La presidenta encabezó el acto del regreso del sable corvo de San Martín al Museo Histórico
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La presidenta Cristina Fernández ofició hoy de anfitriona del sable corvo del general José de San Martín al esperar junto a funcionarios nacionales el regreso del arma al Museo Histórico Nacional en el parque Lezama, del barrio porteño de San Telmo.
Cristina Fernández recibió con un aplauso el ingreso del sable que era llevado en mano por un granadero hacia el interior del museo.
En tanto, el secretario de Seguridad, Sergio Berni, lo consideró como "una posta de dignidad nacional que debería guiarnos siempre".
El sable, remarcó, "fue el atributo central del guerrero en la batalla. Y una vez conquistada la paz, pasó a convertirse en emblema de dignidad".
En una columna que publicó en su perfil de Facebook, Berni apuntó que "a veces parece que estamos lejos de los valores y recomendaciones que nos legó San Martín. En momentos nos aturdimos y perdemos la orientación".
Tras destacar que la presidenta Cristina Fernández "vuelve a poner en primer plano no solamente un objeto de gran importancia histórica, sino los valores de una gesta", dijo que le "gusta pensar que este sable -que pasó tantas peripecias- es como una posta, de esas de las carreras. Una posta de dignidad nacional que debería guiarnos siempre".
Y, señaló que "el sable que Cristina democratizó hoy" significa una "prenda de unidad nacional, de emancipación, de derechos conquistados, de dignidad, de paz".
"Es un símbolo de libertad"
El presidente del Instituto Nacional Sanmartiniano, Eduardo García Caffi, aseguró que “es un símbolo de libertad de toda América Latina", porque acompañó al prócer "en todas las guerras de la Independencia”, que no tuvieron por objeto la ocupación sino la liberación de los pueblos, que “se logra con la Ilustración y los libros” por los que estaba tan preocupado.
“Esa libertad por la que luchó tuvo unas características particulares: los ejércitos de San Martín fueron de liberación y no de ocupación, fue un hombre que se preocupó por el destino de los pueblos y que decía que la ignorancia es la columna vertebral que sostiene al despotismo”, dijo en diálogo con la Televisión Pública.
Para fundamentar esta postura, García Caffi recordó que San Martín “llevaba unas pocas alforjas de objetos personales” en sus campañas “pero sin embargo iba con 11 baúles, con más de 800 libros, y fundaba bibliotecas en cada uno de los lugares que libertaba.
“Por eso decimos que era un libertador de los pueblos, quería que los pueblos puedan autodeterminar su futuro”, dijo.
García Caffi atribuyó a este hecho el “gran espíritu sanmartiniano de nuestro pueblo”, que reconoce en San Martín un “hombre que nos legó la libertad y la de América, preocupándose por no entrar en luchas intestinas”.
El sable corvo original de San Martín, que por un decreto del ex dictador Juan Carlos Onganía se encontraba en el Regimiento de Granaderos desde 1967, vuelve a ser exhibido desde hoy en el Museo Histórico Nacional, donde permanecerá en una sala especial con custodia del Regimiento de Granaderos. (DyN y Télam)