”, expresó.

“Lamentablemente siguen existiendo en nuestra ciudad muchísimos caballos en situación de maltrato. Hay al menos 170 dando vueltas, solo que no se ven. Los sacaron de la calle y fue peor, porque están destruidos pero no pueden denunciarse porque ahora no se visualizan”, sostuvo.

Situación judicial

En el Centro de Rehabilitación creado por González Laserna se cuida a los animales hasta que se resuelvan su situación judicial y su titularidad. Hay una lista de 20 dueños de campos dispuestos a recibir a los animales que sean quitados definitivamente a los carreros.

Con sus propios recursos, la mujer da alimentación, resguardo y atención veterinaria a los animales.

“Considero que el caballo es un animal de trabajo pero en las condiciones correctas: buenas de salud y comida. Y solo pueden tirar una vez y media su peso. Sí, estoy en contra del maltrato animal”, apuntó meses atrás en otra nota realizada por este medio.

El Centro de Rehabilitación está en un predio de dos hectáreas y media e incluirá a futuro un quincho como espacio de recreación para que sea autosustentable.

Mucho por hacer

Cuenta pendiente. Aún circulan decenas de caballos, cuya situación no está resuelta. Una gran parte está en Villa Caracol, el barrio ubicado al noroeste de la ciudad donde se concentra la mayor actividad de los cartoneros.

Últimos casos. La semana pasada el centro equino recibió dos caballos en pésimo estado. Uno de ellos tenía cólicos y estaba tirado en un predio de Spurr. Cuatro días después, desnutrido y fracturado, se halló otro en Pringles y Fortaleza Protectora.

Cómo colaborar. En Facebook: centro equino Nelquihué. Allí figuran los comercios donde pueden acercarse las donaciones. También hay una caja de ahorros en el Banco Provincia, donde se piden 10 pesos por aportante.