El "Pepo" Pérez vuelve al Midget: "Me quedó la espina clavada"

Redacción de La Nueva.

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Por Tomás Arribas / tarribas@lanueva.com

   Dos temporadas completas sin acción fueron vacaciones más que suficientes para el medanense Sebastián Pérez (30), quien parece haber recargado pilas y tomado el impulso necesario para despuntar el vicio del derrape por segunda ocasión. 

   Pepo, radicado en nuestra ciudad hace varios años, vendió todo allá por febrero de 2017 y dio un golpe de timón desembarcando en el automovilismo de asfalto, puntualmente en el Turismo Regional, donde compitió un año y medio. 

   Quienes incursionaron en ambas divisionales coinciden que no existe relación alguna entre una cosa y otra. Es por eso que, más allá de tomar un volante y acelerar, la adrenalina del Midget es incomparable con cualquier cosa... 

   Y efectivamente, la pasión pudo más. Tal es así, que promediando el Estival en curso (suena raro, pero así son las cosas), y sin meditarlo demasiado, Pepo confirmó su vuelta al ruedo con un ambicioso proyecto deportivo. 

   "Fueron muchos años compitiendo, con buenos y malos momentos, pero disfrutándolo desde el primer día. Se hicieron las cosas bastante bien y eso hace que se extrañe mucho. No tenía en la mente volver, estaba muy tranquilo con el Turismo Regional. Pero surgió la posibilidad y acá estamos", nos cuenta Pérez.

   Hubo dos factores claves que encaminaron la determinación: la superlativa actuación gestada en la pasada competencia de invitados del Club Midgistas del Sur (arribó 2º) y una pequeña cuota pendiente... 

   "Cuando Nahuel (Schmit) me invitó a correr me encontré con muchas lindas sensaciones y un auto que andaba bien. Hacía mucho que no me subía, no pensaba andar tan bien. Parecía que me había bajado ayer, me sentí como nunca. Eso ayudó mucho, y ni hablar de mi familia que está súper entusiasmada y contenta con la posibilidad", confesó.

   "Pasaron muchos años hasta que logré pelear bien adelante. Tuvimos la chance de estar ahí en dos campeonatos, pero por distintas circunstancias no se dio. Y bueno, quedó esa espina de no haber logrado el objetivo. En este tiempo que no corrí no iba a la pista para no tentarme, por dentro lo sufría", agregó. 

   Claro que para un piloto que alguna vez experimentó la sensación de estar en lo más alto del podio y de llegar a una última fecha con chances de colgarse la corona, los objetivos en pista serán incuestionables... 

   "Nos estamos armando para andar bien e intentar pelearla. Apostamos a un chasis 0 km y todos elementos nuevos. Ya pasamos por la etapa de aprendizaje, tenemos bastante experiencia en la categoría, por eso la idea de volver es andar lo más adelante que se pueda. Hay que ver si estamos a tono", enfatizó.

   "Obviamente que está la posibilidad de terminar 70º también (risas) , pero nos estamos armando como para que no haya excusas. Yo me estoy poniendo las pilas, el auto se está haciendo con muchas ganas y el equipo que se armó me incentiva mucho", agregó Pepo.

   Uno de los pilares en el "proyecto retorno" es Julián Suárez, encargado de la concepción y atención íntegra de la nueva estructura. "Beco", un viejo conocido de Pepo, ganó considerable reputación como chasista en la última temporada.

   "El auto está prácticamente listo, faltan detalles que se están puliendo para poder pintarlo y armarlo. Del chasis se encargará Beco, que además de la construcción lo atenderá por completo. Todavía no definimos el tema motor, aunque hablamos con Luciano Boccacci. Hay que ver si podemos llegar a un arreglo", detalló. 

"Habíamos arrancado con una mano atrás y otra adelante"

   El gran salto a la fama de Sebastián Pérez se produjo en la temporada 2013/14, en la que, luego de muchos años de lucha y sacrificio, irrumpió en el plano puntero con la primera tentativa de campeonato. 

   Hacia la 18ª y última fecha, Pepo, que ese año ganó su primera final (15ª fecha) y disputó su primer playoff, llegó como el segundo máximo aspirante al título, detrás de Daniel Altamirano y por delante de Julio Monteros, quien finalmente se proclamó campeón.

   Disputadas las semifinales, con el Potro fuera de competencia (rompió un palier), Pepo se llevaba todas las miradas. Parecía ser la noche soñada, el medanense iba camino a la inesperada consagración suprema...

   "Esa temporada arrancamos con una mano atrás y otra adelante, y un presupuesto prácticamente nulo. Teníamos el auto parado, lo fuimos a buscar a Médanos y lo armamos entre amigos en el taller de Koky (Hugo) Schaposchnik. La primer fecha hicimos podio y ya ahí empezamos a verlo de otra forma", recordó.

   "Hicimos todo lo mejor, yo di lo máximo manejando, y por una cuestión de fierros no se pudo. Hoy no siento bronca ni culpa por eso, porque son cosas que pueden pasar. Pero sí me quedé con la espina clavada, faltaban dos vueltas para ser campeón. Y me acuerdo que se rompió todo (motor). Pero bueno, no tenía que pasar", lamentó.Pérez.