Bahía Blanca | Sabado, 20 de abril

Bahía Blanca | Sabado, 20 de abril

Bahía Blanca | Sabado, 20 de abril

Ser campeones, un camino a seguir

La selección de fútbol dejó un mensaje de cómo talento más trabajo más humildad conducen a resultados positivos.

   Muchos quizás no lo recuerden, pero por décadas los argentinos nos jactábamos de ser los mejores del mundo en el fútbol pero como a la hora de la verdad siempre quedábamos en el camino nos consolábamos asumiendo que éramos los “campeones morales”.

   Esto es, ser en los papeles el mejor pero por distintas circunstancias no plasmarlo en la realidad, quedarnos a mitad de camino.

   En rigor hubo que comenzar a sumar al talento un conjunto de facetas ausentes: organización, un esquema de trabajo, estudiar a los rivales, priorizar los importante y, sobretodo, la indispensable humildad que permite a cualquier superarse a partir de reconocer carencias, errores y manejos impropios.

   La selección argentina de fútbol ha obtenido en las últimas cuatro décadas tres copas del mundo.

   Eso indica que ahora sí, esa creencia sin demasiada base se ha convertido en realidad, que  somos parte de los que pueden tener aspiraciones ciertas a llegar a las instancias finales.

   La pregunta es si es posible transpolar esa conducta, esa seriedad, esa responsabilidad, esa coherencia que se tiene en el campo deportivo al resto de las actividades de una sociedad.

   Los estudiosos del tema aseguran que la práctica de cualquier deporte no cambia la personalidad de una persona sino que acentúa ciertos rasgos que ya están alojados en él o que se van moldeando con la práctica.

   Ojalá esta muestra de capacidad deportiva, que nos ha hecho campeones del mundo, empiece a manifestarse también en el día a día de un país que soporta desde hace años altos índices de pobreza, de corrupción, de manejos impropios, de valores cuestionables, de enormes dificultades económicas y morales.

   Sería fantástico que nuestros gobernantes encuentren un camino de honestidad, trabajo e inteligencia que permita a las generaciones futuras ser parte de los mejores del planeta, en serio.