Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

“Hubiese preferido perder la votación 13 a 2, pero con San Francisco de nuestro lado”

Leandro Schwab, referente del Departamento de fútbol del club Libertad, es uno de los que no está de acuerdo con que se haya dado por terminado el campeonato Apertura de la Liga del Sur. Más allá de eso, continúa molesto con sus pares del celeste de Villa Italia: “parece que se olvidaron del favor que le hicimos en 2017”, disparó sin concesiones.

Fotos: Facebook Leandro Schwab

Por Sergio Daniel Peyssé / speysse@lanueva.com y peche1503@hotmail.com

Instagram: @sergiopeysse

Twitter: @elpeche1973

   En Libertad los dirigentes están enojados. También un poco molestos. Y a esta altura bastante resignados…

   ¿Con quién y por qué? En realidad con varias cuestiones que rodean al fútbol en el ámbito local, pero sobre todo con el apresuramiento de la Liga del Sur, que por disposición de los clubes, como suele suceder siempre, dio por terminado el torneo Apertura y confirmó que el próximo campeonato, cuando la bendita pandemia permita el regreso de la actividad, sea en dos categorías: A y B.

   Esa es la cuestión principal. Pero hay otra que sigue afligiendo el espíritu de la cúpula jerárquica del milrayita: que el club San Francisco no haya estado de su lado en la última votación, la que justamente definió que no se iba a continuar con el Apertura y que la competencia --en lo que queda de este 2021 o en 2022-- se retome con un certamen superior y un Promocional de ascenso.

   ¿Cómo? Se lo voy a explicar...

   En la entidad de Villa Rosas hay una herida abierta desde el 11 de noviembre de 2017, cuando supuestamente, y siempre guiándome por las opiniones de sus directivos, hizo causa común con el celeste de Villa Italia para no entrar a la cancha y no disputar el partido correspondiente a la fecha15 (penúltima) del torneo Clausura “Daniel Roa”.

   ¿Qué pasó? “El cotejo no se llevó a cabo debido a las diferencias de criterio entre los directivos de ambas instituciones y los efectivos policiales”, fue la razón publicada por La Nueva., coincidente con los demás medios que habían ido a hacer la cobertura de ese compromiso.

   El informe arbitral, con firma y sello del juez principal Marcos Gómez, aclara textualmente: “No se dio inicio al encuentro porque, a minutos de comenzar el mismo, se acercaron a mi vestuario dirigentes de ambos clubes a manifestar, de común acuerdo, que no se iban a medir futbolísticamente porque no aceptaban las condiciones que pretendía imponer la policía, que había decidido que en los bancos de suplentes solo iban a permitir a 2 auxiliares por equipo y que los jugadores de tercera división (habían terminado de jugar minutos antes) no se podían quedar en el estadio”.

   A raíz de ese escrito, a ambos equipos le dieron el partido por perdido, descontándoles además 3 puntos de la tabla de posiciones en ese mismo campeonato.

   “Dar por perdido a ambos equipos el encuentro que debían disputar los combinados de San Francisco y Libertad, deduciéndose los puntos correspondientes a dicho enfrentamiento más otros tres que se restarán de la tabla de posiciones al finalizar el presente campeonato”, reza el fallo del Tribunal de Penas, leído en la reunión del Consejo Directivo del miércoles 15 de noviembre, y amparado en los artículos 109 y 33 del Reglamento de Transgresiones y Penas (RTP).

   Presentado el tema, o los temas si usted así lo prefiere, le doy paso a las razones y a las explicaciones que, con la mayor claridad posible, le brindó a este medio Leandro Schwab, hincha, ex jugador y actual directivo del Departamento de fútbol del albiazul de Villa Rosas.

   “No estamos en desacuerdo a que se vuelva a A y B, solo estamos pidiendo un poco de sentido común, porque si estuvimos más de un año sin actividad a causa de la pandemia, ¿qué apuro había en definir el tipo de competencia con el que vamos a seguir si todavía no sabemos a ciencia cierta cuando vamos a volver a jugar? Por empezar de cero, corremos el riesgo de que esos torneos no los podamos terminar antes del 31 de diciembre. Si eso ocurre, en este 2021 serían tres certámenes inconclusos y ningún campeón”, sostuvo “Lea”.

   ¿A qué se refiere? A la determinación que se tomó en el cónclave del miércoles 9 de este mes, donde se puso en reconsideración (se había considerado en la reunión anterior antes de pasar a un cuarto intermedio) la continuidad o no del Apertura, por supuesto en el momento que la pandemia lo permita y estén garantizadas las condiciones de sanidad.

