Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

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Concurso viviendas post Covid: el confinamiento bien entendido

Un conjunto habitacional en China, pensado para enfrentar una eventual situación de crisis sanitaria.

Mario Minervino / mminervino@lanueva.com

 

   El arquitecto español Vicente Guallart ha ganado el concurso internacional para diseñar un nuevo estándar de viviendas post-Covid en una zona de crecimiento urbano de Xiong’an, cerca de Pekín.

   Desarrollado en cuatro manzanas, el conjunto habitacional incluye espacios comunes pensados para permitir enfrentar con mayor cantidad de recursos una crisis como la que ha generado la pandemia del Covid-19 en el planeta.

   El proyecto “la ciudad autosuficiente” concreta un modelo urbano donde las personas pueden vivir, trabajar y descansar en el entorno de sus viviendas y, en épocas de crisis sanitaria, energética o alimentaria poder dar una respuesta mediante confinamientos de diversos grados.

   El Concurso ha recibido más de 300 proyectos, todos con altos criterios ecológicos.

Los pasos

   “No podemos seguir diseñando ciudades y edificios como si nada hubiera pasado”, dice Guallart. "Están ocurriendo fenómenos que nos obligan a repensarlo todo. Nuestras propuestas nacen de la necesidad de aportar soluciones a esa crisis”

   El conjunto está pensado para generar alimentos, energía y objetos de uso diario a partir de una mini industria digital, con impresoras de 3D, situada en sus plantas bajas. Los edificios están cubiertos por invernaderos que permiten producir alimentos y utilizan sus cubiertas para producir energía.

   Todas las viviendas cuentan con una amplia terraza, orientada al sur, que actúa como un regulador térmico, un espacio fundamental para periodos de confinamiento ya que permite jugar y descansar. Asimismo, las están preparadas para tener espacios de teletrabajo, creando redes sociales de escala barrial para el intercambio de recursos.

   El conjunto está construido con edificios de madera e incluye viviendas, residencias, oficinas, una piscina pública, tiendas, mercado, guardería, un centro administrativo y bomberos.

   “Desarrollamos este proyecto durante el confinamiento y decidimos incluir aquellos aspectos que podrían mejorar nuestra vida, un estándar a aplicar en cualquier sitio. Son edificios que se enfrentan a la crisis por la vida y por el clima”, señalaron los autores.