Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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¿Cuáles son las claves para aumentar los márgenes en planteos agropecuarios?

La planificación y el manejo de los recursos forrajeros son parte de las herramientas. Aumentan la eficiencia y elevan los resultados económicos de los sistemas de producción mixtos.

Producción de sorgo en la provincia de Buenos Aires. / Fotos: Archivo La Nueva.

Guillermo D. Rueda / grueda@lanueva.com

   “No es necesario agrandarse en otros campos, sino maximizar el uso de los recursos propios. La idea es aprovechar las nuevas tecnologías disponibles para ser cada día más eficiente en la producción de alimento y aumentar la rentabilidad por hectárea. Esto resume el espíritu del análisis productivo”.

   Lo dijo Gaspar Sánchez Cores, responsable de contenidos de Marketing de Advanta, en el marco del espacio de Acción Ganadera, un espacio de capacitación para técnicos, productores y asesores ganaderos dentro de Agroactiva.

   Está claro que a la hora de planificar la oferta forrajera en un establecimiento es clave conocer no sólo los requerimientos nutricionales de cada categoría, sino las diversas prácticas posibles para la confección de alimento.

   Así entonces, el silo es un jugador clave a la hora de elevar los rendimientos de kilos de carne por hectárea, pero debe ir acompañado con la eficiencia de manejo en los procesos de producción del cultivo, confección, conservación y utilización.

Gaspar Sánchez Cores.

   Sánchez Cores presentó los diferentes indicadores a considerar para aumentar la eficiencia productiva en un establecimiento mixto. Detalló un caso estudiado por la compañía sobre un establecimiento de producción mixta, en la localidad de Ameghino, donde se aplicó todo lo evaluado anteriormente en trabajos conjuntos desarrollados por la firma junto al grupo de Forrajes Conservados, del INTA Manfredi, durante 5 años.

   Esos trabajos fueron publicados por Marcelo De León, del Área Producción Animal de esa Experimental del INTA y profesor de Nutrición Animal de la Universidad de Córdoba.

   Entre otros factores, se analizó el impacto de diferentes rendimientos del cultivo de sorgo sobre el margen bruto. Esos rendimientos fueron relevados en casos reales de campo, bajo diferentes condiciones ambientales, híbridos y manejos agronómicos.

   Así, compararon cuatro niveles de rendimiento de los silajes utilizados en autoconsumo, en conjunto con pastoreo horario de verdeos como aporte de proteína a la dieta y con 5 % de pérdidas en el proceso.

Se encontraron diferencias del orden del 50 % en el margen bruto por hectárea entre el mayor y el menor rendimiento (17.500 vs. 12.250 kilos de materia seca/ha) del cultivo de sorgo destinado a silaje.

   Otro de los factores evaluados fue el aporte proteico y su impacto sobre el resultado final.

   Al comparar dos situaciones, ambas con un rendimiento bueno (14.000 kilos M.S./ha) de silaje de sorgo, se encontró que el margen bruto de una dieta de silaje de sorgo con el agregado de soja, suministrada con mixer, ofreció un margen bruto de prácticamente la mitad comparado con el modelo basado en autoconsumo del silaje de sorgo con pastoreo horario de un verdeo.

Qué dice la experiencia

   El agregado de silo de sorgo y maíz en la alimentación, acompañado de un manejo adecuado de este tanto en la elección del hibrido, confección y suministro mostraron un incremento en los indicadores productivos en las categorías de cría, recría y terminación.

   Así quedó reflejado junto al trabajo realizado por el productor ganadero Marcelo Passon, de Ameghino, en un establecimiento de producción mixta.

   En el rodeo de cría se observó un aumento significativo en el índice de preñez que resultó del 98,5 %, y el porcentaje de destete aumentó a un 95 %.

   Durante los meses de mayo, junio, julio y agosto la alimentación del rodeo de cría se basó en 17 kilos de silo de sorgo diario, confeccionado a partir del híbrido ADV2450IG y ryegrass. A su vez, el aumento de peso diario, logrado en categorías de recría a partir de una base forrajera de silo de sorgo con suplementación proteica, resultaron de 0,9 kg/día.

Marcelo Passon, productor ganadero de Ameghino.

  En lo que respecta a terminación se realizó con una dieta a base de 55 % grano de sorgo partido; 10 % maíz; 4,5 % expeler de soja; 1,5 % de núcleo y el resto con silo de maíz aportando la energía requerida para esta categoría.

   “Pudimos evaluar el importante rol que cumple el silo de sorgo en planteos ganaderos, principalmente para las categorías de cría y recría impactando considerablemente en el incremento de kilos de carne por hectárea producidos”, dijo Passon.

  Es importante considerar ciertos aspectos claves a la hora de destinar un cultivo a la confección de silaje de planta entera. Sobre todo, en el cultivo de sorgo, donde la diversidad de biotipos presentes en el mercado puede complejizar la elección del híbrido indicado.

   En primer lugar, la relación grano/planta del cultivo surge como uno de los indicadores más importantes a la hora de abordar el proceso de elección. Esto dependerá, fundamentalmente, de los requerimientos nutricionales de cada rodeo.

   En el caso de Ameghino, la tecnología Igrowth cumplió un rol fundamental en la producción de silo de sorgo, ya que el establecimiento presenta limitaciones edáficas.

  El segundo aspecto para tener en cuenta para confeccionar un buen silo es la correcta confección y conservación.

   Estos dos puntos son claves para asegurar la calidad de la reserva forrajera. Para ello hay cinco decisiones importantes que el productor debe tomar a la hora de la confección: el momento de picado, el tamaño de la fibra, el procesado del grano, la compactación del silo y el uso de inoculantes o aditivos.

   Además, la buena conservación previo al suministro y, una vez abierto, el silo es fundamental para conservar las propiedades nutricionales y que se vea reflejado en la performance animal.

   Una tasa de extracción no mayor a 40-50 centímetros de avance diario son indicadores, fundamentales, para mantener la calidad del silo, reduciendo la exposición a factores aeróbicos que afecten su conservación y calidad.

Ser eficientes en esta etapa de suministro impacta directamente en la rentabilidad del sistema, ya que el costo de confección de un silo no se incrementará por las pérdidas a la hora del consumo.

   A partir de los datos evaluados en el establecimiento, se pudo concluir que la eficiencia en la planificación de los recursos forrajeros, la correcta confección, conservación y suministro del alimento brindan una mayor eficiencia en el sistema productivo reflejado en un aumento de la rentabilidad por mayores kilos de carne producidos por hectárea.