Gauchos del Mar: el surf,como documental y arte

Redacción de La Nueva.

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Donde terminan los Andes fueguinos, al extremo este de la provincia más austral del mundo, se encuentra Península Mitre, un territorio tan fascinante como poco explorado. En su recorrido por el continente americano, desde California hasta el sur argentino, los hermanos Joaquín y Julián Azulay llegaron hasta allí para cumplir un nuevo objetivo en su aventura de surfear en lugares inéditos para esta disciplina deportiva.

No solo eso, sino que también producen documentales con mensajes conservacionistas que hasta aquí resultaron multipremiados. El primero fue “Gauchos del Mar surfeando el Pacífico Americano”, el segundo “Tierra de Patagones” y el tercero “Península Mitre, la tierra olvidada”, que presentarán mañana a las 20.30 en Forum (Corrientes 123).

“El viaje a Península Mitre fue el año pasado. Es un área virgen, no vive nadie, un lugar de paisajes increíbles. También es muy duro porque casi no hay comida y quedás incomunicado. Pero a partir de este viaje buscamos crear conciencia para su preservación”, dice Joaquín.

Los Azulay, de 29 y 30 años, son hijos de Jorge, uno de los pioneros del surf en Argentina a comienzos de los 60. Ahora tiene 73 años y sigue surfeando. De hecho, en el primer documental se lo ve corriendo olas e incluso aparece en el segundo, aunque en este caso cantando. Jorge Azulay es amigo y compuso algunas canciones con Donald, aquel de Las olas y el viento.

“El nombre Gauchos del Mar lo puso hace unos años Mateo, un estadounidense que vive en un pueblito de California. Le contamos quiénes éramos y qué hacíamos, y que queríamos armar un blog pero nos faltaba el nombre. Por ser argentinos y estar todo el día tomando mate, se le ocurrió”, agrega Joaquín.

Y remata: “El surf es la excusa para documentar lugares que casi no se conocen o mostrarlos desde otro ángulo”.

En gauchosdelmar.com hay más datos de su historia, los tráilers de cada documental y contactos.

También un mensaje: dejar a un lado el consumismo y acercarse a una forma sencilla de vivir para proteger regiones de belleza e importancia únicas.