De espacio residual a colorido lugar de encuentro
Creatividad e ingenio para reinventar espacios residuaes o degradados de la ciudad
Es periodista, ingeniero civil y docente de la Universidad Nacional del Sud en materias relacionadas con el Patrimonio arquitectónico y el planeamiento urbano. Ha publicado notas en revistas Vivienda, Todo es Historia, Obras & Protagonistas y Summa +. Participa en varios micros radiales referidos a la historia de Bahía Blanca. En dos ocasiones recibió primera mención por parte de ADEPA en el rubro Cultura e Historia.
Mario Minervino / mminervino@lanueva.com
Muchos lugares residuales ofrece toda ciudad, tierras sin uso o abandonadas que pueden ser reconvertidas en espacios de encuentro y de renovación barriales a partir de intervenciones menores.
Es el caso de la intervención del estudio de arquitectura New Practice, que ha transformado un sitio no utilizado en el centro de de Craigmillar, en Edimburgo, Escocia, en un espacio público de usos múltiples.
Llamado Walk-Up Avenue, el sitio incluye un espacio flexible para eventos, un escenario con techo verde, un jardín comunitario, una cafetería y áreas de juego.
El espacio fue construido por el Ayuntamiento para apoyar a pequeñas empresas que puedan desarrollar actividades en el sector y convertirse en punto de encuentro en la zona. "Busca crear un espacio acogedor y colorido para que la comunidad se reúna y lo haga propio", dijo New Practice.
El estudio diseñó una especie de "faro" de colores brillantes, de nueve metros de altura, hecho con listones de madera para marcar la entrada, algo brillante e intrigante que indique claramente su uso comunitario.
De todo un poco
En el sitio hay una estructura de acero con un interior que admite varios usos y servicios de cafetería a cargo de empresas locales. Ese edificio, arrendado a un privado, tiene como destino ser utilizado para desarrollar programas educativos.
Dentro de la parcela hay un escenario y una plaza con jardines y asientos, invitando a los vecinos a utilizarlo para organizar sus propios eventos.
“Es un espacio que proporciona la infraestructura necesaria e invita a la comunidad a hacer uso de él según lo requiera, sea para descansar, socializar, jugar, hacer ejercicio, actuar, vender a pequeña escala o hacer jardinería.
Se espera además que el lugar impulse la regeneración más amplia del área, al tiempo de contribuir a la estrategia llamada “vecindario de 20 minutos”, un esquema que tiene como objetivo brindar a los residentes acceso a una variedad de servicios ubicados a poca distancia, factibles de ser alcanzados a pie o en bicicleta desde sus hogares.