Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

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Dos bahienses entre los mejores del mundo

El trabajo, el esfuerzo y el talento componentes clave para la consagración ed dos deportistas de nuestra ciudad.

   Finalmente llegaron a su ciudad los integrantes bahienses del plantel argentino que ganó la copa del Mundo en Qatar, generando un sentimiento en el país como hace tiempo (o nunca) se había vivido.

   Germán Pezzella y Lautaro Martínez, formados en clubes locales y desde muy jóvenes iniciando su carrera en el profesionalismo porteño para luego continuarlas en equipos europeos, pasaron las fiestas con sus familias y esa presencia fue la oportunidad para poder brindarles todo el cariño y la admiración por lo logrado.

   El entusiasmo por la copa obtenida, la tercera en el historial de la selección nacional, fue manifestado a cada jugador y a los integrantes del cuerpo técnico en sus ciudades y pueblos, cada uno de ellos disfrutando de un logro con la gente que los vio nacer y crecer.

   Sin dudas será la perspectiva que genera el paso del tiempo la que se encargará de dar a este suceso su verdadera dimensión, y que dos integrantes del plantel, que además fueron protagonistas de todo el proceso que vivió la selección desde la etapa clasificatoria, sean integrantes de familias locales, educados y formados en escuelas y clubes de la ciudad.

   Hay además de parte de ellos un claro mensaje de humildad, de la importancia del trabajo, de la confianza y del esfuerzo. Claro que el talento es parte de sus historias, pero de poco sirve si no se lo apuntala con todos esos componentes.

   Y los bahienses salieron a la calle para ser parte de ese reconocimiento. Para manifestar su orgullo y su cariño, en una ciudad donde muchas veces los sentimientos no son habituales de ser expuestos de esa manera.

   El deporte bahiense es parte de una página de gloria del fútbol mundial y ese desempeño, que todos siguieron por televisión, se hizo carne y realidad al ver a dos de sus protagonistas compartiendo su logro de manera directa, con simpleza y gratitud.