Dos datos que entusiasman al Gobierno: vacunas y el mensaje de Cristina

Eugenio Paillet

   En despachos políticos de la Casa Rosada se entusiasmaban en las últimas horas por dos datos que según afirman los interlocutores van en línea con lo que se ha propuesto el Gobierno: confirmar con la llegada de millones de dosis de vacunas el favor de la sociedad que se estaría demostrando en una decena de encuestas, y cierto aire de “entendimiento” que notan en la oposición menos cerrada respecto de la conveniencia de ratificar a la pandemia como el enemigo número uno.

   Hablan concretamente del estudiado aparato publicitario que rodeó la llegada a Ezeiza de la tanda de vacunas de AstraZeneca que permitió superar los 20 millones de dosis compradas por el Gobierno desde que se inició la pandemia, que contó con la presencia al pie del avión de presidente Alberto Fernández, del jefe de Gabinete Santiago Cafiero y de la ministra de Salud, Carla Vizzotti.

   A la par que se inició la difusión masiva por los medios de comunicación del flamante spot que hace referencia a ese hito, con fondo musical épico en el que se escucha el Himno a la Alegría, del cuarto movimiento de la célebre Novena Sinfonía de Beethoven. “Estuvo todo planificado, la presencia de Alberto y al mismo tiempo el lanzamiento de la publicidad”, dijeron en el primer piso de la Casa Rosada.

   Más allá de los problemas que ha tenido el Gobierno para proveerse de vacunas y los inconvenientes que aún persisten sobre la posibilidad de acordar con los proveedores estadounidenses como Pfizer, Moderna y Johnson, el oficialismo consideró un “hito importante” haber sobrepasado el número de veinte millones de dosis llegadas al país, mayormente la rusa Sputnik V y la china Sinopharm, además de la de AstraZeneca que se produce en el país y se envasa en México.

   Otro motivo de satisfacción que era palpable en las últimas horas en despachos del gobierno se refieren al apoyo explícito que el ministro de Salud de la Ciudad, Fernán Quirós, le otorgó a las palabras que pronunció ayer en La Plata la vicepresidenta Cristina Kirchner, quien pidió dejar a la pandemia y las vacunas fuera de la disputa política. El funcionario porteño sostuvo durante su informe matinal que no podía “sino estar completamente de acuerdo” con los dichos de Cristina. “No podemos buscar alternativas partidarias en cuestiones de tamaño dolor”, fueron las palabras de Quirós que agradaron en la Jefatura de Gabinete.

   “Es reconocer que Cristina no está tan errada, porque la oposición nos ha chicaneado todo el tiempo con el tema vacunas buscando sacar rédito electoral”, dijo un funcionario del entorno presidencial al tanto de la cuestión.

   La reacción favorable del Gobierno a aquel aval que le dio Quirós al llamado de la vice a dejar de lado la pelea política en el marco de la pandemia tiene su razón de ser en datos puntuales. Al menos media docena de encuestas que aterrizaron en los despachos oficiales, un par de ellas encargadas por La Cámpora y la Jefatura de Gabinete, pero también varias de consultoras independientes, han mostrado en los últimos días un sesgo similar, que revela que la sociedad se muestra más proclive a votar candidatos del oficialismo en las próximas elecciones en la medida en que se potencia el proceso de vacunación masiva de la población. Y que, por el contrario, el malestar del votante independiente contra el Gobierno se manifiesta casi de manera exclusiva cuando padece la falta de vacunación, más que por otros reclamos como la inflación, el desempleo o la inseguridad.

    “En este momento tenemos que vacunar y vacunar porque es lo que nos está pidiendo la gente por encima de otras cosas o de la pelea política”, dicen los voceros en línea con la estudiada presencia de Alberto en Ezeiza o el mensaje de Cristina en La Plata.

   Por último, y como tercer dato de la realidad vinculada a la pandemia aunque también a la política que se registra en las últimas horas en los despachos oficiales, no resultó indiferente para algunos funcionarios la salida a escena de la vicepresidenta en medio de algunos bloopers discursivos que tuvieron a mal traer al Presidente. “Nos estamos reacomodando, siempre es bueno”, sonó en clave un colaborador de Cristina al hacer notar “el paralelismo” entre la salida a escena de la líder del Frente de Todos y el rol “más de gestión” que empezó a mostrar Fernández en las últimas 48 horas.