Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

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“Creer que un control de precios mejora la condición de vida de los habitantes es una utopía”

Fernando Rivara, presidente de Acopiadores, no está de acuerdo con las creencias que asignan a la cotización de los granos la responsabilidad por la inflación en los valores de los alimentos en nuestro país.

Fernando A. Rivara, presidente de la Federación de Centros y Entidades Gremiales de Acopiadores de Cereales. / Fotos: Prensa Acopiadores

Guillermo D. Rueda / grueda@lanueva.com

   “Buscamos salidas que no resultaron en ninguna parte del mundo”.

   Es la conclusión de Fernando A. Rivara, presidente de la Federación de Centros y Entidades Gremiales de Acopiadores de Cereales, toda vez que amplió, y pidió, por una ecuación necesaria en esta coyuntura: “Más trabajo y menos relato”.

   Lo hizo en el marco de los 75 años de la entidad, donde repasó la historia y aportó la visión coyuntural de temas de agenda para el acopio y el sector agropecuario.

   “Argentina viene convulsionada desde hace varios años. Tenemos un Estado sobredimensionado e ineficaz. Y a un Poder Ejecutivo que no presenta planes consistentes de estabilización y desarrollo, conviviendo con una elevada inflación a la que pretende controlar con alquimias retrógradas”, sostuvo.

“También un poder legislativo costoso y con resultados muy pobres. Hasta ahora, por ejemplo, no pudimos sancionar ni la ley de semillas ni la de uso de fitosanitarios”, aseguró.

   “Del mismo modo, un poder judicial lento, temeroso, supeditado a la política y descalificado por gran parte de la sociedad”, afirmó.

   Rivara añadió que esta realidad también se refleja en las jurisdicciones provinciales y municipales, en otro segmento de la disertación ofrecida en el Salón de Operaciones de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.

   También dijo que es necesario crecer, estimular inversiones, bajar los impuestos laborales y a la producción y defender a los creadores de fuentes de trabajo en vez de expulsarlos al exterior.

   “Afirmar hoy, como dijo el secretario de Comercio (NdR: Roberto J. Feletti), que si no hay una política de desacople no es posible sostener precios es demostrar una supina ignorancia, porque los precios ya están desacoplados”, afirmó.

   “Por otro lado, más grave aún es creer en la utopía que un control de precios mejora la condición de vida de los habitantes”, aseveró el dirigente de la localidad bonaerense de Alberti.

   En otro tramo de la recorrida de los principales temas de la agenda, en materia de precios y mercados Rivara puso en valor el rol de los mercados de futuros y de las cámaras arbitrales de las bolsas.

   Asimismo, se opuso a las creencias que asignan a los precios de los granos la responsabilidad por la inflación en los valores de los alimentos. “Rechazamos las ideas de desvincular, desacoplar, como se suele decir, los precios internos de los internacionales”, dijo.

   “No sólo producen efectos negativos sobre la producción, adopción de tecnología, crecimiento y hasta posibles desabastecimientos, sino que terminan subsidiando a los ricos, lo que es una de las más atroces consecuencias de estos mecanismos”, explicó.

“Está probado que lo más eficaz y equitativo, en caso de ser necesario, es subsidiar la demanda de quienes lo necesiten”, agregó.

   “Estadísticas confiables, sistema de precios que reflejen la escasez, confianza en los plazos de pago y el uso de los mercados de futuros y opciones es el virtuoso cóctel para funcionar sin racionamientos”, indicó Rivara, quien es médico veterinario. 

   Con respecto a las regulaciones y controles sobre los operadores del comercio de granos, denunció los graves daños que la AFIP ocasiona a la producción, comercio e ingreso de divisas, tanto al trabar la logística, no permitiendo la emisión de cartas de porte, como al calificarlos “sujetos de alto riesgo” (SISA categoría 3) por supuestos incumplimientos formales, en varios de ellos ajenos a la voluntad del damnificado, vulnerando elementales derechos constitucionales.

   También dijo que, en lo que se refiere a las reglas privadas aplicables a la comercialización de granos, el pago del 100 % del precio en las operaciones de contado con mercadería conforme es un ejemplo claro de las reivindicaciones pendientes.

