Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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Caldenales: por qué estos bosques están desapareciendo de nuestra región

El desmonte, el sobrepastoreo, los incendios y la extracción indiscriminada de arbustos y árboles para comercialización de leña son las principales causas de la destrucción. En el SOB apenas sobreviven algunos parches de montes, como en la Reserva Natural Laguna Chasicó (Villarino) y en Nueva Roma (Tornquist).

La bióloga e investigadora Andrea Long en un Caldenal de Nueva Roma.

Anahí González Pau
agonzalez@lanueva.com

   Cuando hablamos de bosques lo más común es que pensemos en los bosques de la Patagonia. Sin embargo, a menudo desconocemos que en nuestra región también hay bosques, con plantas y animales adaptados a un clima seco, uno de ellos es el "Caldenal".

   Estos bosques o montes, cuya especie protagonista es el caldén (Prosopis caldenia), también presentan ejemplares de algarrobo, chañar, molle y sombra de toro. Además presentan pastos como la flechilla y arbustos como el cedrón del monte, con propiedades medicinales.  

   En cuanto a la fauna que lo habita, una cámara trampa que el zoólogo Pablo Petracci instaló en un sector cercano a Bahía Blanca, registró a lo largo de seis meses la presencia de ejemplares como el zorro gris, zorrino común, gato montés, chancho jabalí, pumas y aves como inambú de monte,  calandria mora, bandurrita común y gallito copetón, por mencionar algunas.


Zorro Gris (Lycalopex gymnocercus) Crédito: Pablo Petracci.

   Muy cerca de Bahía Blanca, es posible visitar dos de estos montes nativos: uno, en la Reserva Natural Laguna Chasicó (Villarino) y el otro en Nueva Roma (Tornquist).

   Petracci, integrante de Gekko, Grupo de Estudios en Conservación y Manejo de la UNS, explicó que su conservación es clave ya que es una de las pocas áreas boscosas naturales de la provincia de Buenos Aires y por sus características favorece la presencia de la biodiversidad.

  “Los impactos que sufre esta región son la destrucción y modificación de este sector de espinal, para uso agrícola ganadero, extracción de leña, incendios forestales, impactos negativos por especies exóticas invasoras como el jabalí, tráfico ilegal y caza furtiva”, destacó.


Captura de pantalla: cámara trampa. Crédito: Pablo Petracci.

  Consultadas por La Nueva.  dos especialistas, doctoras en Ciencias Biológicas e investigadoras de la UNS brindaron detalles sobre la importancia de conocer estos biomas y explicaron por qué debemos conservarlos, cómo hacerlo y dónde visitarlos en Bahía Blanca y la región.


Chañares en un bosque de Caldenal en Nueva Roma, distrito de Tornquist. Crédito: Andrea Long.

   Andrea Long, es doctora en Biología, docente de la UNS e investigadora en los grupos GIEP, de Investigación en Ecosistemas de Pastizal (Cerzos – UNS) y GEKKO (de investigación en Invasiones Biológicas).

   Ana Elena de Villalobos es Licenciada en Ciencias Biológicas, Magister en Ciencias Agrarias y Doctora en Biología (UNS) Profesora del Departamento de Biología, Bioquímica y Farmacia. Investigadora de CONICET, en el CERZOS donde dirige al Grupo de Investigación en Ecosistemas de Pastizal (GIEP).

  --¿Cuál es la importancia del Caldenal?

   --A.E.d.V: La importancia del Caldenal, como de otros muchos ecosistemas, son los servicios ecosistémicos que brinda a la Naturaleza y dentro de ella a la humanidad. En particular, da refugio y alimento muchas especies de mamíferos, aves, reptiles, insectos, arácnidos y otros artrópodos.

   Es importante mencionar los servicios de polinización: especies que se alimentan de néctar, polen, y partes de flores y cumplen la función de fertilizar a las plantas. Esta fertilización permite la perpetuación de las especies vegetales, tanto las silvestres como las cultivadas. El secuestro de CO2 atmosférico que hacen las plantas, es crucial para amortiguar el Cambio Climático Global.


Chañar en flor.

   El Caldenal posee varios estratos vegetales, por lo tanto ese secuestro se traduce en fijación de carbono como materia verde, que se transforma en hábitat para otras especies, cobertura del suelo, reducción de la desecación y protección contra la erosión, principalmente la provocada por el viento, tan usual en nuestra región.

   --¿Cuáles son los principales obstáculos en la conservación del Caldenal en SOB?

