Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

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El campo, entre el diálogo y la incertidumbre de lo que ocurrirá a partir del 10 de diciembre

La vuelta del justicialismo/kirchnerismo no trae buenos recuerdos al sector rural. La dirigencia del sudoeste advirtió que es necesario “no repetir los errores del pasado” y no frenar “la fábrica de dólares”.

Fotos: Archivo La Nueva.

 

Hernán Guercio / hguercio@lanueva.com

   La dirigencia rural tiene clara una sola cosa: no hay que volver atrás.

   El cambio de color político que se va a dar a nivel nacional –y provincial también- a partir del próximo 10 de diciembre hace ruido en la memoria de los productores, y por ahora no quieren pensar en la vuelta de medidas que años atrás pusieron en jaque al sector.

   En voz alta, prefieren decir que los permisos y el cierre de la exportación, los ROES, las retenciones altas no van a volver, y que el justicialismo/kirchnerismo entendió en los últimos años que cuando dejan producir al campo, este genera divisas y mano de obra.

   Hablan del inicio de una etapa de diálogo, pero lo cierto es que una sola palabra resume su sentimiento o sensación respecto de lo que viene: incertidumbre.

 

 

   “El gobierno entrante no tiene que repetir errores del pasado –resume el titular de la Sociedad Rural de Pigüé y secretario de CARBAP, Roberto Cittadini-. Desde el 10 de diciembre comienza una nueva etapa de diálogo con el campo y una de las llaves será escuchar al sector. Tenemos un desafío importante por delante”.

   Guillermo Urruti, titular de la rural suarense, fue aún más tajante: “no se puede volver atrás”.

   “Ya lo dijo (el presidente electo) Alberto Fernández: se va a apostar a la producción, sobre todo a la carne. Esto sería muy bueno para el país”, afirma.

   “Hoy sabemos que el país va a necesitar dólares, generación de mano de obra, que se abran fábricas y lleguen inversiones. Ese debe ser el futuro. Hay que continuar y mejorar lo que hizo (el actual presidente Mauricio) Macri y no volver al pasado”, explica.
 

 

   Por su parte, la presidenta de la Sociedad Rural de Coronel Dorrego, Lucía Merino, fue más cauta en cuanto a su percepción de lo que viene.

   “Creo que todavía es muy incierto lo que vaya a pasar. Sabemos que las reglas de juego que planteó el kirchnerismo fueron pésimas para el campo y quedó demostrado que no es el camino. Quiero creer que no va a pasar lo mismo”, asegura.

   Cittadini reconoce que más allá de las resoluciones económicas que pueda tomar el próximo gobierno, “el chacarero va a seguir apostando por el campo, porque no sabe de otras inversiones”.

 

Roberto Cittadini advirtió que aún no se sabe qué ocurrirá con los impuesto provinciales, y señaló que “no deberían acompañar la devaluación”.

 

   “Uno no tiene la bola de cristal y ni puede saber qué están pensando las nuevas autoridades. Pero sí sé que este es el sector que genera el 60% de las divisas que ingresan al país en concepto de exportaciones. Es la llave fundamental para la economía”, explica.

   “Sería muy poco inteligente que (el gobierno) se ponga en contra a la fábrica de dólares”, agrega.

   El dirigente pigüense lamenta también que Argentina sea “el único país en todo el mundo donde se cobra por exportar”.

   “Vamos a necesitar tener reglas claras, tanto para la venta al exterior como para el consumo interno, dos actividades que van de la mano”, resume. 

 

Lucía Merino recalcó que las retenciones a la exportación son un impuesto distorsivo, aunque también una vía fácil de recaudar para el Estado.

 

   Al respecto, Urruti recuerda que “en estos últimos cuatro años, hicimos que Argentina se abriera al mundo” y se aumentara la producción.

   “Si las elecciones se daban antes de la siembra fina, quién sabe qué hubiera pasado. Hoy seguimos sin querer las retenciones, pero sabemos que no las van a sacar porque el país está complicado”, reconoce.

   “De cualquier manera, tenemos que mirar para adelante y apostar a la producción. Si no, tendremos que volver a marcar la cancha”, advierte.
 

 

   Merino recuerda que en una ciudad como Coronel Dorrego, el 90% de la gente depende directa e indirectamente del campo.

   “Es el sector que genera alimentos y actividad económica en el pueblo. En épocas difíciles, se nota mucho la caída de la actividad en el día a día de la localidad”, aclara.

   “Acá, el campo mueve todo”, insiste.

 

Preocupación por la sequía

 

   No solo la cuestión política a mediano plazo es la que preocupa al campo. La sequía del último año, con lluvias escasas y poco oportunas, también provoca varios dolores de cabeza pensando en la cosecha que está por comenzar. Y las perspectivas para la siembra de granos gruesos tampoco son las mejores.

   “Venimos de un invierno complejo, con pocas precipitaciones –lamenta Cittadini-. El desarrollo de los cultivos entre el 40 y el 50% menor al año pasado. En muchos lotes de cebada con poco desarrollo, los productores prefirieron largar la hacienda y aprovechar después el lote para hacer gruesa”.

   Al respecto, aclara que no quedan prácticamente reservas de humedad en los lotes, lo que también provocará que los chacareros sean cautos al momento de invertir.

 

 

   “Lo más preocupante es lo que pueda llegar a pasar en 2020, con un contexto de país como el que tenemos y después de una cosecha magra”, dice.

   Urruti señala que en la zona de Coronel Suárez, hoy los trigos y las cebadas “se ven flacos”, aunque reconoce que con las precipitaciones de hace unas semanas, el chacarero se animó a sembrar un poco de gruesa.

   “Algunos productores prefirieron guardar un poco de dinero para la gruesa, en vez de invertir de más en la fina”, señala.

 

Desde Rosario

 

   En la semana la Sociedad Rural de Rosario se mostró preocupada por las versiones que existen sobre algunas medidas económicas que se adoptarían, considerándolas  “inapropiadas”.

   Entre ellas, se encuentran el posible aumento de las retenciones a la soja, el trigo y el maíz, y la institución de un dólar diferencial más bajo.

   “Ha quedado demostrado que en la medida que se disminuye la presión impositiva, aumenta la producción del sector y por ende genera mayor ingreso de divisas”, se indicó a través de un comunicado emitido por la institución.

   Además, se explicó que el incremento de impuestos afectará al comercio de insumos, servicios, fletes, maquinarias y puestos de trabajo, elementos movilizados por la actividad productiva.

   “Las próximas autoridades deben tomar conciencia de los momentos que vive la actividad y establecer la existencia de reglas claras y previsibles para incrementar la producción, sostener la inversión y procurar mayor ingreso de divisas”, se expresó.