Bahía Blanca | Jueves, 25 de abril

Bahía Blanca | Jueves, 25 de abril

Bahía Blanca | Jueves, 25 de abril

Causa Margiotta: “Esta situación cansa mucho, pero no voy a aflojar”

Rechazaron el arresto domiciliario para uno de los condenados. Eva Molina, la madre del chico asesinado, aseguró que “si Fabrizio sale de la cárcel desaparece”.

   Si hay algo que la familia Margiotta sabe es luchar y tener fe en su reclamo de justicia.

   A mediados de 2002 sufrieron la muerte de Federico, de apenas 13 años. A partir de allí, un trámite judicial con idas y vueltas que está cerca de llegar a las dos décadas.

   Un debate que finalizó en absolución, la revocación de ese fallo y un nuevo juicio, en el que Jorge Fabrizio y Pedro Martínez fueron sentenciados a prisión perpetua por el crimen del adolescente pringlense.

   La decisión fue confirmada por el Tribunal de Casación, aunque aún no se encuentra firme, debido a que los abogados defensores apelaron ante la Corte provincial.

   Mientras tanto, varios pedidos de beneficios realizados por los imputados fueron rechazados por la Justicia, el último de ellos hace pocos días, cuando el Tribunal en lo Criminal Nº 3 denegó una solicitud de excarcelación extraordinaria y arresto domiciliario requerida por Fabrizio.

   Los jueces Christian Yesari, María Mercedes Rico y Daniela Fabiana Castaño entendieron que no existe una fundamentación suficiente para decretar la morigeración de la prisión preventiva que el imputado cumple en la Unidad Penal Nº 19 de Saavedra.

   “Estoy de acuerdo con los jueces, no queremos que salgan de ahí, porque tienen amigos afuera y todos sabemos que no estaban solos en esa fiesta. Tienen amigos de alto poder económico y los van a ayudar a escapar, eso es lo que espera. Si Fabrizio sale de la cárcel desaparece”, sostuvo Eva Molina, madre de la víctima.

   La mujer consideró también que ambos imputados reciben en la prisión la atención y el tratamiento que necesitan.

Lucha constante

   También se refirió al hecho de que en los últimos tiempos los magistrados rechazaron en varias oportunidades beneficios solicitados por ambos procesados.

   “Siento impotencia, es como que se siguen burlando de nosotros. Soy la madre de la víctima y me duele, porque mi hijo está pagando una condena que ellos le dieron”.

   “Esta situación cansa mucho, pero no voy a aflojar. A pesar de que perdí la mitad de mi vida, siempre le digo a mis otros hijos que voy a hacerlo hasta el final. Federico no se merecía morir así y esta gente tiene que estar allí por el daño que ha hecho”, siguió diciendo Eva.

Esperanza

   Por otra parte, manifestó tener la esperanza de que la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires no haga lugar a la apelación de los defensores y se ratifique el fallo condenatorio, resuelto en noviembre de 2018 por los jueces bahienses.

   “Estamos esperando que resuelvan. Esperamos que haga lo mismo que Casación, que confirmó el fallo. La fe no la perdimos nunca”, aseguró.

   Sobre la decisión reciente, consideró que “la Justicia nos volvió a escuchar. El doctor (Héctor) Bertoncello es la voz de Federico a través de nosotros y le estoy muy agradecida”.

   También dejó en claro que no piensa bajar los brazos y abandonar la lucha.

   “No me voy a cansar, le pido a Dios todos los días que me dé fuerzas. Si logré meterlos en la cárcel, caminando en La Plata y golpeando puertas, quiero que sigan ahí”, sentenció Eva Molina.