Olimpo volvió a festejar en el Fortín tras casi 16 años: “Fue una muestra de carácter”

Redacción de La Nueva.

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Por Mikel Iñurrategui / minurrategui@lanueva.com  
(Nota publicada en la edición impresa)

    Los goles de Ismael Blanco y Silvio Carrario en la histórica tarde del 27 de agosto de 2006 tendrán nueva compañía en la estadística del clásico entre Villa Mitre y Olimpo.

   Si bien la competencia es otra —y el contexto también—, luego de casi 16 años el aurinegro volvió a ganar un derby en El Fortín y dio un paso más en su sueño de ascenso, tras imponerse por 3 a 0 el pasado miércoles por la fecha 26 de la zona Sur del Federal A de fútbol.

   Un golazo de chilena de Nicolás Capraro, una exquisita definición de taco de Braian Guille y un cabezazo de Martín Ferreyra fueron el combo letal de eficacia para la victoria del equipo conducido por Carlos Mayor, líder en soledad del grupo, ahora con 10 puntos de ventaja sobre el tricolor, su único perseguidor.

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   "Esta fue una muestra de carácter. Fue un triunfo clave para lo que se viene; esto sirve y suma mucho. Hay que seguir insistiendo porque todavía falta", avisó el DT olimpiense una vez consumada la goleada.

   Luego de aquel triunfo por 4 a 1 por la Primera B Nacional, Olimpo volvió a visitar El Fortín en otras tres oportunidades, todas por competencias oficiales de esta divisional, la tercera a nivel nacional. Y siempre fue el dueño de casa el vencedor: 2 a 0, 3 a 1 y 5 a 1.   

   Además, contando los partidos desarrollados en el estadio de Maipú y Necochea por todas las competencias nacionales, el historial indica que la Villa se impuso en cinco ocasiones, el aurinegro en dos e igualaron apenas una vez.

   Volviendo al actual certamen, el elenco de Mayor fue el primer equipo en marcarle tres goles al conducido por Carlos Mungo.

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   "Imaginaba que ellos iban a salir a atacar, por los jugadores que había en cancha y porque lo necesitaban. Sabíamos que ellos eran fuertes en el juego aéreo y nosotros somos fuertes defendiendo. Sacamos todo, creo que no tuvimos problemas en eso", admitió Carlos Mayor.

   Este triunfo también fue el segundo de manera consecutiva en los clásicos, ya que por la primera rueda del certamen Olimpo había festejado en el Roberto Carminatti: 2-0.

   "Nosotros -agregó- sabíamos que teníamos que estar ordenados, cortar y salir rápido. Estar sólidos defensivamente también era clave, eso era más o menos lo que habíamos hablado. Después, el desarrollo del juego se dio de una forma y ellos generaron situaciones, aunque nosotros acertamos", agregó el entrenador.

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   Al momento, Olimpo lidera el grupo con holgura, tras obtener 54 puntos de los 75 en juego y luego de haber ganado 16 encuentros y empatado 6.

   Encima le sacó 10 puntos a su clásico rival, que lo escolta con 44 unidades y un partido menos.

   No obstante, aún restan ocho fechas para la finalización de la etapa regular y la llegada de los playoffs, donde se definirá el verdadero objetivo: el ascenso.

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   "Al plantel le diría que hay que seguir laburando, esto fue una muestra de carácter, ellos mismos demostraron que tienen unos huevos (sic) bárbaros", enfatizó el DT.

   "Cuando vienen estas paradas difíciles el grupo aparece, pero todavía falta. El objetivo del ascenso continúa latente, tenemos que seguir corriendo detrás de eso", insistió el orientador.

   A su equipo le quedarán siete "finales" antes de llegar a un hipotético cruce y empezar a luchar mano a mano (siempre a un solo enfrentamiento) por el sueño de retornar a la segunda división del fútbol argentino.

   "Este triunfo ante Villa Mitre es un envión clave para lo que viene, aunque no hay que relajarse ni conformarse. Se disfruta poco, porque ya en pocas horas tenemos otra final, y 24 puntos en juego es largo trecho todavía", cerró Mayor.