Bahía Blanca | Sabado, 27 de abril

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“Batman” y Lezcano, los héroes de la película que filmó Tiro en Lincoln

El arquero aurivioleta se convirtió en la gran figura del partido decisivo al atajar un remate en la definición desde los doce pasos. "Todos nos subestimaron; sólo nosotros confiábamos en nuestras fuerzas", dijo en la intimidad del vestuario. Javier Oscar Schwab / Enviado especial a Lincoln
Se hizo gigante, Gastón Lezcano, para contener el remate de Velázquez y, prácticamente, asegurar el ascenso de Tiro Federal.

Gastón Lezcano no tuvo reparos en reconocer los méritos de sus compañeros. De hecho, más allá de los abrazos recibidos y las felicitaciones, el golero aurivioleta dejó de lado sus sentimientos y le dedicó la clasificación a Pablo Schmidt, a quien calificó de baluarte fundamental.

“Hoy (por ayer) todos hablan de mis atajadas, pero hay que acordarse de que hace una semana Pablo nos salvó de una goleada. Si no hubiera sido por él estaríamos hablando de otra cosa”, dijo Chiquito.

--¿Qué explicación le encontrás a este momento?

--Me acuerdo que llegamos a Lincoln y todos los medios hablaban del festejo que se había preparado para la noche en el club. Todos nos subestimaron; sólo nosotros confiábamos en nuestras fuerzas.

--En la tanda de penales parecías más grande de lo que sos. ¿Intimidaste a tus rivales?

--Ja, ja…, puede ser. Me tenía mucha confianza. El “9” de ellos (por Barboza), ya no estaba en la cancha y era un pateador seguro. Sabía que si fallaba el arquero en el primero, íbamos a tener muchas chances.

--Mucha alegría interna, pero tuvieron dedicatoria.

--Nos enganchamos con los hinchas y cantamos contra Villa Mitre porque es nuestro clásico rival. La gente lo vive así; es difícil abstraerse de ese marco, porque uno está feliz y se desahoga. Vivimos momentos muy lindos, tuvimos rivales durísimos y demostramos mucha personalidad en todas las canchas. Las finales son para ganarlas y festejarlas.

--¿El penal atajado fue pura intuición?

--No. El arquero ya había errado, por lo que decidí esperar hasta último momento. Velázquez se paró al recto y pensé que me la tiraba al palo izquierdo; cuando inclinó el pie me tiré abajo y la desvié. En el otro penal la alcancé a tocar, dio en el palo y se metió mansita. Por suerte con uno alcanzó.

--¿Imaginabas este final?

--Sí, quería los penales porque ya habíamos tenido una experiencia en Bariloche y la superamos. Había dicho antes del partido que si se llegaba a los penales el ascenso era para nosotros. Ni loco dejaba pasar una oportunidad así.

--¿Qué méritos tiene este equipo de Tiro?

--Ufff… Humildad, sacrificio, amor a la camiseta… Un grupo de jugadores que entró en la historia del club y que está un escalón arriba, donde todos queríamos estar.

--¿Y vos que méritos te adjudicás?

--Los mismos que los que tienen mis compañeros. Y sumo a todos los que no pudieron jugar y son parte de este éxito.