Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

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Volvió a pedir una excarcelación después de no cumplir la anterior

Guillermo Marich está acusado de vender drogas en Patagones. Hace 4 años, tras ser liberado en la causa, se fue a vivir sin permiso a Ecuador y recién volvió el mes pasado, cuando fue detenido.

Foto: Archivo LN.

   En junio de 2013, la policía de Carmen de Patagones detuvo un auto que llegaba desde la Capital Federal con 65 ladrillos de marihuana (más de 40 kilos) que estaban escondidos en los paneles traseros del coche.

   Las escuchas telefónicas de la investigación determinaron que Guillermo Marich era el destinatario de la droga, que tenía como fin, lógicamente, su comercialización.

   En medio del proceso, la jueza federal de Viedma, Mirta Filipuzzi, le otorgó el beneficio de la excarcelación, el 2 de julio siguiente, con la imposición de reglas de conducta, como fijar domicilio y no ausentarse por más de 24 horas sin aviso.

   Sin embargo, Marich las desoyó y al tiempo se fue del país. Se mudó a Ecuador.

   El 13 de abril de 2016, la excarcelación fue revocada y se ordenó su captura. La medida recién se concretó el 10 de enero pasado, cuando se lo arrestó en un paso fronterizo ubicado en La Quiaca, provincia de Jujuy, mientras intentaba volver al país.

   Trasladado a la delegación Ingeniero White de la Prefectura Naval Argentina, donde hoy está detenido, volvió a pedir la excarcelación a través de su defensa, aunque esta vez se la rechazaron.

   El Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Bahía Blanca -que próximamente lo someterá a juicio oral por el delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización en grado de tentativa- desestimó el pedido, con los votos de los jueces Roberto Daniel Amábile y Silvia Mónica Fariña, en calidad de subrogantes.

   Marich había fundamentado su pedido en razones laborales y lazos familiares y que desconocía al tiempo de su partida al exterior en qué lugar estaba radicada la causa en su contra. A modo alternativo había pedido el uso de una tobillera de control.

   Los jueces consideraron "desaconsejable" otorgarle la libertad a partir del riesgo de fuga existente y la proximidad del debate.

   Además, destacaron la "gravedad del delito", con "trascendencia e inquietud general", "daño social" y la "extensa potencialidad lesiva hacia la salud pública".

   En el caso de la pulsera, aclararon que no la electrónica no es la vía correcta para estos casos, sino para los arrestos domiciliarios.

Persecución y captura

   La madrugada del 24 de junio de 2013, personal de Prefectura intentó interceptar un auto en la zona cercana a la terminal de ómnibus, cuando su conductor trataba de entregarle un envoltorio a una persona que lo esperaban en la esquina.

   El automovilista escapó a toda velocidad e incluso se habrían escuchado algunas detonaciones durante la fuga.

   Con refuerzos, y ya en la zona céntrica de Patagones, el hombre -que solo se identificó con el apellido de Parente y como oriundo del Gran Buenos Aires- se vio rodeado y tuvo que parar la marcha.

   En la requisa del coche, al ser retirados los paneles internos de las puertas traseras, se encontraron los panes de droga que totalizaban 40 kilos.

   Las escuchas permitieron llegar a Marich como el destinatario del material, que tenía un indudable fin de comercialización.

   En ese momento, el caso tuvo gran repercusión en la comarca Viedma-Patagones, teniendo en cuenta la cantidad de la marihuana incautada, infrecuente para el lugar.