Bahía Blanca | Sabado, 18 de mayo

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Consecuencias de la inusual tormenta

CARMEN DE PATAGONES y VIEDMA (De nuestras agencias) -- Esta comarca continuaba ayer reponiéndose de las graves consecuencias que dejó el intenso temporal de viento, tierra y lluvia que el domingo sumió a ambas ciudades en la oscuridad en plena tarde y provocó varios heridos, voladuras de techos y caídas de grandes ramas de árboles.

 CARMEN DE PATAGONES y VIEDMA (De nuestras agencias) -- Esta comarca continuaba ayer reponiéndose de las graves consecuencias que dejó el intenso temporal de viento, tierra y lluvia que el domingo sumió a ambas ciudades en la oscuridad en plena tarde y provocó varios heridos, voladuras de techos y caídas de grandes ramas de árboles.


 Cuatro de los seis lesionados durante la tormenta serían dados de alta en las próximas horas, según se informó desde el Hospital Municipal Pedro Ecay, de Carmen de Patagones.


 "Recibimos, por el fenómeno climático, seis heridos, dos mayores y cuatro menores. Cuatro iban en una camioneta a la que se le cayó un árbol en la Costanera", dijo la subsecretaria de Salud maragata, Silvia Ocampo.


 Explicó que las víctimas --que no fueron identificadas-- presentaban traumatismos y si bien los mayores "llegaron lúcidos, poco después perdieron el conocimiento; los cuatro se mantienen en observación" en el nosocomio.


 "Otros dos pacientes también fueron atendidos, pero sólo por unas escoriaciones y rápidamente fueron dados de alta", destacó la funcionaria.


 Trascendió que las víctimas provenían de Stroeder y de Cipolletti, respectivamente.


 El temporal comenzó pasadas las 18 del domingo, cuando una gigantesca nube de tierra llegó empujada por un fuerte viento del noroeste y rápidamente oscureció el cielo de Patagones y de la capital rionegrina, extendiéndose también hacia la zona del balneario El Cóndor, a unos treinta kilómetros de Viedma.


 En Carmen de Patagones el viento provocó voladuras de techos, caídas de ramas y la caída de un añoso mimbre aplastó una camioneta Ford de doble cabina en la Costanera, lesionando a las personas que se hallaban en su interior.


 Fue necesaria la intervención de los bomberos voluntarios, personal policial, empleados municipales y agentes sanitarios, para socorrer a las víctimas.


 El viento había comenzado a soplar con fuerza desde la mañana, aunque recién después de las 18 alcanzó la máxima intensidad y produjo los serios inconvenientes.


 "Primero fue una nube de tierra, después se empezó a oscurecer y cayó una importante lluvia", dijo una vecina que, a principios de noviembre último, había sido testigo de un fenómeno similar en Bahía San Blas.


 La tormenta también alcanzó la zona este del distrito, desde el Faro Segunda Barranca hasta Stroeder, abarcando San Blas y Los Pocitos.

Panorama en Viedma.




 Mientras tanto, los bomberos, policías, agentes públicos y personal de Defensa Civil de Viedma, continuaron ayer trabajando intensamente para solucionar los problemas que el fenómeno meteorológico del domingo dejó en la capital rionegrina y en el balneario El Cóndor.


 Entre los inconvenientes más serios se contaron las caídas de árboles y ramas y voladuras de techos, entre ellos de un sector del barrio Inalauquen.


 Las autoridades confirmaron ayer que pese a que el temporal dejó a oscuras a la comarca, a media tarde, no hubo que realizar evacuaciones en los barrios más humildes de la ciudad.


 Las altas temperaturas previas hicieron que mucha gente se acercara a la costa del río en busca de refresco y allí fue sorprendida por la tormenta, registrándose escenas de pánico.


 Lo mismo ocurrió en El Cóndor, hasta donde llegó el fenómeno, obligando a interrumpir el tránsito en la ruta provincial 1, donde la visibilidad pasó a ser prácticamente nula a causa del polvo en suspensión.


Un fenómeno similar









 Una tormenta similar a la registrada el pasado domingo en la comarca de Patagones-Viedma, se produjo hace dos meses en las localidades de Stroeder y Bahía San Blas.


 Sucedió la tarde del 4 de noviembre pasado, oportunidad en la que el fenómeno dañó los techos de varias viviendas, derribó postes y cortó cables eléctricos, entre otras consecuencias.


 Una de las más perjudicadas fue la estación de servicio Esso ubicada en las calles 27 y 4, de San Blas, que sufrió la voladura del techo, pero sin que en ninguno de los casos se produjeran víctimas.