   La moción fue a votación, imponiéndose por 8-7 la iniciativa de seguir con el campeonato en cuestión, aunque no contó con los dos tercios que especifica el reglamento (es decir que necesitaba 10 sufragios) y es por eso que se resolvió dar por terminado el Apertura y retomar la actividad, cuando se pueda, con 8 equipos en la A y 7 en la B.

   En definitiva, se hizo todo tal cual se había decidido a principio de año, y por mayoría de los clubes, que votaron para que se juegue un Apertura unificado y, en el segundo semestre, un Clausura con los equipos divididos en A y B.

   Entonces, después de 7 años consecutivos con un único campeonato, el fútbol local volverá a tener dos competencias distintas: Superior (con descenso) y Promocional (con ascenso).

   “Libertad fue uno de los que apoyó la idea de dar por finalizado el torneo en caso de que la pandemia interrumpa al fútbol, pero no era el momento de volver a la A y la B, más allá de que históricamente siempre apostamos a que haya Oficial y Promocional”, sentenció Schwab.

   “Te digo más, cada vez que fue tratado el tema, nosotros siempre optamos por la A y la B. En 2014, antes de que se apruebe el Unificado, perdimos 14 a 1. Este año, previo al inicio del Apertura, volvimos a proponer las dos categorías y perdimos 12 a 3. Solo nos acompañaron Rosario y La Armonía. Lo pensamos en función de que era posible que el campeonato se pueda llegar a cortar en algún momento, tal como aconteció”, señaló el directivo del “villero”.


Con la sangre en el ojo

   “Jugar A y B es lo mejor para todos, tiene otra motivación... No estamos en contra de eso, solo decíamos que no era el momento, y así lo vimos los 8 equipos que votamos para que continué el Apertura si es que en algún momento la pelota vuelve a rodar”, subrayó.

   —Esos dos votos que faltaron, ¿los tenían de su lado antes de elegir a mano alzada por una opción u otra?

   —Yyy... No puedo asegurar si alguno se dio vuelta, sí creo que hasta el momento de la elección estuvieron en duda. El voto de San Francisco lo contábamos, pero no sé si hubo otro que se podía inclinar para nuestro lado.

   —Entonces el malestar tiene una sola dirección: San Francisco.

  —Antes debo aclarar que San Francisco había avisado que iba a votar lo que votó; en ese sentido no nos sentimos traicionados.

   —Sí por lo que sucedió a fines de 2017.

   —Es que a mi club le sacaron 3 puntos por apoyar la medida que esa tarde decidió tomar San Francisco, la de no presentarse a jugar en su propia cancha. Le dimos una mano y pensábamos que en este momento iban a estar de nuestro lado, pero no fue así. Al fin y al cabo cada uno es como es y resuelve a conveniencia de su club; es al pedo enojarse, patelear o hablar de más.

   —A ver si me queda claro: ¿el malestar es con San Francisco o con el presidente Jorge Dambolena, que a su vez es el vice de la Liga?

   —En este caso San Francisco no tiene nada que ver, entendemos que la decisión fue personal, que Dambolena optó por lo que más le convenía. En su momento nosotros le hicimos un favor y esperábamos que, al menos, nos banquen y nos acompañen con nuestra forma de pensar.

   “En aquel entonces hicimos lo correcto. Actuamos de buena fe y respaldamos a una institución que la estaba pasando mal y que ese domingo se vio superada por decisiones policiales que iban más allá de lo imaginado y lo reglamentado”.

   —¿Por qué, a la reunión siguiente del fallo del TDP, es decir el miércoles 21, Libertad no efectuó un descargo pidiendo una reconsideración, teniendo en cuenta que esos 3 puntos que le sacaban podían incidir en el futuro?

   —Había pasado tanto tiempo que creíamos que de eso no se iba a acordar nadie. En el momento no nos quejamos porque era una de las últimas fechas y tres unidades no significaban nada, ni para nosotros ni para San Francisco. No abrimos la boca y fue un error, lo reconocemos, y más ahora que por esos tres puntos no tenemos asegurada la plaza en la A.

   Claro, antes de la separación de las divisionales, será necesario que se disputen dos cotejos decisivos (si hay igualdad en ambos habrá un tercero) entre Libertad y Olimpo --están con la misma cantidad de puntos en la tabla general-- para definir quién arrancaría en la A y quién en la B.

   Es decir que nadie del representante milrayita tuvo en cuenta que en esa sumatoria acumulada se tomó registro de las temporadas 2017 (Apertura y Clausura), 2018 (Apertura y Clausura) y torneos Apertura 2019 (Clausura no porque se jugó en Grupos) y Apertura 2021.

   “Te soy sincero, no me vuelve loco ni estoy desesperado por tener que estar en la A o en la B. La Liga, democráticamente, le dio la posibilidad a todos para que elijan, pero no es el momento de partir la temporada en dos torneos, por ahí pasa la discusión y la bronca de ciertos clubes”, indicó el mandamás del fútbol en Libertad.

