El debut de la selección en Rusia, una pelea en la calle y la condena por apuñalar a un joven
Un grupo de amigos se reunió para festejar un cumpleaños y ver el encuentro entre las selecciones de Argentina e Islandia. En el entretiempo algunos fueron a comprar bebidas, pero en la calle se produjo un violento enfrentamiento entre varias personas.
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El 15 de junio de 2018, en una vivienda ubicada en la zona del barrio 9 de Noviembre, un grupo de amigos se reunió para festejar un cumpleaños. Algunos se retiraron entrada la madrugada del día siguiente, mientras que otros decidieron quedarse para ver juntos el debut de la selección Argentina en el Mundial de Rusia.
En el entretiempo del encuentro ante Islandia (finalizó 1-1), algunos de los jóvenes decidieron ir a comprar más bebidas, aunque a los pocos metros de la casa, y aparentemente por problemas de vieja data, se desató una pelea que finalizó con un hombre apuñalado.
Matías Damián Garrido resultó gravemente herido, ya que la lesión le afectó el estómago, la vesícula y el hígado.
Por el hecho, y en el marco de un juicio abreviado, fue condenado Federico Sebastián Martínez, a quien la jueza del Tribunal en lo Criminal Nº 2, Claudia Cecilia Fortunatti, le impuso una pena de cuatro años de cárcel por el delito de tentativa de homicidio.
Quedó probado que el episodio se desencadenó alrededor de las 11 del 16 de junio, en la esquina de Punta Alta y Leopoldo Marechal, cuando en el medio de una pelea Martínez apuñaló a Garrido con una cuchilla que tenía una hoja de 19 centímetros de largo.
La víctima dijo que el dueño de la vivienda a la que concurrió había salido a comprar algo para tomar y se produjo una pelea en la esquina, por lo que corrieron hasta el lugar para ayudar a su amigo. Explicó que en medio del enfrentamiento sintió el puntazo y comenzó a perder mucha sangre, admitiendo que "se sintió morir".
Manifestó que no sabía el nombre del agresor, aunque que era vecino del barrio y pudo describirlo físicamente.
También declararon varios de sus amigos y hasta su novia, quien describió lo ocurrido y cómo trasladaron a su pareja al hospital en un auto particular.
Por su parte, el acusado brindó otra versión de la historia y aseguró que salió en defensa de su hermano, quien había sido atacado por los otros sujetos.
La jueza descartó la explicación de Martínez. Consideró que solo intentó mejorar su situación legal y que los hechos no sucedieron de la forma en que los relató.
En definitiva, Fortunatti halló probada la responsabilidad del procesado y le impuso la pena de prisión efectiva.