   --AL. Uno de los obstáculos, desde el punto de vista botánico, es la falta de educación ambiental. La mayoría de la gente no valora este tipo de bosques adaptados a climas secos (xerófilos) porque tiene otra idea de “bosque”. Piensa en los bosques patagónicos, por ejemplo. Resulta difícil que la gente se involucre en proyectos de conservación. El famoso dicho “no se puede querer lo que no se conoce”. La falta de valoración de la biodiversidad está íntimamente asociada al desconocimiento.

    --¿Cuáles son los principales disturbios que afectan al Caldenal en nuestra zona?

   --A.L: Cuando hay un exceso de ganado que se alimenta del estrato herbáceo del Caldenal, o sea, de los pastos. Si uno camina por estos bosques en la actualidad, prácticamente no encuentra abundancia de pastos. La mayoría de las veces lo que se ve, es un suelo totalmente descubierto de hierbas o plagado de gramíneas duras (“pajas”), cardos y otras malezas que no son originales del lugar.

  --AEdV: Los disturbios que pueden afectar la composición y estructura del Caldenal son principalmente el sobreuso de sus recursos, ya sea por extracción (desmonte), incendios provocados y el sobrepastoreo con ganado doméstico. El fuego es utilizado para reducir la vegetación leñosa y favorecer a la vegetación herbácea o pastos que consume el ganado.

   Es una herramienta valiosa para el productor, pero también peligrosa si se aplica en épocas desfavorables, durante el verano cuando hay altas temperaturas y viento. Bajo estas condiciones se obtienen resultados contrarios a los buscados, como la volatilización de nutrientes, la pérdida de cubierta vegetal y la esterilización del suelo, matando las semillas que están enterradas y que son las que renuevan el pastizal. El sobrepastoreo reduce la abundancia de los pastos más apetecidos, provocando un reemplazo de especies ya que solo sobreviven aquellas plantas que pueden evitar o tolerar el pastoreo intenso y frecuente. Esto reduce el valor ecológico del Caldenal.

   --¿Cómo afecta la falta de estos pastos a las especies que habitan en el lugar?

   --A.L: Hay aves de pastizal que solo pueden anidar en o al pie de los pastos. No están adaptadas para  anidar en árboles, por lo que, sin pastizales, no pueden realizar nidos y tener a sus crías. Están condenadas a irse, o extinguirse.

   Cuando el estrato de pastos está intacto  además de las especies de aves que anidan en árboles y arbustos se observan  muchas especies de aves de pastizal. Además, estos pastizales protegen el suelo. Las raíces de las gramíneas forman un entramado que retiene el suelo impidiendo que se vuele o se lave con las lluvias.

   --¿Qué lugar ocupa la extracción de árboles con fines comerciales?

   --A.L: La extracción indiscriminada de especies leñosas, tanto de arbustos como de árboles, es uno de los disturbios que más preocupa. Cada vez que vemos que se venden las famosas bolsitas de piquillín en la ciudad, tenemos que pensar que son plantas que se están talando de los bosques del Caldenal sin ningún tipo de control. También se extraen con otros fines madereros, pero lo que más vemos es este uso particular.

   --¿Cómo afecta el desmonte que se realiza para fines agropecuarios?

   --A.L: En este caso la transformación es total, ya que se quitan todos los estratos del bosque para plantaciones. Es muy grave. Existen proyectos agroecológicos que proponen o promueven un uso sustentable de la tierra para fines agrícolas y ganaderos. En términos generales, se propone la convivencia armoniosa entre ganadería, pastizales nativos, aves y especialmente, la conservación del suelo. 

    --A.E.d.V: El problema es el avance de la frontera agropecuaria con cultivos que toleran mejor la sequía. Para implantarlos se recurre al desmonte. Lamentablemente, un período de sequía severa alcanza para reducir al mínimo la cubierta vegetal implantada y ocurre la voladura de suelos, con la pérdida irrecuperable de fertilidad y profundidad de siembra.

   --¿Por qué no da igual que desaparezca el Caldenal? ¿Cómo nos afectaría?

   La ley 14.888 sancionada en diciembre de 2016 estableció las normas complementarias para la conservación y el manejo sostenible de los bosques nativos de la Provincia de Buenos Aires.

   --A.L. Puede que no percibamos la afectación de los caldenales directamente o de inmediato, pero existe. Vamos perdiendo biodiversidad y con esta pérdida, se nos van posibles alimentos, posibles medicinas, historias locales, y lo que para mí es muy grave, perdemos especies de plantas y animales únicas en el mundo que, si se extinguen, no podremos recuperarlas más.

