Juicio por lesa humanidad: declaró un hermano del estudiante chileno asesinado en Bahía Blanca

Redacción de La Nueva.

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   El hermano de un estudiante de la Universidad Nacional del Sur (UNS) y de nacionalidad chilena asesinado en 1975 declaró hoy en el marco del juicio por delitos de lesa humanidad que se sigue por crímenes que cometió la organización Triple A en Bahía Blanca durante los años 70.

   Se trata de Carlos Marcelo Oliva Troncoso, quien brindó su testimonio por videoconferencia desde Chile en torno a su hermano Víctor en el marco del debate oral de la causa en el que están acusados Roberto Aceituno (70 años), Juan Carlos Curzio (76), Héctor Forcelli (71) y Osvaldo Pallero (78) como integrantes de una asociación ilícita a la que se le atribuyen 24 homicidios agravados.

   Una vez radicado en Bahía, donde estudiaba Filosofía y Letras en la UNS, Víctor Oliva Troncoso fue secuestrado el 2 de julio de 1975, presuntamente por la organización parapolicial Triple A, y su cuerpo sin vida apareció el mismo día, con 33 impactos de armas de fuego, en el paraje el Pibe de Oro, cerca de la ciudad.

   "Era mi hermano mayor, era un buen hijo, estudiante, la diferencia se hacía que en nuestra casa se leía y se discutía mucho, a él lo llevó a militar de joven en organizaciones políticas en Chile", señaló.

   Oliva sostuvo que a fines de la década del 60 su hermano "empezó a militar cuanto tenía unos 16 años en la secundaria, fue dirigente estudiantil, se tituló de contador y luego prefirió seguir estudiando pedagogía en castellano y se matriculó en la Universidad Católica de Chile con sede en Temuco".

   El hombre expresó que su hermano Lalo, como le dicen "fue militante del movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) de Chile que fue después del golpe de Estado desde nuestra casa nos tomaron presos integrantes de la Fuerza Aérea".

   "No fuimos sometidos a ningún juicio. Yo salí antes que mi hermano del lugar del secuestro. Él recuperó su libertad unos días después y posteriormente sufrió otra detención de la Policía Civil", agregó.

   Oliva Troncoso indicó también que los agentes de la dictadura chilena tenían "la orden de asesinar a Víctor. Lo logramos sacar de Chile a través de algunos conocidos. no se quería ir de su país".

   "Lo convencimos de que se fuera pensando que quizás era la única manera que se mantuviera con vida. Salió un día como hoy, 23 de octubre de 1973, nos dimos un abrazo sin ningún dramatismo entre dos jóvenes hermanos", relató.

   En ese contexto apuntó que, una vez en Argentina, su hermano Víctor estuvo en Cipolletti (Río Negro) y luego se dirigió a Capital Federal, donde "estuvo alojado en una pensión con excompañeros de la Universidad Católica de Temuco".

   "Se enteran de que en Bahía Blanca estaban dando algunas clases profesores que eran exiliados y también de la Universidad Católica de Temuco" al indicar que habían ido "a intentar estudiar".

   "Entiendo que en febrero o marzo del año 1974, había conseguido su residencia definitiva en Argentina, se matricula en Filosofía y Letras en la Universidad Nacional del Sur", remarcó.

   Al ser consultado sobre la vida de su hermano en Bahía, el testigo indicó que "la comunicación que había era solo por cartas que no eran frecuentes y que Víctor le escribía a mi mamá y contaba lo que podía contar, seguramente. Nunca mencionaba nombres, mencionaba que estaba bien, que estaba estudiando".

   "Mi mamá estuvo en Bahía Blanca en el año 1975, tres meses antes que lo asesinaran. Compartió con él unos 20 días y volvió preocupada, nos dijo que estaba nuevamente participando en política, pero igual seguía estudiando", recordó.

   "Yo me quería ir con él y me pidió que no me fuera. Me dijo que mi deber era estar al lado de los viejos (sus padres) y que pensaba volver a Chile", sostuvo.

   En ese contexto explicó que su hermano "estaba militando, que había tenido algún nivel de figuración pública en alguna asamblea y visitas que nos llevaron a un sector donde se recuerda de él donde desarrolló trabajo social y político".

   Sobre el asesinato de su hermano, contó que su familia tomó conocimiento de "una manera sorprendente, cuando mi padre va al almacén del barrio y le pasan un diario de Temuco, donde hay una noticia de Bahía Blanca que un chileno fue encontrado muerto y respondería al hombre de Víctor Oliva". (Télam)