Rutas Solidarias: cuando la empatía viaja en combi por nuestra zona

Redacción de La Nueva.

contenidos@lanueva.com

Auionota: Malena Ruppel

Anahí González
agonzález@lanueva.com

   Consiguieron una combi, tienen ganas de ayudar y cuentan con la complicidad de aquella gente que los acompaña en la noble tarea de hacer algo por quienes tienen más necesidades. Así, los voluntarios de la agrupación Milla Curá, compuesta por jóvenes de entre 16 y 30 años, y liderada por Darío Gómez, desde hace 10 años, encararon el proyecto Rutas Solidarias.

   La iniciativa consiste en entregar de forma gratuita guardapolvos, útiles escolares, zapatillas y libros a las escuelas rurales de las comunidades más pequeñas y/o alejadas o con necesidades, del distrito de Coronel Suárez.

   Los voluntarios cargan en su vehículo estos materiales –que obtienen gracias a donativos comunitarios—y los trasladan hasta las instituciones. Una vez allí, colocan sobre un tablón al aire libre todo lo que lograron conseguir para que las familias con mayores necesidades puedan seleccionar aquello que les hace falta.

   Darío Gómez contó las características del proyecto, los valores que le dan sustento y los objetivos que persigue la agrupación desde sus inicios.

   “Milla Curá es un espacio en el que los jóvenes tienen la posibilidad de llevar adelante proyectos basados en la solidaridad y la empatía. Quiero aclarar que no tiene banderas políticas ni religiosas”, dijo.

    “Es una agrupación solidaria abierta a todos los jóvenes y a quienes estén  identificados con esta idea y sentimiento de ayudar a los demás”, explicó.

   En mapuche, Milla Curá significa Piedra de Oro. La piedra, en este caso, es la sociedad en pos de la cual deben trabajar los adultos, para mejorarla; y lo que brilla, el oro, son los valores como la solidaridad, el compañerismo y todo lo que sea para ayuda y beneficio de la comunidad.

   El proyecto Rutas Solidarias, comenzó hace tres años, con el nombre “Coronel Suárez sin frío”, solo que en esta oportunidad, lo que cambió es que la agrupación logró conseguir un vehículo para llevar los donativos puerta a puerta.

   “No tenemos presupuesto propio, ni somos una ONG. Solo un grupo de voluntarios que hace todo en base a sacrificio y gracias al aporte de la gente que se identifica con nuestra movida”, indicó.

    La agrupación trabaja desde hace 10 años al servicio de este tipo de iniciativas. Todas las actividades que realizan las comparten en su página de Facebook  Milla Curá Solidario.

   “Siempre colaboramos y llevamos cosas a quienes tienen mayores necesidades, sobre todo a las comunidades rurales, a las escuelitas, como en este caso. Estuvimos en Cura Malal y en D’Orbigny”, contó.

   Juntan ropa en buen estado, la ordenan y seleccionan en un garaje y la llevan a comunidades  que en muchos casos no llegan a los 50 habitantes.

   “La recepción es espectacular. Estas comunidades rurales son muy sensibles, afectivas y familieras. Si te ven una persona solidaria,  enseguida se brindan”, comentó.

   “Solo exigimos que mantengan la distancia y usen tapabocas, como una manera de que todos tomemos conciencia de la necesidad de mantener el protocolo para cuidarnos”, señaló Darío, docente y profesor de Educación Física jubilado.

   A veces, cuando no consiguen todo lo que necesitan suelen poner dinero de su bolsillo para completar lo que falta.

   “El proyecto se cristalizó porque hoy tenemos la movilidad para hacerlo. Fue por iniciativa de los jóvenes, ellos empezaron a tirar estas ideas y ahora es viable porque nos podemos desplazar”, dijo.

   “El sentimiento en los parajes es de agradecimiento profundo, son muy amables, tienen el corazón abierto. Es una sensación muy especial  y las necesidades son muchísimas”, contó.

   “En D´Orbigny hicimos una movida interesante para que le coloquen mas luces al pueblo, que hagan una placita y hasta creamos un parque de plantas nativas en una escuela”, dijo.

   En este pueblo no tienen medio de transporte público para llegar a Suárez, están bastante alejados, deben atravesar caminos rurales y con la Pandemia muchas personas perdieron el trabajo.

   El objetivo de El plan es trabajar es llegar también a otras localidades por fuera del distrito, a pueblos como Carhué (Adolfo Alsina) y Saldungaray (Tornquist)  para visitar a las directoras de las escuelas y dejar el material que requieran.

   Luego de la etapa regional tienen en mente viajar a Tucumán, donde suelen trabajar brindando ayuda a pueblos originarios, sobre todo, a los diaguitas del norte.

   “Trabajar con adolescentes no es fácil. En pandemia solo trabajamos con dos chicos, no queremos que tengan problemas de contagio”, remarcó.

   Milla Curá tiene un programa radial llamado Pensamiento Joven en el que los jóvenes toman la palabra para abordar temas como el bulliyng, la violencia y adicciones.  Hacen debates entre ellos y a veces invitan especialistas.

DESPIECES

La agrupación. La coordinación está a cargo de Darío Gómez y Lilian Báez, quienes lideran a un grupo de unos 20 jóvenes identificados con valores solidarios. Hay padres que también dan una mano y se entusiasman con los proyectos.

Actividades. En estos años han brindado apoyo a pueblos originarios, han realizado visitas a comunidades en San Martín de los Andes y a la comunidad Mapuche de Carhué. También han forestado espacios en Suárez con el apoyo del Vivero Municipal.

Medioambiente. La agrupación organiza y brinda charlas sobre el medioambiente  en escuelas y actividades para forestar que involucran a padres, hijos y autoridades educativas, como una manera de lograr un cambio de mentalidad involucrando a todas las generaciones.

Basura. También han realizado campañas de recolección de basura de forma manual en el Cerro Ceferino y en el arroyo Sauce Grande, de Sierra de la Ventana.