   “Me sigo preguntando: ¿para qué apurarse? El año que viene la situación sanitaria va a estar mejor, habrá más vacunados, entonces arrancás de cero con el calendario y le das más tiempos (todo el verano) a los equipos para que se preparen para la A y para la B”, deslizó con énfasis”.

   Y la siguió: “Si esperamos 7 años para volver a la A y la B, ¿qué le hace a los clubes aguardar seis meses más? El apuro no cambia nada, pero lamentablemente no todos lo entendieron así”, reflexionó el “Tigre”.

   “No queremos pelear con nadie ni observamos malas intenciones entre los clubes, pero no vemos que haya sentido común para que se reconsidere lo que se había votado, que tenía como fin modificar esa determinación para poder terminar un torneo que había empezado y que iba por la fecha 6. Te repito: puede suceder que en este 2021 no haya un campeón”, sentenció.

   “En definitiva, Libertad tiene que jugar dos finales y se puede salvar, aunque la discusión, el centro de la polémica pasa por otro lado”, deslizó Leandro, argumentando también que “nadie se tiene que olvidar que nosotros tenemos un partido menos que Olimpo, que es injusto no estar en igualdad de condiciones a la hora de calcular los puntos totales”.

 

¿Partido “caliente”?

   San Francisco y Libertad infringieron el reglamento y fueron sancionados, aunque algunos seguidores del conjunto de Villa Rosas sigan creyendo que solo su institución fue la perjudicada.

   “El hincha de Libertad debe comprender que además de habernos dado el partido por perdido, también nos descontaron 3 puntos, a nosotros y al `Sanfra´. No sumamos y la cuenta tras ese encuentro, que no llegó a disputarse, fue -3, esa es la realidad. La Liga no nos perjudicó ni hubo una mano negra, la sanción fue correcta y está avalada por el reglamento”.

   “En su momento me quejé que el fallo no se había dado a conocer en tiempo y en forma, pero las fechas de los informes que me estás mostrando demuestran lo contrario. Tendríamos que haber reaccionado antes, hoy no sirve de nada despotricar contra algo que hicimos mal pese a que humanamente nos pusimos en el lugar del otro”.

   —¿Crees que el TDP actuó con severidad y justicia?

   —El Tribunal se basa en determinados artículos y actúo como debía. En base al reglamento sancionó a los clubes por no presentarse a jugar. Después de conocer el fallo, nosotros tendríamos que haber pedido reconsideración para que el tema se debata en la reunión del Consejo Directivo. Ahí dormimos mal.

   “Tal vez era necesario tratar el tema en forma extraordinaria, salir de la letra fría del reglamento, porque en ese caso hubo un club que se puso a disposición del otro por una causa justa. Fuimos solidarios y no quisimos sacar ventajas de ningún tipo. De última, el partido se podría haber jugado en otro momento y se evitaba el descuento de puntos”.

   “Esa misma falta de sentido común fue la que dominó la escena en la última votación. Teniendo en cuenta que a principio de año se había decidido dar por concluido el Apertura si los contagios (de COVID) se tornaban incontrolables, hubo reconsideración y estuvo latente la posibilidad de volver todo para atrás, de darle continuidad al torneo, pero no la aprovechamos”, detalló el ex delantero.

   —Me imagino lo que pueden llegar a ser los duelos entre San Francisco y Libertad de ahora en más...

   —Ojalá nos quedemos en la A así no lo tenemos que enfrentar. Pero no fomentemos la violencia, no va a pasar nada y eso lo tenemos muy en claro. Nosotros, como club, sabemos que es lo que queremos y hacia donde apuntamos, y mientras pensemos en esos objetivos y en las ganas de crecer no vamos a sentir ninguna necesidad de declararle la guerra a nadie.

   “Libertad piensa como una entidad de primer nivel. Más allá del orden administrativo y de estar equilibrado financieramente, tiene predio propio y lugares de entrenamiento para cada una de las categorías, desde escuelita hasta Primera división”.

   “En Libertad se logró cambiar la imagen; la mentalidad no es la misma que hace diez años atrás. Se trabaja para progresar, para estar cada día mejor, por eso no sirve de nada pelearse por un lugar en una tabla de posiciones o por un resultado momentáneo”.

   —Es una buena manera de pensar.

   —Es así. En su momento Libertad le hizo un favor a San Francisco, pero no recibió el mismo voto de confianza cuatro años después. Tendrán sus razones por haber actuado así y no nos tiene que preocupar, pero esa actitud nos dejó regulando, no te lo puedo negar. Más allá de lo reglamentario, lo que más ruido nos hace es la parte humana, no fueron solidarios como nosotros fuimos con ellos.

   “Hubiese preferido perder 13 a 2 la votación, pero con San Francisco de nuestro lado. Le dimos una mano a un club que estaba fracturado económicamente, pero nos dieron a entender que nuestra ayuda no les importó. En su momento nos pusimos en el lugar del otro y no sentimos que ahora haya sucedido lo mismo”.

   “A veces es lindo darse una mano entre colegas, ayudarse mutuamente, colaborar con el crecimiento de un club que cumple la misma misión que vos en la sociedad”.


Una ilusión gigante: llegar a los 1.000 socios

   Leandro utiliza un vocabulario íntimamente emparentado al sector dirigencial, como que dejó de lado las muletillas del hincha pese a que en cada partido de su querido Libertad sigue sufriendo como en la época de jugador o de “fana” pegado al alambrado.

   “En esta función que me toca hoy estoy más tranquilo, pese a que manejás otras obligaciones y se multiplicaron las responsabilidades. Libertad se encuentra en un gran momento, sobre todo a nivel social. Se creció en infraestructura y se multiplicaron las actividades, aunque el logro más grande es haber conseguido un orden y una disciplina que hoy valoran más los de afuera que los de adentro”, declaró “Lea”.

   “Para triunfar en lo deportivo debemos hacer hincapié en la parte humana, es lo que nos debe movilizar para poder ver una institución mejor. Pretendemos un club con buena gente y lo estamos logrando. El hincha empuja para que formemos bases sólidas y podamos competir con las mejores armas. Ese es el horizonte a donde apuntamos”.

   —¿Hay obras o todavía son proyectos?

   —Estamos terminando un pórtico de entrada en el predio del fútbol menor e infantil (Tierra del Fuego y Tarapacá). Se hicieron seis canchas, tres de ellas tienen riego por aspersión y en poco tiempo van a ser sembradas.

   “Además le estamos prestando un servicio al socio, que de ahora en más puede pagar la cuota vía on line con un carnet magnético en cualquier rapipago o pago fácil. Libertad se abrazó a la tecnología, el cambio es muy grande en ese sentido. Mostramos al club por las redes sociales y seguimos sumando seguidores. Ojalá algún día podamos ser una institución plagada de actividades, sin dejar de lado el corazón gigante que nos caracterizó siempre”.

   —¿En el estadio se hizo algo?

   —No, está todo enfocado en el predio de menores. El complejo quedó muy lindo; es un sueño cumplido porque ahí se ve reflejado el presente y se vislumbra el futuro de Libertad.

   “Apostamos al semillero, como debe ser. Queremos que el papá llegue al club y vea entusiasmo y progreso, además de directivos comprometidos y con sentido de pertenencia. El chico que se suma se tiene que sentir cómodo, porque si le gusta y se identifica con los colores, se va a quedar para siempre”.

   “Desde la llegada de Julio Leguizamón y Pablo Palacio, el club creció en todos los sentidos. En lo deportivo queremos que nos vaya bien, pero debemos ir despacio”.

   “En relación a 10 años atrás, Libertad cambió un cien por ciento. Los directivos de antes marcaron el camino con presencia y sentimiento hacia el club, y los de ahora apuestan al orden institucional para modernizarse con los tiempos que corren. Para crecer necesitás espacios, horas de trabajo y recursos, tres pilares esenciales que Libertad consiguió con sacrificio y el interés de mucha gente que está a muerte con lo que hoy representa el club”.

   “Hoy contamos con actividades que antes no teníamos: vóley, patín, gimnasia artística y taekwondo, más el fútbol formativo y el de Primera división”.

   —¿Están por largar una campaña de socios?

   —Ya está en curso. Tenemos la ilusión de llegar a los 1.000 socios. Seguimos creciendo; sabemos que se puede.

   —¿Cuándo crees que vuelve el fútbol?

   —Espero que cuanto antes, porque previo a la reactivación de la competencia tenemos que jugar las dos finales con Olimpo. Necesitamos saber en qué fecha puede ser, porque el cuerpo técnico, en plena preparación, sigue con la incertidumbre de no saber si intensificar las tareas o dosificar las cargas.

   “El plantel está muy comprometido, con fe y ganas de jugar. Por muchas cuestiones que no vienen al caso enumerar en esta nota, el club y los jugadores se merecen quedar en la A. Igualmente, más allá de la categoría, sentimos que somos de Primera. Nos quitaron tres puntos, pero no nos arrebataron la ilusión.

 

Iguales

 

102
   Puntos. Tienen Libertad y Olimpo en la tabla general, y deberán jugar dos cotejos para definir el octavo lugar. El ganador se quedará en la A y el perdedor irá a la B.