   Desde la Federación de Acopiadores también se manifestó el apoyo a los mecanismos actuales de contratación libre y tarifas meramente orientativas en el transporte automotor.

   ”La existencia de un doble arranque discrimina a las plantas de acopio, lo que aumenta artificialmente el costo del transporte. El hecho de que empresarios del transporte pretendan imponer tarifas obligatorias en un mercado competitivo es de un anacronismo increíble”, definió.

   Rivara también se refirió a la actividad ferroviaria en relación a la incidencia en el sector agropecuario.

   “Es imprescindible que se regularice la situación de terrenos e instalaciones ferroviarias, a los fines de asegurar su plena utilización en la logística de los granos”, expresó.

   “El desprecio de las sucesivas autoridades de Ferrocarriles a cumplir con la ley perjudica la logística de las exportaciones argentinas y ataca el desarrollo de pequeñas localidades en el interior profundo. La escrituración de terrenos, donde hace años se construyeron plantas de silos, es imprescindible para normalizar una deficiencia de casi 50 años”, comentó.

   Rivara destacó, asimismo, el compromiso de la Federación de Acopiadores con las buenas prácticas agrícolas y recordó el trabajo realizado con el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), a partir del cual se elaboró un manual orientado especialmente al trabajo en las plantas.

Las 200.000 toneladas de trigo HB4

  Desde el ángulo de la tecnología en general, y la biotecnología en forma particular, la Federación de Acopiadores ratificó el total apoyo a la actividad.

   “La conjunción de necesidades de la demanda, con propuestas tecnológicas del lado de la oferta, dan sostén y sustento al avance y al aumento de la producción para satisfacer demandas cada vez mayores”, sostuvo Rivara.

   “Por lo tanto, no tiene sentido la tecnología sobre productos que no sean demandados”, dijo.

   “El esfuerzo por bajar costos y aumentar la producción necesita de una demanda activa que esté dispuesta a comprar más cantidades”, añadió, como un prólogo para aclarar que el rechazo al trigo HB4 se basa en esos argumentos.

   “El agravante es que si, por cualquier circunstancia, no se cumpliera con protocolos muy estrictos de aislamiento total de las 200.000 toneladas de trigo HB4 que se producirían en esta campaña, y se produjera cualquier filtración y contaminación de los trigos convencionales, los perjuicios económicos serían impensados, pudiendo hasta llegar a considerar a nuestro país como un origen no confiable y derrumbarse la demanda”, explicó.

Rivara exigió contar con un sistema de garantías a cargo de la firma Bioceres, con suficiente capacidad para resarcir al mercado de los perjuicios que pudiera ocasionar cualquier filtración no deseada.

   También que, desde Acopiadores, se lamenta el acompañamiento irrestricto del Gobierno nacional a esta empresa, y sin asumir responsabilidades ante los riesgos.

Erize y el precio del trigo

   “Si hubiera un mercado libre y transparente el precio del trigo podría valer 443 dólares FOB. Pero eso no va a pasar. Tendremos que conformarnos con U$S 370 dólares. ¡Fíjense la distorsión! Quedan 8,5 millones de toneladas sin vender, sobre todo en el sur”.

   Lo dijo Enrique Erize, de la consultora Nóvitas y uno de los expresidentes de la Federación de Acopiadores.

Enrique Erize, titular de la consultora Nóvitas.

   “Los precios están distorsionados por el intervencionismo estatal en la Argentina. La soja subió 5 % en un año. Ese intervencionismo altera el proceso de formación de precios”, dijo e interpeló: ¿Las cotizaciones FOB son reales? “El promedio es que la Argentina esté 20 dólares encima de Chicago, pero este año estuvimos toda la cosecha --20 U$S. Suena raro tanto tiempo seguido”.

   El consultor alertó que, según el USDA, “los stocks estarán en 10,1 % en un año. Eso es para tomar nota. El USDA proyecta 49 M/T, pero tenemos un año doble La Niña. En 2021 la producción fue de 45 M/T; y en 2022 podría ser de entre 34 y 39 M/T”.