Pornografía infantil: en 2019 se inició una causa cada 5 días en Bahía

Redacción de La Nueva.

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Por Pablo Andrés Pascual/ppascual@lanueva.com

   La semana pasada, efectivos de la delegación local de Gendarmería Nacional irrumpieron en una vivienda del barrio Comahue, donde a pedido de la fiscal Marina Lara, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 14, secuestraron un teléfono celular y una notebook.

   El resultado parecería uno más en cualquier causa penal, pero resulta vital para aquellas en las que se investiga la distribución de pornografía infantil.

   El análisis de este tipo de dispositivos brinda elementos de importancia para poder avanzar en las imputaciones.

   Estos procedimientos no son aislados, ya que, según estadísticas del Ministerio Público, a lo largo de 2019 se pusieron en marcha 67 investigaciones por este tipo de delito.

   Esto determina un promedio aproximado de inicio de una causa cada cinco días.

Un aporte vital

   En 44 de esos casos (65%), según los voceros, comenzaron a partir de información brindada por la ONG estadounidense Centro Nacional para Menores Desaparecidos y Víctimas de Explotación Sexual, conocida en nuestro país como Ncmec, por sus siglas en inglés.

   "La forma más usual de que se pongan en marcha estas causas es a través del convenio de esta organización con varias empresas tecnológicas que operan en Facebook e Instagram, entre otras. Cuando detectan que por sus redes se transmite una imagen de pornografía infantil, de inmediato dan aviso al país en el que se produjo esa acción para que se ponga al tanto a las autoridades judiciales", indicó una fuente de la fiscalía.

   Explicó que en ese informe se identifica la dirección de IP de la que se produjo el envío del material, lo que permite establecer un domicilio y posteriormente allanarlo.

   "En un inicio se instruyen las actuaciones por la distribución o facilitamiento de este tipo de material, pero cabe destacar que desde hace un tiempo también es delito la tenencia".
Indicó además que las otras 23 causas se iniciaron de diversa manera, a partir de material incautado en otros procesos y denuncias.

Cómo se produce

   El especialista en delitos informáticos, Gustavo Sain, explicó que “lo que hace a la distribución de imágenes sexuales de menores por Internet, se realiza generalmente entre usuarios mediante programas de intercambio de archivos o redes P2P (entre pares)”.

   Mencionó además que “en casi todos los casos las imágenes están almacenadas en las computadoras de los usuarios y se intercambian fotografías y videos entre sí, en forma directa, mediante el sistema Torrent, que es un protocolo de comunicación para el envío de archivos pesados”.

   Sain describió que el sujeto que tiene esta conducta delictiva es más sencillo de rastrear, debido a que la lleva adelante en ámbitos privados, como su casa o trabajo.

   “A partir de una denuncia, las autoridades pueden acceder a la dirección IP del dispositivo desde donde se almacena, recibió o transmitió una imagen de este tipo para luego asociarlo a la persona usuaria de ese material. En este sentido representa un rastro o indicio condicionante", finalizó.

Datos que preocupan

   Unicef realizó en 2012 un informe en el que describió que la mayor parte del material pornográfico de menores que circula presenta imágenes de nenas de entre 1 y 10 años de edad.

   “A pesar de que los niños están muy presentes en Internet, son muy escasas las medidas que se toman para protegerlos de los peligros del mundo digital y para aumentar su acceso a un contenido seguro en línea”, describió en ese momento el organismo internacional.

   El paso del tiempo agravó el problema, ya que según datos revelados en 2018 por Internet Watch Foundation (IWF), cada cinco minutos se sube a la web una imagen de pornografía infantil.

   “Argentina está dentro de los 10 países más consumidores de pornografía infantil del mundo”, alertó Carlos Rojas, director general de Prevención e Investigación de Delitos Tecnológicos de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires.