Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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Viviana Marfil destacó el trabajo de los auxiliares de la educación

La secretaria general de ATE también habló de la provisión de elementos de limpieza en los establecimientos educativos, a las obras de gas inconclusas y la cantidad de escuelas que están bajo la órbita del gremio. "Me preocupa la utilización de artefactos eléctricos en las escuelas”, afirmó.

Por Javier Oscar Schwab / jschwab@lanueva.com

   Los compañeros auxiliares de educación son los encargados de la limpieza sanitaria de los establecimientos. Gracias a ellos no ha habido transmisión de enfermedades víricas dentro de las escuelas, llámese sarampión, rubeola, paperas, varicela, etc.”, dijo Viviana Marfil, secretaria general de ATE (Asociación Trabajadores el Estado) Bahía Blanca.

    “Las escuelas nunca estuvieron cerradas, los compañeros se han ido turnando, aunque no hubiera clases porque las mismas debían estar abiertas y en adecuadas condiciones sanitarias”, remarcó.

   “Lo único que me preocupa, que le escuché decir a la titular del Consejo Escolar local (por Fabiola Bousi), es el tema de las obras de gas inconclusas, para lo cual se aprobó colocar calefactores eléctricos, sin tomar en cuenta que la mayoría de los establecimientos no cuentan con línea trifásica y esto derivará, sin dudas, en problemas de elevado consumo y que salten las llaves térmicas”, remarcó.

   Marfil señaló que un artefacto eléctrico eleva considerablemente el consumo y que las instalaciones eléctricas de los establecimientos, por lo general, no están en buen estado.

   “Son instalaciones viejas. Donde enchufás un aparato te eleva el consumo y si lo hacés con dos o tres artefactos a la vez corrés el riesgo de quedarte sin electricidad, porque van asaltar la térmicas”, aseguró.

   El Consejo, según detalló Marfil, destina partidas de dinero para arreglos y limpieza de los artefactos de gas, algo que sucede todos los años.

   “El problema es que el año pasado casi no hubo clases, y este año el proceso se repitió hasta ahora y no se buscó una solución al problema”, apuntó.

   En cuanto a los elementos de bioseguridad, Marfil destacó que, por ahora, los establecimientos están bien provistos.

   "Hicimos un relevamiento y los elementos de bioseguridad están. Hay jabones, toallas, lavandina, alcohol en gel, desinfectantes, limpiadores de baño y demás elementos de limpieza. Son indispensables y no pueden faltar; al menos creemos que eso no va a pasar".

   “Se debe tener en cuenta que cada vez que alguien concurre al baño hay que higienizar; el proceso se repite varias veces al día”, puntualizó.

   Marfil también se refirió al personal disponible para cubrir todos los cargos en Bahía Blanca y la región.

   “Los puestos están cubiertos. Hay personas mayores de 60 años que no se pueden presentar a trabajar porque son de riesgo, al igual que quienes están con patologías severas. Hemos podido cubrir con personal suplente, resaltando que las escuelas nunca estuvieron cerradas durante el período escolar que llevamos de pandemia”, aseguró.

   “ATE abarca a los distritos de Bahía Blanca, Coronel Dorrego, Monte Hermoso, Tornquist, Saavedra y Coronel Pringles. En nuestra ciudad contamos con 1.500 auxiliares de la educación”, aseveró.

   Además de las labores habituales, en los establecimientos educativos el personal auxiliar está abocado a abastecer con comida a los sectores necesitados, habida cuenta que los comedores no están funcionando.

   “Se está realizando la comida en las escuelas porque los comedores no funcionan. Entonces muchos de esos compañeros han pasado a ser parte del equipo de ayuda, especialmente cuando se arman y se reparten los bolsones de alimentos, algo que ocurre cada 15 días”, reveló.

  “Ahora vienen casi armados y se ayuda al docente con la tarea de distribución, algo que sucede en la mayoría de las escuelas. las mismas no tenían comedor, pero la grave situación que se está atravesando motivó esta transformación”, sostuvo.

   “En Bahía Blanca hay 250 establecimientos con asistencia, entre Jardines de Infante y escuelas primarias y secundarias”, aseguró Marfil.

   En cuanto al personal afectado por el Covid, la titular de ATE remarcó que el contagio no se produjo en los establecimientos sino en el movimiento generado cuando se asiste a los mismos.

   “La ciudad fue creciendo, pero no se respetó el formato de crear más escuelas y centros de salud en los barrios que se anexaron en los últimos años.

   Por ejemplo, entre el ‘73 y ’74 se estableció por ley que cuando se iniciaba un barrio nuevo, llámese Fonavi o Rosendo López en Bahía, se incorporaba un establecimiento educativo.

   “Para ejemplificar, más acá en el tiempo se inauguraron los barrios SUTIAGA, el Metalúrgico UOM y Petroquímicos y ninguno tiene escuela; la más cercana es la de Grünbein, que está a 15 cuadras y que ya tiene toda su matrícula completa. Luego se agregaron Villa Elena, Punta Blanca y otros con los mismos inconvenientes".

   “No se tuvo en cuenta el crecimiento de la ciudad en concordancia con obras para la educación y salud. Menciono esto porque cuando empieza el virus la cuestión del traslado se torna un problema, porque implica un movimiento general de docentes, auxiliares, alumnos y padres a los establecimientos. Los contagios se generan en los recorridos que se hacen para llegar, que generalmente implican distancias considerables”.

   “A eso se le suma el agregado de las burbujas y el de los padres que se quedan a esperar a sus hijos, que suelen dictados de tienen clases durante 2 o 3 horas. Muchos padres no pueden volver porque el costo es significativo y se quedan a esperar afuera del establecimiento, muchas veces en vehículos cerrados por el frío reinante".

   "Las escuelas funcionan con un protocolo acertado, con ventilación permanente, aunque el frío en esta época del año es un complicación más porque se está propenso a un resfrío o una gripe”, sintetizó Viviana Marfil.

El tema salarios

   Desde el Consejo Directivo Provincial de ATE, buscan terminar con la pérdida del poder adquisitivo que el proceso inflacionario ha generado en los salarios de los y las estatales bonaerenses, producto principalmente de los formadores de precios y sus aumentos insensibles y desmedidos.

   El pedido formal ya fue presentado al Ministerio de Trabajo provincial y plantea revisar el acuerdo paritario cerrado en febrero 2021 con el objetivo de rever los porcentajes y los plazos de otorgamiento del aumento, para poder cubrir los corrimientos de la proyección inflacionaria.

   Asimismo, desde ATE, piden que se adelante y se reabra la discusión paritaria correspondiente al último tramo del año, acordada en un principio para el mes de noviembre, pero dado los acontecimientos vividos en materia inflacionaria es menester que se realice de manera inmediata.

   En este sentido, el secretario general de ATE Provincia de Buenos Aires, Oscar de Isasi, resaltó que: “en consonancia con lo planteado por el presidente Alberto Fernández y compartido por el gobernador que para reactivar el consumo hay que aumentar salarios, y teniendo en cuenta que el proceso inflacionario tuvo en estos últimos meses una escalada importante principalmente en el rubro alimenticio, desde ATE entendemos que se hace necesario, por un lado, adelantar puntos de la cuota que sigue del aumento salarial acordado, y por otro lado, adelantar la convocatoria de paritarias para discutir y acordar un nuevo aumento salarial que nos permita no perder a manos de la inflación y quedar por encima de ella de acá a fin de año”.