   Muchas especies de plantas del Caldenal nos proveen de alimentos y medicinas, aunque su uso no está difundido. Otro aporte es el de frutos comestibles como los del algarrobo, chañar y piquillín con los que se preparan dulces y bebidas que se consumen o comercializan.

   --¿Cómo se puede llevar a cabo esta educación ambiental?         

   --A.L: Los botánicos tratamos de transmitir a la población el valor de estas especies únicas en el mundo, endémicas de Argentina. No solo por los beneficios que pueden darnos, sino para alentarlos a salir a pasear por el caldenal, y observar las plantas detenidamente.

   Incluso intentamos fomentar su uso como especies ornamentales en la ciudad. Los cedrones del monte, por poner un ejemplo, producen racimos de florcitas blancas de aroma muy agradable y son arbustos vistosos.  Los algarrobos y caldenes plantados y cuidados en la ciudad, crecen más rápidamente que en el campo, por lo que podrían utilizarse en jardines. Y, un dato no menor, como están adaptadas a la sequía y al viento, no requieren prácticamente de ningún cuidado extra.

   También promovemos que las especies del Espinal que han quedado como relictos en diferentes espacios públicos, sean respetadas, se cuiden y que estén acompañadas por cartelería y con información sobre las mismas.

    --Hablando de conservación: ¿Cuál es el deber de la ciudadanía?

   --A.L. : Definitivamente, es nuestro deber como ciudadanos, interiorizarnos sobre qué es el Caldenal, cómo cuidar su biodiversidad y hacer cumplir la ley provincial de bosques nativos. Inclusive, a veces con pequeños actos generamos grandes cambios. Por ejemplo, siempre que podamos, tratemos de no elegir comprar leña de piquillín, o de especies de bosque nativo, y reemplacémosla por leña de árboles cultivados para tal fin (eucaliptus por ejemplo). 

   La difusión y la incorporación de estos temas en la currícula escolar también son importantes. Muchos de los contenidos escolares en Ciencias Sociales y Ciencias Naturales pueden perfectamente trabajarse abordando como contenidos específicos aspectos del Caldenal y el Pastizal Pampeano (que es su región vecina y la que principalmente está sobre el resto de la provincia de Buenos Aires), incorporando los valores de conservación, valores culturales e históricos asociados a ellos, sus problemáticas ambientales y formas de actuar de manera sustentable y responsable.


Bióloga Andrea Long.

   --En Bahía Blanca y la zona ¿qué caldenales se puede visitar y conocer?

   --A.L: En el Partido de Villarino el ambiente predominante es el Caldenal. Lamentablemente no en todas partes podemos verlo en su máxima expresión, ya que ha sido muy impactado por la mano del hombre, pero puede verse en a Reserva Natural Laguna Chasicó.

   Muy cerca de Bahía Blanca, hay un lugar para visitar en la zona de Cueva de los Leones que está a 10 km del centro bahiense. Y saliendo para Ruta 3 sur, también hay muchas partes donde se puede observar Caldenal, con plantas adaptadas especialmente a la salinidad del suelo (que crecen en los “salitrales”). 

   Otro lugar muy pintoresco para ver caldenal es la zona de Nueva Roma, que está muy cerca de Bahía Blanca aunque pertenece al Partido de Tornquist. Sin ir demasiado lejos, todavía queda un bosquecito de chañar, como los que se suelen encontrar en los caldenales, que se puede observar al costado de la Av. Cabrera.

   El tráfico ilegal de fauna silvestre, otra problemática

   El zoólogo Pablo Petracci, a cargo de la Estación de Rescate de Fauna Marina Guillermo “Indio” Fidalgo, destacó que el tráfico de fauna representa una de las principales amenazas de extinción a nivel mundial para muchas especies.

   “En muchas casos esta actividad ilegal posee ramificaciones en los lugares mas recónditos del planeta. Las especies son capturadas en sus áreas naturales y en la mayoría de los casos, trasladadas a los principales centros de consumo donde son comercializadas”, dijo.

   “Muchos de estos ejemplares capturados mueren antes de llegar a los centros de comercialización ya que los trasladan escondidos en condiciones de hacinamiento”, comentó.

   Entre las especies que sufren tráfico de fauna en nuestro país, podemos mencionar a el loro hablador, el cardenal amarillo, la tortuga de tierra, los tucanes, etc.