Tenencia de los hijos: polémica intensa y un infrecuente fallo local
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Por Juan Pablo Gorbal / jgorbal@lanueva.com
Hay divorcios sumamente traumáticos, que no se limitan a una división de bienes sino que derivan en fuertes luchas de poder, con el lamentable saldo para los chicos, que pasan a ser un virtual botín de guerra.
Hasta los 5 años, los hijos de padres separados deben quedar a la guarda de la madre, por imperio del Código Civil, aunque después de esa edad puede surgir, en los casos más controvertidos, una batalla legal que, por tendencia judicial, termina favoreciendo a la mujer.
Sin embargo, en los últimos días "La Nueva." conoció un fallo en el ámbito local que parece marcar una clara excepción: la Cámara de Apelación en lo Civil y Comercial de Bahía Blanca otorgó la custodia de una niña de 11 años a su padre, que vive en La Plata, y le quitó la custodia a la madre, afincada en Carmen de Patagones.
La situación, infrecuente, se produjo en coincidencia con una polémica que está creciendo en intensidad, acerca de la difusión o no de un documental, bajo el nombre Borrando a papá y referido al padecimiento de los padres alejados de sus hijos.
La resolución, dictada por los jueces Miguel Diez y Guillermo Ribichini, fue en favor de J.A. y perjudicó a E.N.L. (no se identifica a los adultos para preservar a la menor).
El matrimonio se separó en noviembre de 2008 y el divorcio se concretó el 13 de junio de 2011. En primera instancia acordaron la tenencia de la menor a su madre, con un amplio régimen de visitas para el padre.
Sin embargo, el 19 de septiembre de 2012, el hombre presentó ante la justicia un pedido, porque la niña le había pedido irse a vivir con él, denunciando un entorno de cierta violencia en la vivienda de la madre.
E.N.L. negó el maltrato y la jueza de paz de Patagones ordenó que siguiera la custodia en poder de la madre, ya que para cambiarla “deben mediar causas muy serias relacionadas con su seguridad o la salud moral, las cuales a su criterio no existen”.
No obstante el caso llegó a la segunda instancia y la Cámara lo revocó, al dar especial cabida al interés de la niña.
Un vínculo difícil.
La licenciada en Psicopedagogía Analía Rosenhurt advirtió que la niña ya había manifestado su voluntad de vivir con su padre aún antes de la tenencia acordada (a fines de 2010).
Durante una entrevista realizada hace un año, la chica recalcó que, a diferencia de lo que sucedía en Patagones, prefería vivir en La Plata porque “tiene 7 amigas” y mantiene una buena relación con la actual pareja de su padre.
“No cabe duda alguna de cuál es la voluntad de la menor respecto de con quien quiere vivir, manifestación sostenida con anterioridad a decretarse el divorcio y en la actualidad y que las razones son un vínculo materno-filial deteriorado por la ruptura matrimonial, el cual no obstante los tratamientos psicológicos no se ha logrado superar”, dijeron los jueces.
Recalcaron que si bien no se logró probar que fue víctima de maltrato, “se advierte de los informes psicológicos un vínculo materno-filial conflictivo”.
La Cámara consideró conveniente que la niña mantenga los tratamientos iniciados, porque incluso podrían mejorar la relación con su madre y, finalmente, tuvo en cuenta la Convención Internacional sobre los Derechos de los Niños, al afirmar que “la decisión de los niños destinatarios de la resolución judicial debe ser considerada, toda vez que lo que debe prevalecer es el interés superior del niño”.
Código Civil
Lo que se encuentra estipulado por la normativa vigente
El artículo 206 del Código Civil indica que “separados por sentencia firme, cada uno de los cónyuges podrá fijar libremente su domicilio o residencia. Si tuviese hijos de ambos a su cargo, se aplicarán las disposiciones relativas al régimen de patria potestad”.
“Los hijos menores de cinco años quedarán a cargo de la madre, salvo causas graves que afecten el interés del menor”, agrega.
“En casos de matrimonios constituidos por ambos cónyuges del mismo sexo, a falta de acuerdo, el juez resolverá teniendo en cuenta el interés del menor.
Los mayores de esa edad, a falta de acuerdo de los cónyuges, quedarán a cargo de aquel a quien el juez considere más idóneo. Los progenitores continuarán sujetos a todas las cargas y obligaciones respecto de sus hijos”, finaliza.
Peligra la emisión de un documental
Agrupaciones de padres alejados de sus hijos difundieron una petición en la que le solicitan al Instituto Nacional de Cinematografía y Artes Audiovisuales (INCAA) que fije fecha de estreno para el documental "Borrando a Papá", financiado por la institución.
De esa manera le reclamaron que no se ceda ante las presiones de un grupo de organizaciones, calificadas como feministas, que reclaman que el film sea censurado.
Las directoras de "Borrando a Papá", Ginger Gentile y Sandra Fernández Ferriera, expresaron que la emisión "saca a luz un problema tabú, oculto en la manipulación de las estadísticas de violencia de género; en la estigmatización del padre varón como violento per se; en el funcionamiento de la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte, y en la violación de derechos constitucionales que protegen el vínculo entre padres e hijos.
Se trata de cinco casos de padres que, por distintas situaciones, no pudieron mantener contacto frecuente con sus hijos y que reflejan el abordaje “prejuicioso y antijurídico con que opera la Justicia de familia argentina".
“Borrando a papá” tiene, hasta el momento, fecha de estreno para el próximo jueves 28 en alguna de las salas del circuito INCAA.
Desde Salud Activa, una de las ONG's que promovería la censura, acusan a las directoras del documental de encubrir a violentos y abusadores, aunque Gentile y Fernández Ferreira dijeron que se trata, en definitiva, de abrir a la opinión pública un debate legítimo, similar al que ha ocurrido en muchos países, que ha permitido revisar los procedimientos judiciales en este sentido.