Cada vez más especialistas dejan de atender por obra social

Redacción de La Nueva.

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Por Cecilia Corradetti / ccorradetti@lanueva.com

   Si un paciente de nuestra ciudad requiere una consulta con un especialista, o mejor dicho aún, con un especialista jerarquizado y varios años de experiencia, difícilmente logre ser atendido a través de una obra social.

   Al menos eso es lo que sucede en determinadas especialidades médicas, como pueden ser neurología, psiquiatría, reumatología, endocrinología o dermatología, entre otras.

   La situación responde a varios motivos, señalaron desde la Asociación Médica de Bahía Blanca (AMBB), entidad que ejemplificó con un dato clave: la ciudad posee 13 neurólogos de los cuales ninguno atiende por obra social.

   Es que la seguridad social, alertó el titular de la AMBB, doctor Carlos Deguer, no les brinda una respuesta adecuada, por eso optan por salidas individuales.

   Claro que dichas consultas también pueden canalizarse a través del ámbito público aunque en este caso los turnos son a muy largo plazo.

   Así, médicos consultores o con títulos específicos que llevan varios años de trayectoria y que poseen cierta cartera de clientes, deciden atender solo de manera particular.

   El valor promedio de una consulta de este tipo ronda entre los 500 y los 2.000 pesos, dependiendo de la especialidad.

   El doctor Oscar Colombo, especialista consultor en Neurología, de 64 años, consideró que el hecho de atender por obra social y, al mismo tiempo, cobrar un plus, representa un accionar que –más allá de que existe y es frecuente-- que va por fuera del convenio y puede acarrear problemas.

   “En mi caso, me pareció más ético eliminar la atención con bonos y canalizarla directamente en forma privada, aunque otorgando el recibo correspondiente para el reintegro”, sostuvo.

   Claro que para llegar a esta instancia, aclaró, atravesó un proceso “poco alentador”: seis años de carrera, cinco de especialización y algunos otros de consolidación en el medio.

   “En esta rama, gran parte de la vida productiva se pasa en formación, por lo tanto no es una especialidad masiva. Hoy está de moda, pero cuando la elegí era toda una rareza”, expresó.

   “Ya consolidado y con un consultorio montado, atender en forma privada otorga mayor independencia, porque se sabe con certeza lo que se gana”, continuó.

   De lo contrario, dijo, “nuestra remuneración es incierta porque no somos exclusivos en la negociación”, aludiendo que a través de los bonos se cobra con los descuentos pertinentes y a mediano plazo.

   “Es lógico que, en medio de la inflación, se pierda poder adquisitivo” indicó.

   Lo cierto es que, para buena parte de los médicos bahienses, trabajar de forma independiente representa mayor ingreso y dinero líquido en el bolsillo.

Un plus sobre el bono

   Si los vaivenes económicos del país han derivado en ajustes de todo tipo y en todos los rubros, el de los médicos no resulta una excepción.

   En nuestra ciudad, prácticamente todos los profesionales cobran y perciben un arancel por encima del bono correspondiente a la seguridad social.

   “Desde hace años se cobra un porcentaje y ahora, en medio de esta situación, es más generalizado”, sostuvo Gustavo De Salvo, miembro de la AMBB, aunque aclaró que prácticamente no se registran denuncias.

   En el caso de IOMA, que en nuestra ciudad cuenta con 33 mil afiliados estatales, el cobro del plus médico siempre representó un serio problema.

   Dicha irregularidad se puede denunciar en la pagina web www.ioma.gba.gob.ar  o en las oficinas de Soler y Las Heras.

   Así, en caso de que al afiliado se le solicite abonar una suma adicional, extra o plus, tiene que exigir la factura y presentar el reclamo. La factura no es indispensable para realizar el reclamo.

   Con la denuncia se inicia un expediente administrativo en IOMA para reintegrar al afiliado lo abonado y la sanción al profesional que ha efectuado el cobro, si correspondiera.

  De todos modos, este cobro se ha generalizado tanto, que no lo padece solo IOMA sino prácticamente todas las obras sociales.